El 86 por ciento de los mexicanos rechazan terminantemente que los servidores públicos utilicen los recursos que les son confiados y que pertenecen a todos, para su provecho personal. Sobre este y otros indicadores se habló en Puntos y Comas.
Ciudad de México, 25 de agosto (SinEmbargo).– El 65.8 por ciento de la población considera que los gobernantes mexicanos tienen muy poco o nada de respeto por el cumplimiento de las leyes, entre la población en general el 61 por ciento estima que la gente común también tiene muy poco o ningún respeto por el cumplimiento de las leyes, revela la Encuesta Nacional del Cultura Cívica 2020, realizada por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), un robusto estudio realizado en más de 25 mil hogares de toda la República.
Esa percepción negativa, se expuso en el programa Puntos y Comas que se transmite en el canal de YouTube de SinEmbargo Al Aire, refiere cómo el poco o nulo cumplimiento de la ley es más alta en las entidades del centro de la República, como Ciudad de México, Estado de México, Hidalgo y Morelos, donde el escepticismo entre la gente marca un 67.6 por ciento de desconfianza. En contraste con esta percepción, es en la Zona Maya, que incluye Campeche, Chiapas, Quintana Roo, Tabasco y Yucatán, donde el 47 por ciento considera que las leyes se respetan mucho o algo.
El 86 por ciento de los mexicanos rechaza además que los servidores públicos utilicen los recursos que les son confiados y que pertenecen a todos, para su provecho personal; de igual manera el 83 por ciento censura que los funcionarios públicos acepten sobornos, aún a pesar de sus que salarios sean bajos y un 71.9 por ciento considera que no es apropiado que los servidores públicos apoyen a sus amigos o familiares con empleos en las oficinas de gobierno.
También es muy alto el porcentaje, 86.8 por ciento, de personas que consideran que, por igual, tanto mujeres como varones, deben tener oportunidades de trabajar en todas las áreas de gobierno. Y por supuesto, el 71 por ciento rechaza terminantemente la premisa de que las mujeres carezcan de la preparación, la experiencia y el carácter para decidir por ellas mismas.
En tanto, para el 73 por ciento de las personas que viven en México la principal causa de discriminación es la clase social a la que pertenecen y en segundo lugar, como causa para ser discriminado, está la forma como la gente se viste o como se arregla para hacer su vida cotidiana.
