Felipe Calderón Hinojosa, expresidente de México, negó las acusaciones que hizo Edgar Veytia, exfiscal de Nayarit, en su contra durante su declaración como testigo cooperante de las autoridades de Estados Unidos en el juicio contra Genaro García Luna, quien fue su Secretario de Seguridad Pública federal.
-Con información de Jesús García
Nueva York/Ciudad de México, 7 de febrero (LaOpinión/SinEmbargo).- Edgar Veytia, extitular de la Fiscalía General de Justicia de Nayarit, testificó la mañana de este martes en el juicio que enfrenta Genaro García Luna, quien fue Secretario de Seguridad Pública federal en el Gobierno de Felipe Calderón Hinojosa, en Estados Unidos por sus presuntos nexos con el narcotráfico.
Desde el estrado en la Corte del Distrito Este de Nueva York, hoy salieron a relucir los nombres de más exfuncionarios que estarían vinculados con presuntos actos de corrupción, pero el que más llamó la atención por ser la primera vez que se escucha fue el de Felipe Calderón, quien gobernó México de 2006 a 2012 y le declaró la guerra al narcotráfico, una estrategia que dejó miles de muertos y desaparecidos.
El exfiscal nayarita, quien fue condenado a 20 años de cárcel en Estados Unidos, reveló que Ney González Sánchez, exgobernador de Nayarit, apoyaba a la organización criminal de los Beltrán Leyva, mientras que la extinta Policía Federal (PF), a manos de García Luna, estaba con el Cártel de Sinaloa, liderado por Joaquín Guzmán Loera, mejor conocido como «El Chapo».
«Édgar Veytia afirma que el exgobernador de Nayarit, Ney González (PRI), apoyaba a los Beltrán Leyva, pero que la Policía Federal con García Luna a ‘El Chapo’, en medio de la guerra entre los narcos», informó Jesús García, corresponsal del diario La Opinión de Los Ángeles.
De acuerdo con el periodista, el exfuncionario implicó al expresidente mexicano en las órdenes de protección a “El Chapo” en medio de la guerra entre narcos, algo que más tarde negó Felipe Calderón, quien actualmente radica en España.
«Me he reservado opinar sobre el juicio al ing. García Luna hasta que concluya. Por ahora niego categóricamente las absurdas declaraciones que reporta la prensa que hizo hoy el testigo Veytia. Lo que señala sobre mí es una absoluta mentira. Nunca negocié ni pacté con criminales», sostuvo.
Con esas palabras, Calderón Hinojosa rompió el silencio sobre el proceso que ha puesto los reflectores en la estrategia de seguridad que hubo en su administración, la cual se vio corrompida, según han exhibido diversos testigos en lo que va del juicio.
Me he reservado opinar sobre el juicio al ing. García Luna hasta que concluya. Por ahora niego categóricamente las absurdas declaraciones que reporta la prensa que hizo hoy el testigo Veytia. Lo que señala sobre mí es una absoluta mentira. Nunca negocié ni pacté con criminales
— Felipe Calderón 🇺🇦 (@FelipeCalderon) February 7, 2023
El nuevo testigo cooperante, también conocido como “El Diablo”, narró que su entonces jefe, el exgobernador Ney González, y su sobrino se habían reunido en la Ciudad de México con el expresidente Calderón y el exsecretario de Seguridad Pública, quienes le habrían indicado que se debía proteger a “El Chapo” y a sus socios del Cártel de Sinaloa.
“Que la línea era ‘El Chapo’”, dijo escuetamente Veytia sobre el resultado de esa reunión a la que él no ingresó, ya que estuvo en un recorrido con Luis Cárdenas Palomino, exalto funcionario policiaco –y gente cercana a García Luna–, por El Búnker, un área de la Secretaría donde operaba tecnología de última generación para la vigilancia y espionaje.
Hubo una objeción de la defensa, liderada por César de Castro, pero la asistente del Fiscal Saritha Komatireddy replanteó la pregunta y Veytia confirmó.
“La orden era proteger a ‘Los Chapos’, no a los Beltrán Leyva”, expuso el cooperante ocho del juicio a García Luna.
La Fiscal preguntó a Veytia si le cuestionó a su jefe sobre esa decisión, ya que González protegía a Héctor Beltrán Leyva, quien entonces estaba al mando de ese grupo criminal.
“Al Gobernador no se le pide explicación”, justificó Veytia. Dijo que después se puso en contacto con la gente de “El Chapo”, un sujeto conocido como “El Pelocho”, quien controlaba la plaza.
Sin embargo, previamente los abogados de “El Chapo” Guzmán habían ido a Nayarit para decirle a Veytia que querían “comprar la plaza”, es decir, tener la protección de autoridades y pagarles por ello para operar libremente.
