A principios del pasado mes de noviembre un recorte masivo de personal marcó la llegada de Elon, quien se justificó al asegurar que Twitter perdía 4 millones de dólares diarios, por lo que, además, subastó parte del mobiliario corporativo de las oficinas de San Francisco para costear las pérdidas.
Ciudad de México, 9 de julio (SinEmbargo).- Bajo la promesa de «intentar ayudar a la humanidad» y de desarrollar una «plaza pública digital para la civilización», el magnate Elon Reeve Musk, fundador de SpaceX y director general de Tesla, adquirió la plataforma de Twitter en octubre del 2022.
Casi nueve meses después de la compleja transacción, la conocida red del pajarito se encuentra en su peor momento luego de haber sufrido diversos cambios, a manos del propio Musk, que no han dejado muy contentos a los millones de usuarios suscritos, y ante el reto que implicará la llegada de la plataforma de Meta y Mark Zuckerberg, Threads.
La actualización más reciente terminó por limitar el número de tuits que cada usuario puede leer al día dependiendo del tipo de cuenta que se tenga.
En primera instancia Musk explicó el pasado 1 de julio, a través de su cuenta de Twitter, que “las cuentas verificadas están limitadas a leer 6 mil publicaciones por día, las cuentas no verificadas a 600 publicaciones al día y las nuevas cuentas no verificadas a 300 publicaciones al día”.
Como era de esperarse, miles de internautas no tardaron en expresar su inconformidad por lo que, a tan sólo unas horas después del anuncio, el empresario estadounidense, de 52 años de edad, compartió que los límites aumentarán a 10 mil para verificados, mil para no verificados y 500 para cuentas nuevas no verificadas, pero esto no fue suficiente para «calmar las aguas».
De acuerdo con Musk, la medida respecto a los límites impuestos se ejecutó con el objetivo de evitar “niveles extremos de extracción de datos y manipulación del sistema”.
Now to 10k, 1k & 0.5k
— Elon Musk (@elonmusk) July 1, 2023
No obstante, esta no ha sido la única actualización que ha sufrido la red social desde su adquisición por parte del estadounidense.
«EL PÁJARO ESTÁ LIBRE»
«El pájaro está libre». Esas fueron las palabras que el magnate compartió en Twitter tras haber adquirido la red social, fundada por Jack Dorsey en 2006, por 44 mil millones de dólares, tan sólo siete meses después de haber iniciado la transacción y tratar de cancelarla supuestamente porque la plataforma no había proporcionado información suficiente sobre las cuentas falsas dentro de la misma.
Tras las declaraciones de Musk las acciones de Twitter cayeron al menos un 11 por ciento —pasaron de valer 54.20 dólares a 32.64 dólares— durante su primer día de operaciones. Ante lo ocurrido, Twitter interpuso una demanda para obligar al empresario a completar la adquisición que inició en abril del 2022.
No obstante, la que pudo haber sido una de las batallas legales más importantes de los últimos tiempos quedó en el olvido cuando el hombre más rico del mundo accedió a pagar por hacerse de la red social.
A principios de noviembre un recorte masivo de personal marcó la llegada de Elon, quien se justificó al asegurar que Twitter perdía 4 millones de dólares diarios, por lo que, además, subastó parte del mobiliario corporativo de las oficinas de San Francisco para costear las pérdidas.
Según informó en noviembre del 2022 el medio alemán Deutsche Welle, de los 7 mil 500 trabajadores con los que contaba Twitter sólo mil 300 lograron conservar sus empleos.
De acuerdo con The New York Times, una de las claves detrás del interés de Musk por adquirir Twitter radicaba en Sudáfrica, lugar donde creció como una persona blanca en medio del sistema de segregación racial apartheid.
“He invertido en Twitter porque creo en su potencial para ser la plataforma de la libertad de expresión en todo el mundo, y creo que la libertad de expresión es un imperativo social en una democracia funcional”, afirmó entonces Musk sobre su intención de comprar la plataforma.
¿PAGAR POR UNA VERIFICACIÓN?
Meses después de la llegada del fundador de Tesla a la compañía, Twitter sorprendió a sus usuarios al anunciar que a partir del pasado mes de abril comenzaría a eliminar las marcas de verificación azules, de tal forma que quien quisiera conservarla debería suscribirse al programa de Twitter Blue, en el que las empresas son marcadas con una insignia dorada, las cuentas gubernamentales con una gris y el resto de usuarios con una azul.
Fue así como se modificó el sistema de verificación y varias personalidades, instituciones y hasta medios digitales se quedaron sin la famosa «palomita azul», que antes de la compra de Musk no tenía costo alguno.
