El cantante resurgió por sus interpretaciones junto con Lady Gaga; antes, había sido admirado por Frank Sinatra y en los últimos años de su vida sufrió de Alzheimer.
NUEVA YORK (AP/EuropaPress) — Tony Bennett, el eminente estilista cuya consagración al cancionero clásico estadounidense le valió durante décadas la admiración de artistas desde Frank Sinatra hasta Lady Gaga, murió el viernes, dos semanas antes de cumplir los 96 años.
Su publicista Sylvia Weiner confirmó el deceso a la Associated Press y dijo que murió en su ciudad natal de Nueva York. No hubo una causa específica, pero le habían diagnosticado el mal de Alzheimer en 2016.
El último de los grandes cantantes de salón de mediados del siglo XX, Bennett solía decir que la ambición de su vida era crear “un catálogo de hits más que discos de hits”. Publicó más de 70 álbumes que le granjearon 19 Grammys competitivos, 17 de ellos después de cumplir los 60 años.
Además, gozaba del afecto profundo y duradero de fans y colegas.
Bennett deja un legado de más de 70 años en los escenarios, más de 150 discos y un repaso a un cancionero histórico con temas de Cole Porter, los Gershwins, Duke Ellington, Rodgers y Hammerstein entre otros.
El cantante neoyorquino, nacido en 1926 como Anthony Dominick Benedetto, mantuvo prácticamente intacta su popularidad hasta los últimos años de su carrera merced en particular a sus colaboraciones con las artistas Lady Gaga y Amy Winehouse.
En febrero de 2021, su esposa, Susan Bennett, confirmó que Bennett llevaba padeciendo la enfermedad de Alzheimer en 2016, lo que ni impidió que el cantante siguiera grabando y compareciendo públicamente hasta agosto de ese mismo año cuando apareció con Lady Gaga en el Radio City Music Hall para el espectáculo titulado "One Last Time".
Tras el evento, Bennett acabó alejándose de la luz pública hasta su fallecimiento de este viernes, confirmado por su publicista, Sylvia Weiner, al New York Times.