El Presidente Zelenski expresó su preoupación por el resultado electoral de 2024 en EU, pues eso implicaría el porvenir de Ucrania en su guerra con Rusia; "Estados Unidos realmente entiende que si dejan de ayudarnos, no ganaremos", dijo en entrevista para AP.
Por Julie Pace y Hanna Arhirova
En un tren de Sumy a Kiev, Ucrania, 29 de marzo (AP).— El Presidente ucraniano Volodímir Zelenski advirtió el martes que a menos de que su país gane una prolongada batalla en una ciudad clave en el este del país, Rusia podría comenzar a generar apoyo internacional para un acuerdo que requeriría que Ucrania realizara concesiones inaceptables. También hizo una invitación al mandatario de China, que desde hace tiempo ha sido aliada de Rusia.
Si Bájmut llegara a caer a manos de las fuerzas rusas, su Presidente, Vladímir Putin, “vendería esa victoria a Occidente, a su sociedad, a China, a Irán”, señaló Zelenski en una entrevista exclusiva con The Associated Press.
“Si llega a sentir sangre, a oler que somos débiles, presionara, presionará, presionará”, declaró Zelenski en inglés, idioma en el que se dirigió durante prácticamente toda la entrevista.
El mandatario ucraniano habló con la AP a bordo de un tren que lo lleva a través de Ucrania, a ciudades cerca de algunos de los combates más intensos y a otras localidad en donde las fuerzas de su país han replegado con éxito a la invasión rusa. La AP es la primera organización noticiosa que realiza un prolongado viaje junto a Zelenski desde que comenzó la guerra hace poco más de un año.
Desde entonces, Ucrania —que cuenta con el apoyo de buena parte de Occidente— ha sorprendido al mundo con la fuerza de su resistencia en contra de un ejército ruso mucho más grande y mejor equipado. Las fuerzas ucranianas han mantenido el control de la capital, Kiev, y han expulsado a Rusia de otras zonas de gran importancia estratégica.
Pero a medida que la guerra entra a su segundo año, Zelenski se encuentra enfocado en mantener la motivación entre sus fuerzas armadas y la población general de Ucrania, en especial a los millones que han huido al extranjero y entre aquellos que viven en relativa calma y seguridad lejos del frente de batalla.
Zelenski también está muy consciente que el éxito de su país se debe en gran medida a la enorme cantidad de apoyo militar internacional, en especial de Estados Unidos y Europa occidental. Pero algunos estadounidenses — incluido el republicano Donald Trump, expresidente y actual candidato rumbo a 2024 — han cuestionado si Washington debe seguir suministrando miles de millones de dólares en asistencia militar a Ucrania.
El posible rival republicano de Trump, el Gobernador de Florida Ron DeSantis, también insinuó que defender a Ucrania en una “disputa territorial” con Rusia no era una prioridad significativa para la seguridad nacional de estados Unidos. Posteriormente se retractó de estas declaraciones luego de recibir críticas de otros miembros del Partido Republicano.
Zelenski no mencionó a Trump ni a otro político republicano por su nombre — con quienes tal vez habría tenido que lidiar si hubieran salido victoriosos en los comicios de 2024. Pero señaló que le preocupa que la guerra pueda resultar afectada por un cambio en la balanza política en Washington.
“Estados Unidos realmente entiende que si dejan de ayudarnos, no ganaremos”, comentó durante la entrevista. Dio un sorbo a su té mientras estaba sentado en una angosta cama de un sencillo vagón dormitorio de un tren de la compañía ferroviaria estatal.
El viaje en tren del Presidente, calculado con precisión, era un recorrido llamativo por tierra en un país en guerra. Zelenski, que se ha convertido en un rostro reconocible en todo el mundo gracias a su persistencia en contar su versión de la historia a un país tras otro, aprovechó el viaje diseñado para subir la moral para llevar su considerable influencia a las regiones cercanas al frente.
Viajaba con un pequeño equipo de asesores y un gran grupo de personal de seguridad, fuertemente armado y vestido con ropa de combate. Su gira incluyó ceremonias para conmemorar el primer aniversario de la liberación de localidades en la región de Sumy y visitas a soldados destinados en posiciones de primera línea cerca de Zaporiyia. Cada salida se mantuvo en secreto hasta que se había marchado.
