El Presidente mexicano Andrés Manuel López Obrador dijo el martes pasado que pidió apoyo a su par de China, Xi Jinping, para controlar los envíos de fentanilo desde el gigante asiático y se quejó de los “groseros amagos” de legisladores estadounidenses contra México.
-Con información de Associated Press
Ciudad de México, 6 de abril (SinEmbargo).- China negó el jueves que desde ese país se trafique ilegalmente fentanilo hacia México y aseguró que las autoridades mexicanas no han notificado sobre incautaciones de la droga sintética provenientes del gigante asiático.
Así respondió la portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de China, Mao Ning, al ser consultada sobre la solicitud de apoyo que hizo el Presidente mexicano Andrés Manuel López Obrador a su par chino, Xi Jinping, a través de una misiva para controlar los envíos de fentanilo desde China.
“No existe el tráfico ilegal de fentanilo entre China y México”, afirmó Mao al ser cuestionada sobre la petición de López Obrador y agregó que el gigante asiático “no ha recibido ninguna notificación de México sobre la incautación de precursores del fentanilo”.
Durante una conferencia de prensa, Mao Ning dijo que el Gobierno chino ha mantenido una “postura firme” de control de las drogas, incluido en fentanilo, y que los problemas que enfrenta Estados Unidos con el opioide sintético se originan en ese país. “Los Estados Unidos deben enfrentar sus propios problemas, tomar medidas más sustanciales para fortalecer la supervisión interna y reducir la demanda”, agregó.
Apenas el pasado 2 de abril, López Obrador dio a conocer la carta que escribió al Presidente de China para solicitar su ayuda e intervención en el tráfico de fentanilo a México, ya que a raíz de la crisis que enfrenta Estados Unidos por el consumo del opioide sintético, el país ha sido objeto de “groseros amagos” por parte de legisladores estadounidenses.
Durante su conferencia de prensa matutina, López Obrador recordó que se ha informado sobre todas las actividades para combatir el tráfico de drogas en el país, luego de que se echara a andar una campaña, «básicamente de legisladores del Partido Republicano», con propuestas para intensificar la lucha contra el crimen organizado y la distribución de fentanilo con intervención militar de las Fuerzas Armadas estadounidenses.
«El Presidente [Joe] Biden envió a una comisión, se ha llegado a un acuerdo de seguir trabajando de manera conjunta, lo estamos haciendo y también vinieron legisladores hace relativamente poco, de los dos partidos, y me hicieron un planteamiento», señaló.
En el encuentro, que tuvo lugar el mes pasado, plantearon al mandatario mexicano que apoyara con su intervención para que China dejara de enviar fentanilo a México, Estados Unidos y Canadá.
«Además de que les informamos de lo que estamos haciendo, me plantearon: ‘¿Por qué no nos ayuda e interviene para que de China no envíen fentanilo a México, y también a Estados Unidos y a Canadá?’. Porque se supone que el fentanilo llega de Asia», contó.
Frente a las y los representantes de los medios de comunicación, el Jefe del Ejecutivo federal insistió en que México no produce fentanilo, sino que se trata de «una materia prima que se produce en Asia». «También eso es importante aclararlo, quién produce», agregó.
«Entonces les dije a los legisladores: ‘Voy a intervenir porque nosotros tenemos muy buena relación con todos los gobiernos del mundo, y, en especial, tenemos buena relación con el Gobierno de la República de China, y le voy a enviar una carta al Presidente de China’. Y ya lo hice», anunció.
«Como no hay secretos, porque nosotros actuamos con transparencia, les voy a dar a conocer el contenido de la carta que le envié al Presidente de China a través de la Embajada y se la envié también al coordinador de los legisladores que me hicieron esa petición: por cierto, un Senador del Partido Republicano. Y me gustaría que se conozca la carta», declaró el político tabasqueño.
Posteriormente, leyó la misiva que hizo llegar a Xi Jinping, para controlar los envíos de fentanilo desde el gigante asiático hacia México y enfrentar así el tráfico de la droga sintética que ha generado decenas de miles de muertes en Estados Unidos.
En el texto, el Jefe de Estado mexicano solicitó al Presidente de China que por razones humanitarias ayude en el control de los envíos de fentanilo de China a México, así como información sobre quiénes realizan las importaciones, las sustancias que se embarcan, y los puertos de salida y destino. Con los datos, subrayó, “tendríamos un mayor control sobre el ingreso de esta droga”.
También aprovechó la carta para reiterar las críticas contra algunos congresistas republicanos, a los que señaló de realizar “groseros amagos” contra México, y admitió que por el país latinoamericano sólo pasa el 30 por ciento de la droga que consumen los estadounidenses, pero «de manera falaz e irresponsable, algunos legisladores de Estados Unidos han culpado a México de la desgracia que vive su país por el consumo de fentanilo”.
