La organización WJP publicó los resultados anuales que permiten analizar que acciones de política publica son urgentes y necesarios.
Por Carlos Álvarez Acevedo
Ciudad de México, 26 de octubre (Zeta).- El Estado de Derecho en México empeoró por cuarto año consecutivo, al obtener un puntaje de 0.42 y colocarse en el lugar 115 de 140 países evaluados, según datos del Índice Global del presente año, difundido, el 26 de octubre del 2022, por la organización no gubernamental internacional World Justice Project (WJP).
Según el citado informe, México ocupó el lugar 115 de 140 países, con un puntaje de 0.42 en una escala de 0 a 1, en donde 0 es una débil adherencia al Estado de Derecho y 1, una muy fuerte. Para el ranking 2021, la República Mexicana obtuvo un puntaje de 0.43, lo que lo llevó a ocupar el lugar 113 de 139 países medidos por la organización no gubernamental internacional.
“Entre sus tendencias más importantes está el deterioro del factor que mide el orden y seguridad. También, se observan las tendencias globales del deterioro del sistema de justicia civil y el debilitamiento de los contrapesos no gubernamentales como la sociedad civil y la prensa. A esto se suma un estancamiento en materia anticorrupción”, indicó el WJP.
En contraparte, se reportó que México mantiene fortalezas en rubros como Gobierno abierto y el respeto a la ley derivado de la transición de poderes, aunado a la integridad en las elecciones. Además, la ONG internacional colocó a la República Mexicana, en comparación con los demás países medidos de América Latina y el Caribe, en el lugar 27 de 32 naciones medidas.
La principal diferencia entre el Índice Global de #EstadoDeDerecho de @TheWJP y el Índice de México de @TheWJP_mx, es que el global evalúa a 140 países mientras que el nacional a los 32 estados de 🇲🇽
— World Justice Project (México) (@TheWJP_mx) October 26, 2022
El mejor desempeño de la región corresponde a Uruguay -con el puesto 25 de los 140 países encuestados en el mundo-, seguido de Costa Rica y Chile. Asimismo, los países de la región con los puntajes más bajos son Nicaragua, Haití, y Venezuela, con el lugar 140.
“En el último año, 21 de los 32 países de América Latina y el Caribe empeoraron sus puntajes. De esos 21 países, 16 también habían empeorado sus puntajes el año pasado. Entre los países de ingreso mediano-alto, México ocupa el puesto 39 de 42”, señaló WJP.
México ha venido perdiendo un punto en cada nueva edición del Índice Global de Estado de Derecho del World Justice Project, ya que en el año 2019 obtuvo 0.45; mientras que en 2020 sumó 0.44; en 2021, un 0.43; y en 2022, un 0.42.
A nivel internacional, los tres países que obtuvieron las calificaciones más altas y se coloraron en los primeros lugares del ranking, son: Dinamarca (0.90), Noruega (0.89) y Finlandia (0.87), mientras que los tres últimos son Venezuela (0.26), Camboya (0.31), y Afganistán (0.33).
Por ello, los dos ejercicios no son comparables. La primera edición del Índice de Estado de Derecho en México de @TheWJP_mx se publicó en 2018 y la del Índice Global de Estado de Derecho en 2008.
México se incorporó a la medición global en 2009.
— World Justice Project (México) (@TheWJP_mx) October 26, 2022
El índice es un instrumento que mide el Estado de Derecho a partir de la evaluación de ocho factores: uno, límites al poder gubernamental; dos, ausencia de corrupción; tres, Gobierno abierto; cuatro, derechos fundamentales; cinco, orden y seguridad; seis, cumplimiento regulatorio; siete, justicia civil; y ocho, justicia penal. La calificación va de 0 a 1, en donde cero significa ausencia total de Estado de Derecho y uno máxima adhesión al ordenamiento institucional.
“La recolección y análisis de datos provenientes de 140 países y jurisdicciones, realizados por el World Justice Project, muestran que la adherencia al Estado de Derecho cayó en 61 por ciento de los países encuestados este año incluido México”, precisó la ONG internacional.
“Estamos saliendo de la pandemia, pero no de la recesión global del Estado de Derecho […] En el fondo, el Estado de Derecho se trata de equidad, es decir, rendición de cuentas, igualdad de derechos y justicia para todos. Y un mundo menos equitativo está destinado a ser un mundo más inestable”, dijo Elizabeth Andersen, directora ejecutiva del World Justice Project.
