Aunque la tensión y la amenaza de una división ensombrecen el panorama de Morena rumbo al 2024, el Presidente López Obrador sigue confiando en que no pasará nada que afecte el movimiento que promueve la continuidad de la Cuarta Transformación.
Ciudad de México, 13 de septiembre (SinEmbargo).- Andrés Manuel López Obrador, Presidente de México, aseguró de nueva cuenta que no hay ni habrá ruptura en Morena, esto pese al amago que hizo Marcelo Ebrard el lunes, cuando afirmó que si no hay una resolución positiva para los argumentos que expuso en la queja contra el proceso interno, entre los cuales destacó una parcialidad hacia Claudia Sheinbaum Pardo, dejaría de pertenecer al partido.
«En el caso de Marcelo, ya lo dije también: es mi amigo, mi compañero, lo estimo y no puedo opinar más. Quisieran nuestros adversarios, porque es natural, que hubiese fractura, una ruptura en el movimiento. No hay eso, ni habrá porque nuestro pueblo está a favor de la transformación», dijo durante su regreso a las conferencias de prensa matutinas, luego de su gira por Colombia y Chile.
El mandatario mexicano insistió en que se acabó el «dedazo», el acarreo y la «cargada», es decir, «todo esto que hicieron nuestros adversarios durante mucho tiempo, durante siglos; lo que nosotros padecimos».
«Nos robaron elecciones. ¿Ustedes creen que [Felipe] Calderón ganó la elección presidencial en el 2006? Ahí se los dejo de tarea. Ahí está el caso. Nada más que no se habla de eso», ejemplificó desde Palacio Nacional.
López Obrador también recordó que Emilio Lozoya Austin, exdirector general de Petróleos Mexicanos (Pemex), ha sostenido en sus declaraciones «que él recibió dinero durante la campaña del licenciado [Enrique] Peña [Nieto] para pagar gastos de campaña, incluso que le dio dinero a legisladores del PAN para que votaran a favor de la Reforma Energética, de la privatización del petróleo y nada de eso es noticia».
Al ser cuestionado por el anuncio de Ebrard Casaubón sobre la formalización de su movimiento político nacional, zanjó el tema con la siguiente declaración: «Ya no puedo hablar de eso».
«Nada más decir que yo ya terminé. Ya entregué la dirección del movimiento de transformación a Claudia Sheinbaum, que es excepcional, extraordinaria. Es una mujer con convicciones, con principios, honesta y, además, preparada, muy preparada», destacó el Jefe del Ejecutivo federal.
Además, subrayó que la ahora Coordinadora de los Comités de Defensa de la Cuarta Transformación tiene un doctorado, y que «es una mujer con muy buenos sentimientos y honesta». «Yo estoy contento», concluyó.
¿QUÉ HA PASADO CON EBRARD?
El lunes pasado, Marcelo Ebrard dio a conocer que iniciará una gira nacional, como la que anunció un día antes Claudia Sheinbaum Pardo, la virtual candidata de la izquierda a la Presidencia en 2024.
En su mensaje, comentó que esperará a que Morena tome una decisión sobre la queja que interpuso contra el proceso interno para definir si se va o se queda en el partido fundado por Andrés Manuel López Obrador. Pero mientras, según indicó, fortalecerá un movimiento nacional.
Ebrard anunció que a partir del próximo 18 de septiembre comenzará a realizar reuniones con sus simpatizantes para formalizar un movimiento político nacional. “A partir del 18 de septiembre vamos a organizar y formalizar nuestro movimiento político nacional”, adelantó.
El llamado de Ebrard Casaubón a realizar un movimiento político nacional, viola los estatutos de Morena, partido al que se afilió en julio de 2022, ya que esto no está permitido en las reglas del partido guinda, reconocidas por el Instituto Nacional Electoral (INE). Así lo establece el Artículo 3 en su inciso G:
“La afiliación (a Morena) será individual, personal, libre, pacífica y voluntaria, sin corporativismos de ninguna índole; sin que se permitan facciones, corrientes o grupos que vulneren la soberanía del partido, es decir, su capacidad exclusiva de dirección general”.
Morena prohibió en sus estatutos la existencia de acciones, corrientes o grupos que vulneren la soberanía del partido ante la experiencia de las tribus que mermaron al Partido de la Revolución Democrática (PRD), del que provienen Marcelo Ebrard, Claudia Sheinbaum y el propio Presidente, quien fue su candidato presidencial en dos ocasiones.
Las “tribus”, como se conocían, fueron grupos que se conformaron dentro del Sol Azteca y que generaron las divisiones que al final diluyeron a esta fuerza política ahora aliada de los partidos Acción Nacional y el Revolucionario Institucional.
23-000932El jueves 7 de septiembre, incluso antes de que dieran a conocer los resultados de la encuesta para elegir a la o el candidato presidencial del oficialismo, Marcelo Ebrard y su equipo rompieron con Morena, al denunciar un proceso lleno de irregularidades y parcialidad.
De los seis contendientes, el excanciller fue el único en reclamar estas situaciones, los demás: Adán Augusto López Hernández, Gerardo Fernández Noroña, Manuel Velasco y Ricardo Monreal reconocieron el triunfo de Claudia Sheinbaum, quien salió favorecida con los resultados de la encuesta interna.
De hecho, apenas el domingo por la noche, Marcelo Ebrard interpuso un recurso ante la Comisión Nacional de Honestidad y Justicia de Morena para demandar la nulidad y posterior reposición del proceso interno para la designación de la Coordinación de Defensa de la Transformación. Asimismo, advirtió que acudirá al Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) en caso de que la Comisión no atienda debidamente sus quejas.
Ese recurso, según ha dicho Ebrard, definirá su permanencia en Morena, mientras que él ya comienza a movilizar a su base aún cuando eso implique ir contra las reglas que pide respetar.