López Obrador criticó las recientes declaraciones que realizó el Senador republicano Lindsey Graham -quien aseguró que México no toma acciones para contener el tráfico de fentanilo- y sostuvo que algunas agencias, congresistas y autoridades estadounidenses “usan mucha información con propósitos politiqueros. Les hace falta seriedad, profesionalismo y actuar con apego a la verdad”.
A los cuestionamientos contra Graham se sumó el Secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard, quien afirmó que México no tenía nada que ver con ese problema y siempre ha prestado apoyo a Estados Unidos para enfrentar esa problemática. “El problema no se genera en México ni es México el causante de esta crisis, es injusto y es falso”.
En su presentación, destacó que “los esfuerzos de México en materia de fentanilo son los más importantes del mundo”. “No hay ningún otro país del mundo que esté haciendo tanto contra el fentanilo que se trafica hacia los Estados Unidos que México”, añadió.
El Canciller reconoció que “tenemos un problema muy serio, pero conviene tener claro que, en el origen de este problema, México no ha tenido absolutamente nada que ver. Nosotros estamos ayudando a Estados Unidos, no generando el problema”.
Asimismo, refirió que el origen tiene un vínculo directo con la autorización emitida en 1996 a varias farmacéuticas en Estados Unidos para distribuir el analgésico en farmacias y poder comprarlo con receta.
“México no es el problema, sino ha sido parte y es parte principal de la solución. México está haciendo mucho […] tan sólo de las últimas acciones de México, en donde se han incautado muchísimas pastillas de fentanilo con destino a los Estados Unidos […] si México no hiciera eso, habría millones de personas intoxicadas, quizás su tasa de mortalidad sería mucho mayor, esto es un hecho”, alertó el funcionario.
Además, ejemplificó que “nada más el día 7 de febrero, fueron retenidos 300 kilogramos de precursores de fentanilo; 304 kilogramos acá; del 27 de enero al 6 de marzo hubo 22 laboratorios o cocinas desmantelados, siete mil 820 kilogramos de metanfetaminas, 45 mil 200 litros de precursores químicos, 19 mil 200 kilogramos de precursores químicos”.
“El esfuerzo de México para combatir el fentanilo es […] el más importante del mundo si se compara inclusive con la población y con los recursos disponibles; somos el país que más hace contra el fentanilo”, enfatizó Ebrard Casaubón.
A su vez, compartió que “inclusive, se está organizando una coalición de muy diversos países del mundo, porque el fentanilo no es un problema nada más de Estados Unidos, es un problema que nos puede afectar a todos; por eso, para el Presidente López Obrador combatir el fentanilo ha sido una prioridad desde 2019 y lo seguirá siendo”.
Luego del reciente mensaje del Senador Graham, el Secretario reiteró que “México es el país que más contribuye. México no creó el problema, México está invitando a otros países para que entre todos le hagamos frente”.
Ante la omisión del Senador al contestar a la pregunta del Presidente López Obrador sobre las personas que trafican fentanilo, aclaró 86.3 por ciento de las personas que están en prisión por tráfico de fentanilo son de ciudadanía norteamericana, de acuerdo con cifras oficiales de Estados Unidos; “es falso que mexicanas y mexicanos trafiquen fentanilo”.
Frente a la afirmación de que es necesaria una licencia para comprar armas en Estados Unidos, el Canciller pidió “que el Senador Graham no mienta, porque en Estados Unidos cualquier persona compra armas en cualquier esquina”.
“Esto es un problema crítico, por eso México ha insistido mucho y es parte de las acciones que tenemos juntos en el Entendimiento Bicentenario”, resaltó.
En las últimas semanas, ha habido tensiones entre México y Estados Unidos luego del secuestro y asesinato el mes pasado de dos estadounidenses en la localidad fronteriza de Matamoros y la petición que hicieron congresistas republicanos de que deberían considerarse a los cárteles de droga mexicanos como organizaciones terroristas.
López Obrador consideró la propuesta de los congresistas estadounidenses “intervencionista” y sostuvo que con ello se busca estigmatizar a México. El Presidente señaló a los legisladores republicanos de manipular a los estadounidenses a través de los medios de comunicación.
El mandatario ha negado que el fentanilo se produzca en México, aunque su administración ha reconocido haber encontrado decenas de laboratorios donde se produce, principalmente en el estado norteño de Sinaloa.
La mayor parte del fentanilo ilegal es distribuido por cárteles mexicanos en píldoras que se parecen a otros medicamentos o mezclado con otras drogas, incluidas la heroína y la cocaína. Muchas personas que mueren de sobredosis en Estados Unidos no saben que están consumiendo fentanilo.
El fentanilo es un opioide sintético traficado por cárteles mexicanos al que se atribuyen unas 70 mil muertes por sobredosis al año en Estados Unidos. Los expertos dicen que los cárteles mexicanos están ganando tanto dinero ahora en el mercado estadounidense que no ven la necesidad de vender fentanilo en su mercado local.