El pontífice salió del hospital a las pocas horas y regresó al Vaticano; en marzo fue internado en una clínica por un cuadro de bronquitis.
Por Paolo SantaLucia y Nicole Winfield
Roma, 6 de junio (AP).— El Papa Francisco acudió el martes al hospital para hacerse pruebas médicas y después regresó al Vaticano, según testigos y reportes en medios, dos meses después de que fuera hospitalizado por un cuadro agudo de bronquitis.
Francisco acudió por la mañana al Policlínico Universitario Agostino Gemelli de Roma para hacerse pruebas, según la agencia de noticias ANSA. Testigos en la puerta Perugino del Vaticano, uno de los principales acceso a la ciudad estado, dijeron a The Associated Press que el Papa había regresado poco después y saludó a los guardias como suele hacer.
Francisco, de 86 años, pasó tres días ingresado en el hospital de Roma a finales de marzo. En un principio el Vaticano dijo que había ido para hacerse pruebas programadas, pero el pontífice reveló después que había sentido dolor en el pecho y fue trasladado con rapidez al hospital, donde se le diagnosticó una bronquitis y se le suministraron antibióticos por vía intravenosa. Cuando recibió el alta el 1 de abril, bromeó diciendo que estaba “todavía vivo”.
Al Papa argentino se le extirpó parte de un pulmón cuando era joven. También sufre dolores por ciática y durante el último año ha utilizado una silla de ruedas y un andador por una distensión en los ligamentos de la rodilla.
Francisco tiene una ajetreada agenda últimamente, con varias audiencias cada día. El Vaticano confirmó hace poco que haría varios viajes en agosto, cuando la Santa Sede e Italia suelen tomarse vacaciones, con una visita de cuatro días a Portugal en la primera semana de agosto y otro viaje de duración similar a Mongolia a partir del 31 de agosto.
En un indicio de que los viajes seguían en pie, el Vaticano publicó el itinerario previsto para la visita del Papa a Portugal entre el 2 y el 6 de agosto con motivo del Día Mundial de la Juventud. El programa confirmaba la habitual agenda apretada de encuentros protocolarios de una visita de Estado, además de varios eventos con jóvenes y un viaje de un día al santuario de Fátima.
Su próxima cita, si se confirma, sería la audiencia general semanal del miércoles en la Plaza de San Pedro.