Zelenski hizo una visita similar cerca de Bájmut, donde fuerzas ucranianas y rusas llevan meses atascadas en una sangrienta batalla. Aunque algunos analistas occidentales han sugerido que la ciudad no tiene una gran importancia estratégica, Zelenski advirtió que en este momento, una derrota en cualquier lugar podría poner en riesgo la peleada iniciativa ucraniana en la guerra.
“No podemos perder pasos porque la guerra son pedazos de victorias. Pequeñas victorias, pequeños pasos”, dijo.
Los comentarios de Zelenski eran un reconocimiento de que perder la batalla de Bájmut, que ya lleva siete meses en marcha -la más larga de la guerra por ahora- sería una costosa derrota política más que un revés táctico.
El mandatario predijo que la presión de una derrota en Bájmut podría llegar rápido, tanto de la comunidad internacional como de su propio país. “Nuestra sociedad se sentirá cansada”, dijo. “Nuestra sociedad me presionará para alcanzar un compromiso con ellos”.
Por ahora, Zelenski dice que no ha sentido esa presión. La mayor parte de la comunidad internacional se ha reunido en torno a Ucrania tras la invasión rusa del 24 de febrero de 2022. En los últimos meses, una sucesión de líderes mundiales ha visitado a Zelenski, la mayoría en trenes similares a los que utiliza Zelenski para moverse por el país.
En su entrevista con AP, Zelenski invitó a Ucrania a un líder señalado y de importancia estratégica que no ha hecho el viaje: el Presidente de China, Xi Jinping. “Estamos dispuestos a verle aquí”, dijo. “Quiero hablar con él. Tuve contacto con él antes de la guerra de plena escala. Pero en todo este año, más de un año, no lo he tenido”.
China, con afinidad económica y política con Rusia desde hace décadas, ha prestado cobertura diplomática a Putin al mantener una posición oficial de neutralidad en la guerra.
Cuando se le preguntó si Xi aceptaría una invitación de Zelenski o si se había hecho alguna oficialmente, la vocera del Ministerio chino de Exteriores Mao Ning dijo a la prensa que no tenía información que ofrecer. Beijing, señaló, mantiene “la comunicación con todas las partes implicadas, incluida Ucrania”.
Las autoridades rusas “aprecian mucho” la posición equilibrada de China sobre el conflicto y “no tienen derecho a dar ningún consejo” sobre si Xi y Zelenski deberían reunirse, indicó el miércoles el vocero del Kremlin, Dmitry Peskov, tras una pregunta sobre si el encuentro resultaría útil para resolver la crisis. “El propio líder chino decide la pertinencia de ciertos contactos”, dijo Peskov durante su conferencia telefónica diaria con periodistas.
Xi visitó a Putin en Rusia la semana pasada, lo que planteaba la posibilidad de que Beijing pudiera estar preparándose para proporcionar a Moscú las armas y munición que necesita para reponer sus mermadas reservas. Pero el viaje de Xi terminó sin un anuncio de esa clase. Unos días después, Putin anunció que desplegaría armas nucleares tácticas en Bielorrusia, vecina de Rusia, lo que lleva el arsenal nuclear del Kremlin más cerca de territorio de la OTAN.
Zelenski sugirió que la decisión de Putin pretendía distraer de la falta de garantías que había recibido de China.
“¿Qué significa? Significa que la visita no fue buena para Rusia”, especuló Zelenski.
🇷🇺🇺🇦 Un cañón de 30mm ruso atacando las posiciones ucranianas en un edificio en Marinka, oblast de Donestk. pic.twitter.com/7IGEZTTqIN
— Descifrando la Guerra (@descifraguerra) March 19, 2023
El Presidente hizo pocas predicciones sobre la mayor pregunta sobre la guerra: cómo terminará. Sin embargo, se mostró seguro de que su país prevalecerá a través de una serie de “pequeñas victorias” y “pequeños pasos” contra un “país muy grande, gran enemigo, gran ejército”. Pero un ejército, añadió, con “corazones pequeños”.
¿Y la propia Ucrania? Aunque Zelenski admitió que la guerra “nos ha cambiado”, señaló que al final, ha hecho más fuerte a su sociedad.
“Podría haber salido de una forma, dividir al país, o de otra, unirnos”, dijo. “Estoy muy agradecido. Estoy agradecido con todos, cada uno de nuestros socios, nuestro pueblo, gracias a Dios, todo el mundo, porque hayamos encontrado este camino en este momento crítico para la nación. Encontrar este camino fue lo que salvó nuestra nación, y salvamos nuestra tierra. Estamos juntos”.