GREENSBORO, Carolina del Norte, EU (AP) — El expresidente Donald Trump criticó el sábado su histórico encausamiento federal y lo describió como “ridículo” e “infundado”, en lo que fueron sus primeras apariciones públicas desde que se dieron a conocer las acusaciones en su contra.

Trump afirmó que las 37 imputaciones graves constituían asimismo una agresión contra sus simpatizantes, mientras intentaba sacar provecho político de su delicado calvario judicial y proyectar una imagen de normalidad.

En sus discursos ante las convenciones estatales republicanas en Georgia y Carolina del Norte, Trump catalogó su vinculación a proceso por parte del Departamento de Justicia como un intento para perjudicar su posibilidad de volver a la Casa Blanca durante su campaña en busca de un segundo periodo presidencial.

“Han desatado una cacería de brujas tras otra en su intento para frenar nuestro movimiento, coartar la voluntad del pueblo estadounidense”, declaró Trump en Georgia, y después dijo a la multitud que “en última instancia, ellos no están viniendo por mí, están viniendo por ustedes”.

Esta estrategia es bastante conocida de Trump, quien se mantiene como favorito en la contienda por la candidatura presidencial republicana con vistas a las elecciones de 2024 a pesar de que se le están creciendo los problemas jurídicos, incluidos cargos penales presentados en su contra en marzo en Nueva York.

Una y otra vez Trump ha intentado desacreditar a las autoridades policiales durante las investigaciones al tiempo que se dice y presenta a sus partidarios como víctimas, aun cuando pesan sobre él delitos graves.

Trump también anunció el sábado que permanecerá en la contienda aun si lo declaran culpable en el caso.

“Jamás renunciaré”, dijo al medio Político en una entrevista a bordo del avión en que viajaba después de su discurso en Georgia. Auguró que no lo declararán culpable e ignoró las preguntas sobre un autoindulto en caso de ganar un segundo periodo.

“No creo que tendré que hacerlo”, dijo Trump. “No hice nada malo”.

En el encausamiento hecho público el viernes se acusa a Trump de desafiar deliberadamente los pedidos del Departamento de Justicia de que regresara documentos clasificados, para lo que reclutó a colaboradores para ocultarla e incluso indicó a sus abogados que deseaba impugnar una citación relacionada con materiales guardados en su residencia.

El encausamiento incluye acusaciones de que guardó documentos en un salón y un baño en su finca de Mar-a-Lago, entre otros lugares.

Trump tiene programado hacer el martes su primera comparecencia ante una corte federal en Miami. El exmandatario fue acusado con el valet Walt Nauta, su ayudante personal a quien los fiscales acusan de haber cambiado de lugar cajas de una recinto utilizado como almacén a la residencia de Trump para que las revisara y después mintió a los investigadores sobre esa acción.

Nauta viajó el sábado con Trump y apareció a su lado durante una escala en Georgia Waffle House, donde el exmandatario firmó autógrafos, posó para fotografías y dijo a sus simpatizantes: “no hicimos nada malo absolutamente”.