Hallan 39 cuerpos en investigación sobre una secta en Kenia
Nairobi, Kenia, 24 de abril (AP) — Las autoridades han encontrado 39 cuerpos por el momento en los terrenos de un pastor en la costa de Kenia, que fue detenido por decir a sus seguidores que ayunen hasta morir.
Aún quedan más tumbas poco profundas por excavar en los terrenos de Paul Makenzi, detenido el 14 de abril por vinculación con prácticas sectarias, según el jefe de policía del subcondado Malindi, John Kemboi.
La cifra total de muertes hasta ahora es 43, porque otras cuatro personas murieron después de ser descubiertas con inanición en la Iglesia Internacional Buenas Nuevas.
#Kenya #Kenia #Secta
Se hallaron 21 cuerpos en #Shakahola, Kenia luego del arresto de un líder de una secta que pidió a sus fieles "ayunar hasta la muerte" para encontrarse con Jesús. pic.twitter.com/yj2Kwm8njs— 𝔸𝕝𝕖𝕛𝕒𝕟𝕕𝕣𝕠 𝔽𝕣𝕚𝕒𝕤 ♚ (@FriasAlejandro_) April 23, 2023
La policía ha pedido a una corte que le permita retener más tiempo a Makenzi mientras prosiguen las pesquisas sobre las muertes de sus seguidores. Un aviso ciudadano llevó a la policía hasta la propiedad del pastor en Malindi, donde encontraron a 15 personas demacradas, incluidas las cuatro que fallecieron después. Los seguidores dijeron que estaban ayunando según las instrucciones del pastor para conocer a Jesús.
La policía había sido informada de docenas de tumbas poco profundas en los terrenos y comenzó a excavar el viernes.
Makenzi ha estado en huelga de hambre los últimos cuatro días durante su detención.
Fanatismo que mata. 47 fieles de una secta son encontrados muertos de hambre en un bosque de #Kenia después de ‘ayunar’ para poder ver a Jesús, como se los prometió su líder. Se teme que haya más fallecidos. #África pic.twitter.com/p99KKjOJnV
— LaHistoria (@lahistoriaec) April 24, 2023
El pastor ha sido detenido en dos ocasiones antes, en 2019 y en marzo de este año, en relación a la muerte de menores. En ambas ocasiones salió libre bajo fianza y los dos casos siguen tramitándose en los tribunales.
Políticos locales instaron a la corte a no liberarle en esta ocasión y lamentaron la propagación de sectas en la zona de Malindi.
Las sectas son habituales en Kenia, que tiene una sociedad mayoritariamente religiosa.