En el 2021 predominaron los desplazamientos provocados por grupos armados, que fueron el motivo del desplazamiento de 21 mil 443 personas, quienes huyeron de Chihuahua, Michoacán, Guerrero, Nayarit, Chiapas, Jalisco, Zacatecas, Durango y Nayarit.
Ciudad de México, 27 de enero (SinEmbargo).– La violencia a manos de grupos armados organizados –entre los cuales se encuentran grupos delictivos como los cárteles– fue la principal causa del desplazamiento interno forzado en México durante el 2021, mientras que el número de afectados por cualquier tipo de violencia en este año fue el más alto que se ha registrado hasta ahora con 28 mil 943 registros, anunció la Comisión Mexicana de Defensa y Promoción de Derechos Humanos (CMDPDH) en su informe más reciente.
El documento "Episodios de desplazamiento interno forzado en México 2021", destacó el incremento en episodios de desplazamiento masivo en Zacatecas, un estado que ha sido azotado en los últimos meses por la violencia a manos del crimen organizado, así como un aumento en personas desplazadas por la violencia en Michoacán que en 2021 sumaron 13 mil 515, así como Chiapas con siete mil 117 y Zacatecas con tres mil 693. Estos tres estados concentraron el 84 por ciento de las personas desplazadas en los episodios de desplazamiento masivo registrados en el 2021.
"Hubo 10 eventos de desplazamiento vinculados con el crimen organizado en Zacatecas, que fue la mayor cantidad de eventos en cualquier estado durante este año", indicó Lígia de Aquino, coordinadora de desplazamiento interno forzado en la Comisión, en entrevista con SinEmbargo. "Esto tiene que ver mucho con la dinámica de estos grupos que están generando los desplazamientos. (...) Estos grupos suelen tener dinámicas internas de poder y que genera una disputa interna, o disputas de un cártel con otro por control de territorio".
La internacionalista profundizó que hubo un intento de expansión en el control territorial del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), con un foco de disputas en Zacatecas, pero asimismo en Jalisco aunque hubo un menor registro en medios de comunicación al respecto. "Hace unos años había situaciones muy parecidas en Michoacán y en Guerrero, y ahora se han concentrado en la región de Zacatecas y alrededores", apuntó.
De los 42 episodios de desplazamiento masivos, que se consideran como aquellos donde al menos cinco familias o 20 personas fueron víctimas, Zacatecas registró el mayor número con 10, seguido por Chiapas con nueve. Además, fue la primera vez en registro que Nayarit presentó un evento de desplazamiento masivo, también relacionado con el crimen organizado y que tuvo impacto igualmente en Durango y Zacatecas.
Desde que inició el recuento en el 2016, la CMDPDH ha registrado un total de 379 mil 322 personas desplazadas, siendo la mayoría de ellas originarias de Michoacán (26 mil 508), seguido por Guerrero con 23 mil 598 y Chiapas con 22 mil 070.
El crecimiento de personas desplazadas en el 2021 fue casi del 300 por ciento, apuntó la Comisión.
El informe de 2021 fue realizado principalmente a partir de notas periodísticas que reportaron los eventos masivos de desplazamiento, y con confirmación o mayores datos a través de otras fuentes, por lo que el número de personas desplazadas internamente probablemente sea mucho mayor y haya más localidades desde las cuales huyeron personas, reconoció De Aquino.
"Estamos hablando solamente de los casos que son reportados, que son identificados y que los periodistas reportan", detalló. "Todavía no contamos con una fuente de información que nos permita tener datos exhaustivos sobre este fenómeno, entonces en ese sentido, tanto en números [de personas desplazadas] como en zonas geográficas donde todavía no contamos con información, sólo registros de casos puntuales que se tendrían que explorar más a fondo, sí podríamos decir que hay una probabilidad grande de que este fenómeno todavía esté bastante subreportado en México".
VIOLENCIA POR GRUPOS ARMADOS PREDOMINA
El reporte de la organización civil identificó que las causas principales de los episodios de desplazamiento masivo fueron tres: la presencia de grupos armados organizados, violencia política por conflictos sociales y territoriales, y violaciones a derechos humanos.
Prevalecieron los desplazamientos debido a grupos armados, que fueron el motivo de 31 episodios de 42 registrados en total, es decir del 73.81 por ciento. Las 21 mil 443 personas afectadas huyeron de Chihuahua, Michoacán, Guerrero, Nayarit, Chiapas, Jalisco, Zacatecas, Durango y Nayarit.