González y su gente tuvieron resistencia, pero la presión del Gobierno federal fue mayor y, en una ocasión, hubo un enfrentamiento entre policías estatales y federales por la detención de una camioneta, donde iba una persona no identificada.
La defensa quiso acorralar a Édgar Veytia sobre beneficio para salir de prisión, pero hay un proceso pendiente que juez Cogan aclaró al jurado. El problema habría sido generado por Jeffrey Lichtman, ex abogado de El Chapo.
Este tema generó varias objeciones.#GenaroGarciaLuna— Jesús García (@JesusGar) February 7, 2023
Según un reporte de los Beltrán Leyva, en el vehículo iba “El Chapo”.
Veytia dijo que cuestionó al federal al mando, Jorge Anguiano Terríquez, quien lo convenció de dejar ir el vehículo con la promesa de una explicación. Al siguiente día Veytia visitó a Anguiano Terríquez en su oficina, quien le pasó el teléfono con una llamada en proceso.
“Muchísimas gracias… cualquier cosa con Terríquez”, le dijo el interlocutor.
“¿Quién era al teléfono?”, preguntó la Fiscal a Veytia. “El señor García Luna”, respondió.
Otros testigos han expuesto que la decisión de García Luna de apoyar a “El Chapo” formó parte de la guerra entre líderes de distintas organizaciones criminales.
Confirmado que el siguiente testigo cooperante es Edgar Veytia, a quienes conocen cono El Diablo. Es ex fiscal de Nayarit y tiene varías indagatorias abiertas por fraudes y abusos. Es un arma de doble filo: la fiscalía quería bloquear ciertos temas. #GenaroGarciaLuna
— Jesús García (@JesusGar) February 7, 2023
LA CONDENA DE VEYTIA EN EU
El 26 de septiembre de 2019, Edgar Veytia fue sentenciado a 20 años de prisión y se le ordenó pagar un millón de dólares luego de que se declarara culpable de participar en una conspiración internacional de fabricación y distribución de heroína, cocaína, metanfetamina y mariguana; y que se admitiera como responsable de importar drogas ilegales de México a los Estados Unidos.
El día que se le dictó la sentencia, Timothy M. Dunham, agente especial a cargo del FBI, destacó que “Veytia abusó de su posición en el Gobierno y protegió a los traficantes de drogas que traían drogas peligrosas a través de su país a los Estados Unidos en nombre de un violento cártel mexicano de la droga”.
Mientras que Peter C. Fitzhugh, agente especial a cargo de las Investigaciones de Seguridad Nacional, señaló que “trabajando con el cártel, Veytia usó las fuerzas del orden público mexicanas para proteger los cargamentos de drogas, intimidar y dañar a los narcotraficantes rivales. También usó su papel como Fiscal General para obstruir la justicia cuando arrestaron a miembros del cártel”.
El Departamento de Justicia de Estados Unidos recordó entonces que las fuerzas del orden público investigaron al Cártel H-2, «una violenta organización narcotraficante mexicana con sede en Nayarit y Sinaloa, México, que anteriormente estaba dirigida por Juan Francisco Patrón Sánchez».
En un comunicado, indicó que «el Cártel H-2 tenía numerosas células de distribución en los Estados Unidos, incluso en Los Ángeles, Las Vegas, Ohio, Minnesota, Carolina del Norte y Nueva York».
«La DEA estima que entre enero de 2013 y febrero de 2017, el Cártel H-2 distribuyó mensualmente aproximadamente 500 kilogramos de heroína, 100 kilogramos de cocaína, 200 kilogramos de metanfetamina y tres mil kilogramos de mariguana a Estados Unidos y ganó millones de dólares en ingresos ilegales», dijo.
De acuerdo con el Departamento, «para promover su operación de narcotráfico, el Cártel H-2 utilizó armas de fuego y violencia física, incluida la tortura y decenas de homicidios».
«Veytia usó su posición como el principal agente del orden público en el estado de Nayarit para ayudar y sancionar las operaciones del cártel en México, a cambio de sobornos mensuales», acusó.
Asimismo, las autoridades estadounidenses determinaron que «Vetyia también ordenó a otros policías mexicanos corruptos bajo su supervisión que ayudaran al Cártel H-2, liberó a miembros y asociados del cártel de prisión después de haber sido arrestados por delitos relacionados con el narcotráfico, instruyó a policías mexicanos corruptos para que atacaran a sus rivales traficantes de drogas para escuchas telefónicas y arrestos, y ayudó al Cártel H-2 a llevar a cabo asesinatos y otros actos de violencia. Además, Veytia ayudó al Cártel H-2 a encubrir el asesinato de un narcotraficante rival en octubre de 2015».