El director general del Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas, Adelfo Regino Montes, informó que con la firma de convenios se cumplen los acuerdos del Plan de Justicia de los Pueblos Wixárika, Náayeri, O´dam o Au´dam y Mexikan.
Ciudad e México, 3 de junio (SinEmbargo).– El Gobierno de México firmó los primeros convenios para la construcción de caminos artesanales de concreto hidráulico en comunidades indígenas de Durango y Nayarit.
El director general del Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas (INPI), Adelfo Regino Montes, informó que la nversión inicial será de 590 millones de pesos y con esto se cumplen los acuerdos del Plan de Justicia de los Pueblos Wixárika, Náayeri, O´dam o Au´dam y Mexikan que contrajo el Presidente Andrés Manuel López Obrador en diciembre pasado a la comunidad de San Francisco de Lajas, en el corazón de la Sierra Madre Occidental.
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Firman convenios para caminos artesanales en Durango y Nayarit.
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— INPI (@INPImx) June 2, 2023
Para arrancar con el programa de caminos artesanales de concreto hidráulico se suscribieron convenios entre la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT), el INPI y las autoridades tradicionales de diversas comunidades del estado de Durango, con la participación de las autoridades estatales, en donde se van a invertir 300 millones de pesos.
Los seis convenios firmados corresponden a las comunidades de San Francisco de Lajas, San Bernardino de Milpillas Chico, Santiago Teneraca –con dos tramos–, El Potrero y Santa María de Ocotán, que habían estado abandonados durante décadas.
El Programa de Caminos Artesanales abarca un total de 9 caminos cuya ejecución correrá a cargo de las autoridades indígenas tradicionales, con el respaldo del INPI y la SICT.
Adelfo Regino explicó que ya se concluyeron los trámites para acreditar a las autoridades tradicionales ante el Servicio de Administración Tributaria (SAT) y se abrieron las cuentas mancomunadas para la transferencia de los recursos en el Banco del Bienestar, de manera directa a las autoridades tradicionales de ambos estados del país.
“La participación de las comunidades es la base principal en la que se inspira este programa”, expresó el titular del INPI al exhortar a las autoridades a trabajar en coordinación con las instituciones del Gobierno de México.
En tanto el representante de la SICT en el estado de Durango, Ángel Sergio Devora Núñez, precisó que el inicio de los trabajos de mantenimiento y modernización de la carretera Durango – San Bernardino de Milpillas, incluirá la construcción de 4 puentes con los estudios y proyectos correspondientes.
El Gobierno del estado expuso que ya se concluyeron los trabajos de ampliación en el tramo de San Bernardino de Milpillas a San Francisco de Lajas, quedando pendientes la compactación, y se continuará con el frente de Santa María de Ocotán a San Pedro de Jícoras.
FIRMA DE CONVENIOS EN NAYARIT
En el estado de Nayarit se firmaron convenios para la construcción de 5 caminos con un total de 10 frentes con metas de 50 kilómetros y una inversión de 290 millones de pesos, en beneficio de 7 comunidades indígenas y 3 municipios.
Se trata de los tramos de Huajicori – San Andrés Milpillas, Mesa del Nayar – Santa Teresa, Los Arrayanes – Santa Cruz de Acaponeta, Aguapán – Jesús María y Tezcalame –Zooquipan.
En el Centro SICT de Tepic, Adelfo Regino destacó la coordinación que hay entre el gobierno federal para la construcción de caminos en todo el país, para dar cumplimiento a los compromisos del presidente López Obrador en el marco de los planes de justicia y su pasada visita a la comunidad de Jesús María y San Andrés Milpillas.
“Un componente muy importante de este plan de justicia es lo que tiene que ver con los caminos, incluso es el planteamiento número uno que hay en el plan y por eso el presidente dio la instrucción para que nos coordinemos con las autoridades municipales y tradicionales para poder hacer realidad estos proyectos”, expresó.
Recordó que anteriormente el gobierno le entregaba los recursos públicos a empresas privadas que dejaban obras inconclusas y a sobreprecio, por lo que ahora la estrategia es entregar los presupuestos a las comunidades indígenas a través de sus gobiernos tradicionales, para que los administren de manera transparente y hagan las obras.