"En Michoacán no es una situación tan nueva; sabemos que la violencia del crimen organizado ha estado presente" desde hace varios años, apuntó De Aquino. Sin embargo, remarcó que una novedad observada en el recuento de 2021 fue que hay personas que huyen de Michoacán hasta la frontera con Estados Unidos a través de Tijuana, lo cual indica que la violencia se ha expandido y ya no es suficiente desplazarse hacia otro municipio o estado.
"Ya no es una violencia tan focalizada, sino hay un control tan amplio de estos grupos en el territorio de Michoacán que ya no sirve muchas veces ir a la cabeza municipal o ir a otro municipio", expuso. El número de municipios afectados en el estado fue de 28, con un total de 82 localidades desde las cuales huyeron las personas.
La CMDPDH resaltó que 10 de los 42 episodios de desplazamiento masivo se debieron a conflictos sociales y territoriales, los cuales ocurrieron en Chiapas y Oaxaca y afectaron en su totalidad a poblaciones indígenas.
Chiapas fue el único estado en 2021 con episodios producidos por dos tipo de violencia: violencia política, conflictividad social y conflictos territoriales; y violencia generada por grupos armados organizados. Asimismo, en este estado se registró, por primera vez en los informes de la Comisión, una situación de desplazamiento intermitente, lo cual define como "situaciones en las cuales el conjunto o parte de la población desplazada retorna a su lugar de origen o de residencia habitual y vuelve a desplazarse en repetidas ocasiones y de manera frecuente".
"El conflicto que se sigue vigente entre Aldama y Chenalhó sigue desplazando a personas desde hace al menos cuatro años (...) la población que vive en esta región tiene que estar desplazándose de manera constante; cuando se intensifican los ataques tienen que desplazarse y luego vuelven a sus hogares", detalló la coordinadora.
"Algo que destacaría en Chiapas también es el tema del crimen organizado. Hasta los años anteriores, la totalidad de los desplazamientos internos que habíamos registrado estaban relacionados con conflictos territoriales, ya sea conflictos por intolerancia religiosa, políticos , conflictos intercomunitarios o con la actuación de grupos de corte paramilitar, que era el principal actor que teníamos identificado, pero durante el 2021 registramos que los medios reportaron desplazamientos generados por el crimen organizado", añadió.
En un análisis más detallado de las causas de los episodios de desplazamiento masivo, detectó diferentes detonantes: incursiones y ataques violentos con enfrentamientos, incursiones y ataques violentos que afectaron principalmente a poblaciones indígenas, temor fundado en la comunidad por la violencia de organizaciones criminales, ataques violentos con expulsiones y/o amenazas, enfrentamientos, privaciones ilegales de la libertad y/o otros delitos contra la vida e integridad física de personas de la comunidad.
En estos detonantes hubo presencia de uso de armas de fuego, quema o balaceo de casas, cultivos y/o negocios; amenazas, saqueo de viviendas, robo de animales o cultivos, asesinatos de personas en las comunidades, desaparición de personas, detenciones, extorsiones o cobro de cuotas, represión, arresto de familiares, agresiones físicas directas, acoso sexual, despojo de tierras, reclutamiento forzado a grupos armados, represalias y ajustes de cuentas o venganzas.
FAMILIAS ENTERAS SON AFECTADAS
En el 88.1 por ciento de los episodios de desplazamiento se identificaron familias enteras como las afectadas, lo que implicó una variedad de perfiles en cuanto a grupos de edades y género de las personas desplazadas, señaló la CMDPDH. Desde que la Comisión inició su recuento en el 2016, el 2021 ha sido el año con mayor mención a familias enteras en episodios de desplazamiento.
"El hecho de que se vea obligada a salir una familia entera significa que no estamos hablando de una violencia direccionada", remarcó De Aquino. "Creo que tiene relación con que a veces hay una discriminación, o un prejuicio de que si alguien tuvo que desplazarse es porque seguro estaba involucrado con algo, pero si se está afectando a familias completas es porque hay violencia de alto impacto, como en un enfrentamiento que hay un ataque armado, entonces hay un riesgo a la vida y a la integridad de las personas, entonces las familias se ven obligadas a salir porque no están seguras en ese territorio".
La organización pudo identificar que en al menos 50 por ciento de los casos una presencia específica de niñas y niños, mientras que en el 47.62 se mencionó la presencia de mujeres.
Por otro lado, en 16 de los 42 episodios se indicó la presencia de personas adultas mayores, y en otros siete la presencia de jóvenes, sin que se especificara su edad.
