Los pasajeros viajaron este sábado de Campeche rumbo a Cancún.
Ciudad de México, 16 de diciembre (SinEmbargo).– Luego de ser inaugurado por el Presidente Andrés Manuel López Obrador, el Tren Maya arrancó este sábado su primer viaje con turistas que partieron de Campeche rumbo a Cancún.
El estreno del Tren Maya, que partió alrededor de las 07:15 horas desde la estación San Francisco, en Campeche, saturó el aeropuerto de esa ciudad.
En Cancún, los pasajeros también compraron boletos, pero para dirigirse a Campeche. Roberto García Méndez se convirtió en el primer pasajero en abordar el Tren Maya durante este sábado, un hecho que lo llenó de alegría y orgullo pues dijo está haciendo historia.
Viviendo en Cancún desde hace tres años arribó este sábado en punto de las seis de la mañana para ser el primero en poder ver las instalaciones.
En la estación ya lo esperaban con una gorra y una camiseta por ser de los primeros, por lo que detalló estará todo el fin de semana en Campeche y volverá el día lunes en el mismo Tren Maya.
“Estoy muy emocionado, contento me parece que es un gran proyecto que traerá mucha prosperidad, sin duda es muy innovador y seguiremos viajando siempre en el tren”, aseguró en entrevista con el medio local Por Esto!
La cuenta del Tren Maya en X, antes Twitter, compartió algunas fotografías de los primeros pasajeros, quienes lucían sonrientes, portando souvenirs y ondeando banderas de México.
El viernes, el Presidente Andrés Manuel López Obrador inauguró el primer tramo del proyecto favorito de su administración, un tren turístico de 20 mil millones de dólares que recorrerá la península de Yucatán.
El llamado Tren Maya, que contará con 1,500 kilómetros de vías que estarán resguardadas por 2 mil 800 guardias nacionales, está pensado para conectar complejos turísticos costeros e importantes centros arqueológicos. Sin embargo, aún no está terminado y se espera que el resto de los tramos estén concluidos a fines de febrero.
Insisto, el #TrenMaya es todo un éxito. Sorprendente la visión de nuestro presidente @lopezobrador_ pic.twitter.com/bhpupoFCb6
— Freddy Oliviery (@FreddyOliviery) December 16, 2023
#Enterate| 📽️ Durante los primeros viajes del @TrenMayaMX al público en general hubieron porras para @lopezobrador_.
"¡Míren nada más!…¡ #EsUnHonorEstarConObrador !",dicen los pasajeros a bordo del 'Jaguar Rodante'.#AMLO #MeQuieroSubirAlTrenMaya #RedAMLO #TrenMaya pic.twitter.com/fC2nLKtwwn
— Manuel Galeazzi (@ManuelGaleazz1R) December 16, 2023
«Es una obra magna. No exageramos si decimos que no hay una obra así en la actualidad en el mundo y se logró también en tiempo récord», dijo López Obrador desde la ciudad colonial de Campeche, en la costa del Golfo de México, al celebrar la activación del primer tramo de 473 kilómetros que irá desde esa localidad sureña hasta el centro turístico de Cancún, en la costa del Caribe. Se trata de un tercio de todo el proyecto que cubre el tramo menos controvertido.
Se tardará unas cinco horas y media en recorrer ese tramo a una velocidad media de 80 kilómetros por hora, aunque las autoridades han prometido que el tren podrá alcanzar hasta 120 kilómetros por hora. Habrá dos trenes diarios en cada sentido, con paradas en la ciudad colonial de Mérida, las ruinas mayas de Chichén Itzá y otras 10 poblaciones.
En un principio las autoridades habían previsto que cobrarían una tarifa más baja a los mexicanos y otra más alta a los turistas extranjeros, pero los únicos precios listados para los primeros trayectos se diferenciaban sólo por boletos de primera clase y clase turista.
Un boleto de primera clase en uno de los dos trenes diarios de Cancún a Mérida costará el equivalente a 68 dólares. Un boleto de autobús de primera clase en la misma ruta cuesta unos 58 dólares y los autobuses salen aproximadamente cada media hora.
En noviembre de 2021 el Ejecutivo promulgó un amplio decreto que obliga a todas las agencias federales a aprobar automáticamente cualquier proyecto de obras públicas que el gobierno considere que afecta a la seguridad nacional.
El tren fue construido en parte por el Ejército mexicano y será gestionado por las Fuerzas Armadas a las que López Obrador ha confiado más proyectos que ningún otro presidente en al menos un siglo.
Tras la reforma de 1995, que otorgó concesiones a dos empresas ferroviarias privadas, en México prácticamente no existe servicio ferroviario regular de pasajeros. En el país operan la mexicana Ferromex y una filial de la estadounidense Kansas City Southern.
Unos pocos trenes recorren rutas relativamente cortas hacia atracciones turísticas como las Barrancas del Cobre, en el norte de México, o la que opera en la región productora de tequila, en el estado de Jalisco.