El director del INAH destacó que la investigación arqueológica que se realiza al suroeste de México es la más amplia que se haya llevado a cabo en el área maya del país y de Mesoamérica en toda la historia.
Ciudad de México, 8 de diciembre (SinEmbargo).- Diego Prieto, director general del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), dio a conocer esta mañana que como parte de los recientes hallazgos arqueológicos en la región por donde pasará el Tren Maya, el pasado 23 de noviembre fue encontrada una escultura de piedra caliza en la zona arqueológica Oxkintok, en Yucatán.
Durante su participación en la conferencia de prensa matutina del Presidente Andrés Manuel López Obrador, el antropólogo señaló que el personaje, el cual se está recuperando, está labrado en piedra caliza y mediría aproximadamente un metro con 68 centímetros.
«Es una figura humana decapitada, lo que representa seguramente a un guerrero que fue prisionero en combate y que en representación en piedra está ofrendada a las estructuras de esta zona arqueológica que forma parte de la ruta Puuc, en los límites de Campeche», dijo Diego Prieto.
Asimismo, destacó que la investigación arqueológica realizada al suroeste del país es la más amplia que se haya llevado a cabo en el área maya de México y de Mesoamérica en toda la historia.
Detalló que para este trabajo el INAH tiene desplegados más de 950 especialistas, de los cuales 50 son personal del Instituto y alrededor de 900 son profesionistas contratados específicamente para este proceso de investigación.
Esta investigación, dijo, cuenta con tres grandes etapas. Explicó que la primera es la prospectiva, la cual se realiza con base a la información preexistente gracias a las imágenes obtenidas de los vuelos LíDAR que es un sistema de detección de los accidentes en el suelo, pero también de toda la información cartográfica se hace la prospección en campo que es la revisión del terreno donde se habrá de revisar no sólo la obra del troncal del tren, sino otras obras adyacentes a la obra.
Además, indicó que el INAH ya trabaja en los siete tramos del Tren Maya. En ese sentido, informó que en los tres primeros ya se ha concluido el trabajo de campo, por lo que sólo queda el trabajo de laboratorio y Gabinete. Mientras que el 100 por ciento de la excavación del material arqueológico se concluyó en los tramos 1, 2 y 3.
«En el Tramo 4 tenemos muy avanzada la tarea de excavación de los materiales arqueológicos, sólo nos queda alrededor del 18 por ciento de la excavación que tenemos programada realizar en ese tramo, esperamos concluirlo a más tardar de lo que resta este año 2022», agregó.
En tanto que en los tramos 5, 6 y 7, los cuales se han iniciado con posterioridad, el INAH se encuentra realizando la fase de prospección, y en el Tramo 5 esta fase ya concluyó, por lo que ahora iniciarán las tareas de excavación.
Posteriormente, el director del INAH mostró un video del Instituto, en el que muestra la realización de los trabajos en el Tramo 7 del Tren Maya, que abarca 254 kilómetros y va de Chetumal, en Quintana Roo, a Escárcega, Campeche.
De acuerdo con la información presentada, en las más de 700 mil hectáreas de este sitio, conocido como Selva Maya, se conocen cerca de 300 sitios arqueológicos que hablan de un mecanismo de subsistencia basado en la milpa maya y en el almacenamiento del agua de lluvia.
En esta zona arqueológica de Calakmul, estuvo rodeada de numerosos asentamientos de diferentes tamaños y extensiones, según el Instituto Nacional de Antropología e Historia.
Como parte del Programa de Mejoramiento de Zonas Arqueológicas (Promeza), inscrito en las obras del Tren Maya, se prevé la realización de trabajos de conservación en estructuras abiertas a la visita, así como la restauración de elementos decorativos y la construcción de un centro de atención a visitantes en la zona arqueológica de Calakmul.
El INAH destacó que hasta la fecha se han encontrado más de mil 730 construcciones prehispánicas en el Tramo 7, que van desde sencilla arquitectura doméstica hasta construcciones monumentales para actividades civiles y ceremoniales.
Asimismo, el Instituto ha documentado complejos sistemas habitacionales con camellones y muros residenciales que reflejan una compleja organización urbana, con lo cual ayudará a entender la vida cotidiana y las estrategias de subsistencia de la sociedad maya, así como a comprender la manera de ser, pensar y actuar de los antiguos mayas.