Incluso, un episodio registrado en el municipio de Tepalcatepec, Michoacán, y provocado por un enfrentamiento entre dos grupos criminales, se reportó el desplazamiento de personas jóvenes con discapacidad.
POBLACIÓN INDÍGENA, LA MÁS VULNERABLE A DESPLAZAMIENTOS
La tercera parte de los episodios afectaron a la población indígena –que registró al menos ocho mil 174 personas desplazadas–, apuntó la CMDPDH, con nueve de los 14 hechos ocurridos en Chiapas, seguido por Chihuahua y Oaxaca.
"Los porcentajes de personas indígenas, dentro de la población desplazada, son más altos, lo que indica que esta población está particularmente vulnerable al desplazamiento interno", reforzó la coordinadora de desplazamiento interno forzado en la Comisión.
El estudio precisa que de los episodios que desplazaron a personas indígenas durante el 2021, 10 ocurrieron en contextos de violencia política, conflictividad social y conflictos territoriales en los estados de Chiapas y Oaxaca, y cuatro se generaron debido a la violencia causada por grupos armados organizados en Chiapas y en Chihuahua.
"En Chihuahua, en la Sierra Tarahumara, hay mucha población indígena afectada por desplazamiento y está relacionado con el crimen organizado, ya sea porque quiere sembrar y cosechar, o explotar el trabajo forzado de la población; incluso hay ciertas áreas donde el crimen organizado ha expandido su actuación y hemos registrado mucho la tala ilegal", señaló De Aquino.
En los casos de Oaxaca y Chiapas, pudo identificar una mayor presencia de conflictos políticos. Por ejemplo, en el primer estado acotó que varios conflictos están relacionados con el sistema de usos y costumbres o conflictos intracomunitarios por decisiones que se toman a partir de dicho sistema.
La investigación pudo identificar algunos de los pueblos afectados: tzotziles, tzeltales, rarámuris, zoques y miztecos.
Con base en la información disponible, la Comisión pudo confirmar únicamente un episodio de retorno de desplazados, siendo éste las tres mil 064 personas, de tres mil 205 desplazadas, que retornaron a los municipios de Pantelhó y Chenalhó en Chiapas. En tanto, al menos otras 25 mil 879 personas siguen en situación de desplazamiento interno forzado.
"LA RESPUESTA GUBERNAMENTAL ES INSUFICIENTE"
A diferencia de años anteriores, De Aquino consideró un avance el hecho de que en los últimos años se haya hecho un reconocimiento federal del problema de desplazamiento interno forzado en México y que haya espacios públicos para que se toque el tema. Sin embargo, recordó que este cambio se produjo hace ya cuatro años, sin que desde entonces haya avances notorios en materia de presupuesto y asignación de otro tipo de recursos.
"Hay personas que llevan años décadas en situación de desplazamiento sin tener una solución entonces sí, a pesar de que reconocemos los retos sí también le estamos observando que la respuesta ha sido insuficiente por varias razones", sentenció. "Se han hecho estudios, se han hecho publicaciones, se han hecho eventos y todo eso está muy bien, pero en materia de atención hemos avanzado muy poco. Incluso en diálogo con las autoridades nos dicen que hay muchos obstáculos relacionados justamente con la falta de un marco normativo".
A pesar del incremento en el número de personas desplazadas de los últimos años, desde el 2020 el Senado tiene congelada la iniciativa de Ley General para Prevenir, Atender y Reparar Integralmente el Desplazamiento Forzado Interno, la cual ya había sido aprobada por la Cámara de Diputados.
Esto ha provocado una falta de estructura administrativa y burocrática para asignar recursos tanto económicos como de personal, así como falta de capacitación de funcionarios para poder identificar a personas desplazadas y que se hagan respetar sus derechos, advirtió De Aquino.
Sobre este último punto, recordó que la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas (CEAV), tanto en instancias federales como locales, debería de hacer el reconocimiento de personas desplazadas, pero al no haber documentación que los acredite como víctimas directas de un delito o una recomendación de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), "muchas de ellas no logran acceder a este registro" de víctimas.
Aunque existe una falta de estructura y ley a nivel federal, mencionó la investigadora, hay estados que ya han implementado leyes locales para atender el desplazamiento interno forzado. "Hemos visto avances que también demuestran que hay cosas que se podrían reproducir en otros estados o a nivel federal, porque algunas entidades sí están logrando hacer cosas, aunque no tengan una ley, por ejemplo en Chihuahua, ¿por qué no en otros lugares?".