Durante varios meses, se pudo ver a mujeres haciendo alarde abiertamente de la norma del pañuelo en Teherán y otras ciudades, lo que provocó una nueva represión en verano.
Por Danica Kirka
LONDRES (AP).— Cientos de personas se congregaron el sábado en el centro de Londres para conmemorar el primer aniversario luctuoso de Mahsa Amini, la joven kurdo-iraní de 22 años que murió bajo custodia policial en Irán el año pasado, desencadenando protestas en todo el mundo contra la teocracia islámica conservadora del país.
Al grito de ”¡Mujeres! ¡Vida! Libertad”, la multitud sostuvo su retrato y se unió en torno a la memoria de la joven que murió el 16 de septiembre de 2022 tras ser detenida por violar supuestamente la ley iraní que obliga a llevar pañuelo en la cabeza. Se llevaron a cabo protestas similares en Italia, Alemania y Francia.
“Hacemos un llamado a todos a recordar a quienes han sido asesinados, pero también a continuar la lucha, porque esta lucha tiene que llegar hasta el final. Mahsa Jina Amini y muchos otros no pueden haber muerto en vano”, sostuvo Maryam Namazie, una activista iraní de derechos humanos en el Reino Unido. “Tenemos que tener una sociedad mejor como resultado de esta enorme y hercúlea lucha”
En Irán, las autoridades trataron de impedir que el aniversario reavivara las protestas que sacudieron el país el año pasado. El padre de Amini fue detenido en la puerta de su casa después que la familia indicara que tenía previsto reunirse en su tumba para celebrar una misa de conmemoración, denunció el grupo kurdo de derechos humanos Hengaw. Habitantes del centro de Teherán reportaron una fuerte presencia policial y se vieron fuerzas de seguridad en el oeste de Irán, donde la minoría kurda protagonizó protestas masivas el año pasado.
Hengaw reportó una masiva huelga general en las zonas kurdas el sábado, y difundió vídeos y fotografías que parecían mostrar las calles vacías y las tiendas cerradas. Human Rights Activists in Iran, otro grupo que sigue de cerca los acontecimientos en el país, también dio a conocer la huelga general. Medios de comunicación oficiales no mencionaron la huelga.
Amini, una joven kurdo-iraní de la región occidental, murió tres días después de haber sido arrestada por la policía de la moralidad, supuestamente por infringir las leyes que obligan a las mujeres a cubrirse el cabello en público. Aunque las autoridades afirmaron que había sufrido un infarto, los partidarios de Amini dijeron que la policía la había golpeado y que había muerto a consecuencia de las lesiones.
Su muerte desató protestas que se extendieron por todo el país y escalaron rápidamente hasta convertirse en llamados al derrocamiento de la teocracia islámica iraní, que lleva ya cuatro décadas.
Las autoridades respondieron con una violenta represión en que murieron más de 500 personas y se detuvo a más de 22 mil, según grupos de derechos humanos. Las protestas se calmaron en gran medida a principios de este año, pero aún hay signos generalizados de descontento.