El Presidente López Obrador aseguró que con la contratación de especialistas y la llegada de más médicos cubanos, Oaxaca podría tener un sistema de salud mejor que el de Dinamarca.
Ciudad de México, 15 de abril (SinEmbargo).- El Gobierno de México ofrecerá trabajo a 10 mil médicos especialistas jubilados del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) por el que estarían recibiendo un ingreso extra al de su pensión.
Desde Juchitán, Oaxaca, el Presidente Andrés Manuel López Obrador compartió que la contratación de especialistas complementaría el apoyo que se está recibiendo por parte de otros gobiernos y de Cuba, quien ha enviado a unos mil 200 especialistas.
"Estamos contando con el apoyo de otros gobiernos, de manera especial nos apoyan desde Cuba, nos están mandando especialistas, han llegado 600 y van a llegar 600 más, eso va a ayudar mucho", aseguró.
Para el titular del Ejecutivo, la propuesta hecha por el director del IMSS, Zoé [Robledo] "es de lo mejor", al considerar que hay 10 mil especialistas en el país jubilados que todavía están en condiciones de dar servicio, porque tienen de 55 a 65 años.
"Están jovencitos. Chamacos, chamacas. ¿Qué les estamos ofreciendo? Que van a mantener su pensión y que aparte les damos. trabajo, les garantizamos un contrato de cinco años con su sueldo de especialista íntegro", expresó el mandatario federal.
"Y lo mejor es que, si están en Juchitán, aquí mismo se queden, que trabajen en sus pueblos. Si esos 10 mil, que son especialistas, aceptaran la propuesta, resolvemos el problema. Es más, hasta con la mitad, creo yo, con cinco mil cubrimos todo y vamos a tener un sistema de salud mejor que el de Dinamarca", agregó.
Además, el Presidente López Obrador adelantó que convocará a las autoridades de salud a su próxima conferencia de prensa matutina para hablar sobre el tema.
En México hay 107 especialistas por cada 100 mil personas, cuando la recomendación internacional es de 230, más del doble, de acuerdo con el Gobierno.
Esa postura ha sido objetada por los médicos mexicanos que aseguran que el déficit se debe en parte a que muchos profesionales no quieren ir a algunas regiones de México azotadas por la violencia donde el personal de salud suele morir en medio de balaceras, o es extorsionado o intimidado por grupos criminales.
