El mandatario destacó que en el reciente informe que presentó el Departamento de Estado estadounidense al Congreso, se subrayó que no existe evidencia de que grupos terroristas se hayan establecido en México como para que se utilice a su ejército en el país.
Ciudad de México, 6 de marzo (SinEmbargo).- El Presidente Andrés Manuel López Obrador afirmó esta mañana que la propuesta de legisladores de Estados Unidos de utilizar al ejército para hacer frente a los cárteles mexicanos de la droga es "propaganda" electoral con ánimos intervencionistas.
López Obrador explicó que el pasado 27 de febrero, el Departamento de Estado del Gobierno de Estados Unidos presentó al Congreso su informe sobre terrorismo, en el que dio a conocer que no hay en el Gobierno mexicano ninguna vinculación con grupos terroristas y que la cooperación en este tema es buena entre las administraciones.
"En el caso de México, indica que la cooperación para desarticular el terrorismo fue sólida. El informe subraya que no existe evidencia de que grupos terroristas se hayan establecido en México o estén colaborando con cárteles de drogas. Concluye que hasta la fecha no se han confirmado casos de ataques hacia Estados Unidos perpetrados en México", señaló el Presidente.
Sin embargo, criticó la postura del Senador estadounidense Dan Crenshaw de querer que el Gobierno de Joe Biden nombre a los cárteles de la droga mexicanos parte de las amenazas terroristas para que se pudiera utilizar el ejército en el combate contra la distribución de drogas.
La propuesta del Senador Crenshaw fue respaldada hace dos días, el pasado 4 de marzo, por William Barr, Fiscal de Estados Unidos durante la administración de Donald Trump, en un artículo de opinión publicado por el Wall Street Journal.
"Que digan hay o no hay terrorismo en un país, ¿quién les da esta facultad? [...] Una manía de considerarse el Gobierno del mundo y calificar: ‘tú te portas bien’; ‘tú te portas mal’; ‘si te alineas, si haces caso, si te sometes, tu palomita’; ‘si te quieres sentir independiente, soberano, tache’", ejemplificó el Presidente de México.
"Todavía es peor el que quieran utilizar la fuerza militar para intervenir en la vida pública de otro país, o sea, invadir a otro país con la excusa de que van sobre narcotraficantes terroristas. Desde luego es pura propaganda, sin embargo, hay que estar rechazando todas esas pretensiones de intervencionismo. México es un país independiente, soberano", agregó.
En el artículo publicado por Wall Street Journal, Barr argumentó que como casi todas las drogas ilícitas que ingresan a los Estados Unidos están controladas principalmente por el Cártel de Sinaloa y el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), el Gobierno estadounidense debería atacar directamente la cadena de suministro de drogas.
“La cabeza de la serpiente está en México, y ahí es donde se debe dirigir el empuje principal de nuestros esfuerzos”, dijo al destacar un esfuerzo conjunto entre los gobiernos de Estados Unidos y Colombia para acabar con los cárteles en Colombia en la década de 1990.
Barr argumentó que el Gobierno mexicano ha permitido el envío de fentanilo y otras drogas mortales a Estados Unidos y que, en tales circunstancias, Estados Unidos tiene derecho a defenderse.
“Los cárteles mexicanos han florecido porque las administraciones mexicanas no han estado dispuestas a enfrentarse a ellos. La excepción fue el Presidente Felipe Calderón (2006-2012), que quería ir a por todas contra los cárteles, pero las prioridades estadounidenses estaban en otra parte en ese momento”, escribió Barr.
El exfiscal mencionó que aunque el Presidente López Obrador estuviera dispuesto a actuar contra los cárteles, México no puede hacer el trabajo por sí mismo porque su sistema de justicia penal es disfuncional: “El 95 por ciento de todos los delitos violentos quedan impunes y la corrupción generalizada en todos los niveles del Gobierno de México hace que sea casi imposible montar operaciones policiales o militares efectivas sin que los cárteles sean informados con anticipación”.
“¿Qué se necesita para derrotar a los cárteles mexicanos?”, cuestionó el exfiscal y él mismo respondió: “En primer lugar, un esfuerzo estadounidense mucho más agresivo dentro de México que nunca antes, incluida una importante presencia de las fuerzas del orden y de inteligencia de los EU, así como capacidades militares selectas. Óptimamente, el Gobierno mexicano apoyará y participará en este esfuerzo”.
En segundo lugar, agregó, “el peligro que representan los cárteles para los Estados Unidos requiere que los enfrentemos principalmente como amenazas a la seguridad nacional, no como un asunto de aplicación de la ley. Estos grupos narcoterroristas se parecen más a ISIS que a la mafia estadounidense. El enjuiciamiento de individuos caso por caso puede ser parte de un esfuerzo general, pero la única forma de vencerlos es usar todas las herramientas a nuestra disposición dentro de México”.
“Los cárteles tienen a México en un dominio absoluto como el de una pitón. Se necesita liderazgo estadounidense para ayudar a México a liberarse. No podemos aceptar un narcoestado fallido en nuestra frontera, proporcionando refugio a los grupos narcoterroristas que se aprovechan del pueblo estadounidense”, finalizó William Barr.