A través de un informe, Bloomberg aseguró que los suscriptores de Twitter Blue no llegaban al 1 por ciento del total de usuarios activos de la plataforma por lo que Musk empezó a incrementar los beneficios para aquellos que accedieran a pagar por la verificación.
more words more words more words more words more words more words more words more words more words more words more words more words more words more words more words more words more words more words more words more words more words more words more words more words more words more…
— Twitter (@Twitter) February 8, 2023
La posibilidad de publicar videos de hasta dos horas de duración y editar tuits publicados, fueron algunos de los beneficios para quienes habían accedido a pagar 8 dólares mensuales por la suscripción a Twitter Blue.
Aunado a ello, otros de los cambios que dieron de qué hablar fue la sección de «Para ti», en la que los usuarios pueden tener acceso a un feed seleccionado a través de un algoritmo, y la extensión de caracteres para los tuits publicados por usuarios verificados, lo que terminaría con la característica de microblogging de la red social.
EN ESPERA DE LA MAYOR BATALLA TECNOLOGICA
En medio de las polémicas y críticas hacia la red del pajarito, Meta, compañía fundada por Mark Zuckerberg, compartió a finales de junio que se encontraba preparando el lanzamiento de Threads, la nueva aplicación que busca tomar ventaja de los altibajos de Twitter para plantarse como su competencia directa.
“Estoy listo para un combate en jaula si él lo está”, escribió Musk luego de que un usuario de Twitter le advirtiera a modo de broma que Zuckerberg estaba entrenando jiu jitsu.
Por su parte, Zuckerberg, CEO de Meta Platforms, empresa matriz de Facebook e Instagram, respondió y pareció estar de acuerdo con la propuesta de Musk al escribir «envíame la ubicación».
Hasta el momento se desconoce si Musk y Zuckerberg llegarán o no al ring, especialmente porque el director de Tesla a menudo tuitea sobre la acción prematuramente o sin cumplir. No obstante, ya hay apuestas a favor y en contra de ambas personalidades.
De acuerdo con las probabilidades proyectadas de DraftKings, hasta el pasado jueves se ubicaron en 140+ para Musk y -160 para Zuckerberg.
A tan sólo unos días de su lanzamiento, Threads se anunció en Apple Store como una «aplicación de conversación basada en texto» que está vinculada a Instagram por lo que los usuarios de la aplicación de foto y video podrán mantener sus usernames y seguir las mismas cuentas en la nueva plataforma.
Desde las primeras siete horas de su lanzamiento, decenas de millones de personas se registraron en la nueva aplicación de Meta, lo que terminó por confirmar que los internautas se encontraban en busca de una alternativa a Twitter tras los cambios impuestos por Elon Musk.
De acuerdo con Zuckerberg, hasta el pasado jueves 30 millones de personas se registraron en Threads, incluidos 10 millones durante las primeras siete horas de su lanzamiento en EU y más de 100 países, incluidos Gran Bretaña, Australia, Canadá y Japón, y se presume que el número va en ascenso.
Los primeros usuarios incluyeron celebridades como el chef Gordon Ramsay, la estrella del pop Shakira y el actor Jack Black, así como Airbnb, Guinness World Records, Netflix, la revista Vogue y otros medios de comunicación.
«LA COMPETENCIA ESTÁ BIEN, LAS TRAMPAS NO»
Ante el inesperado éxito de Threads, Twitter amenazó con emprender acciones legales contra Meta por su nueva aplicación.
De acuerdo con una carta obtenida por el medio estadounidense Semafor, Alex Spiro, abogado que representa a Twitter, acusó a Meta de usar ilegalmente los secretos comerciales de la red del pajarito y otra propiedad intelectual al contratar a exempleados de la red social para crear una aplicación similar.
Por su parte, el portavoz de Meta, Andy Stone, replicó al informe asegurando que «nadie en el equipo de ingeniería de Threads es un exempleado de Twitter, eso no es un problema».
UPDATE: Elon comments, confirming the reports of the lawsuit https://t.co/qEOaNf5QBh
— T(w)itter Daily News (@TitterDaily) July 6, 2023
Según la carta obtenida por Sefamor, Spiro apuntó que Twitter “tiene la intención de hacer cumplir estrictamente sus derechos de propiedad intelectual”, y señaló el derecho de la empresa a buscar remedios civiles o medidas cautelares.
Finalmente, Elon Musk se limitó a tuitear que «la competencia está bien, las trampas no».
– Con información de AP