El dueño de Grupo Salinas dijo con burla que debería de contratar al abogado del exempleado de Elektra para contrademandar; el extrabajador ganó una batalla legal cuando se le negó pagarle 750 mil pesos de Ley de acuerdo al tiempo en que laboró.
Ciudad de México, 17 de febrero (SinEmbargo/PorEsto).- El empresario Ricardo Salinas Pliego se burló del extrabajador de Elektra que ganó una demanda laboral contra la empresa al negársele pagar 750 mil pesos.
El dueño de Grupo Salinas empleó su cuenta de Twitter para referirse en tono de burla al exempleado de su empresa de electrodomésticos.
"Felicidades a cualquiera que vaya a juicio y gane... bien merecido, me va a llevar 1.3 minutos de mi vida recuperar esos 750 mil pesos, posiblemente en lo que termine de escribir este tweet. Todos tienen derecho a defenderse", escribió acompañando su mensaje con emojis de burla.
Además, en otro tuit señaló, nuevamente burlándose, que sería "bueno" contratar al abogado defensor del antiguo empleado para llevar a cabo una contrademanda.
Sería bueno contratar a ese abogado para contra demandar 😂.
Definitivamente me gusta ver que los que se alegran por algo así están de acuerdo en que uno se debe defender, ir a juicio y que la ley resuelva, yo por eso así le hago siempre!!!
Abrazos.
— Don Ricardo Salinas Pliego (@RicardoBSalinas) February 17, 2023
"Definitivamente me gusta ve rque los que se alegran por algo así están de acuerdo en que uno se debe defender, ir a juicio y que la Ley resuelva, yo por eso así le hago siempre", concluyó.
Este caso tiene que ver con un exempleado de la tienda departamental Elektra que embargó la sucursal de la avenida Tulum, en Cancún, Quintana Roo, en la que laboró por seis años.
Al finalizar su relación laboral, la empresa no cumplió con sus pagos conforme a la Ley, por lo que decidió iniciar una batalla legal que finalizó con el aseguramiento de la tienda por un monto total de 750 mil pesos.
Dicha cantidad, fue cubierta con pantallas, motocicletas, electrodomésticos y otros muebles que fueron cargados en una mudanza, mientras que las autoridades preventivas y actuarios sólo observaban como se llevaba a cabo la diligencia.