Mientras que Rusia piensa que Ucrania podría lanzar una bomba sucia en contra suya, y en gran parte apoyado por la OTAN, la organización internacional también tiene sus sospechas con que Rusia podría seguir un "patrón" que aseguran haber visto para emplear armas radioactivas.
Madrid, 24 de octubre (EUROPA PRESS).- El Secretario General de la OTAN, Jens Stoltenberg, ha rechazado este lunes las sospechas rusas sobre el posible uso de una bomba sucia por parte de Ucrania, una tesis tildada por el líder de la Alianza como "absurda" que no ha recibido ningún tipo de aval internacional y que ha sido también desmentida por Kiev.
"La acusación de que Ucrania se está preparando para usar bombas sucias en Ucrania es absurda", ha dicho Stoltenberg en una entrevista con Politico en la sede de la Alianza Atlántica en Bruselas, en la que también ha dicho que Kiev "lucha duro para liberar" su territorio.
"Lo que nos preocupa es que esto sea parte de un patrón que hemos visto antes en Rusia, en Siria, pero también al comienzo de la guerra, o justo antes de que comenzara la guerra en febrero. Y es que Rusia está acusando a otros [de] hacer lo que tienen la intención de hacer ellos mismos", ha agregado.
En conversaciones telefónicas con el Secretario de Defensa de Estados Unidos, Lloyd Austin, y con el titular de Defensa británico, Ben Wallace, Stoltenberg también se ha referido a las sospechas rusas sobre el supuesto uso de una bomba sucia en Ucrania.
Spoke with 🇺🇸 @SecDef & 🇬🇧 @BWallaceMP about #Russia’s false claim that #Ukraine is preparing to use a dirty bomb on its own territory. #NATO Allies reject this allegation. Russia must not use it as a pretext for escalation. We remain steadfast in our support for Ukraine.
— Jens Stoltenberg (@jensstoltenberg) October 24, 2022
"Los aliados de la OTAN rechazan esta acusación. Rusia no debe usarlo como pretexto para la escalada. Seguimos firmes en nuestro apoyo a Ucrania", ha reiterado el secretario general de la Alianza Atlántica en su perfil oficial de Twitter.
Estados Unidos, Reino Unido y Francia han expresado públicamente sus dudas, pero el responsable de la unidad de armas radioactivas de las Fuerzas Armadas, Igor Kirilov, ha subrayado este lunes que cuentan con "pruebas" de que "el régimen de Kiev está planeando una provocación".
Según la versión rusa, las fuerzas ucranianas plantean utilizar una bomba sucia o cualquier otro artefacto con poca carga nuclear. "El objetivo es acusar a Rusia de utilizar armas de destrucción masiva y lanzar una gran campaña antirrusa", ha aseverado Kirilov, según la agencia de noticias TASS.
El oficial ha recordado que ya en febrero el Presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, anunció su deseo de que Ucrania volviese a ser una potencia nuclear y, a lo largo del conflicto, "ha pedido en reiteradas ocasiones a los países de la OTAN que lancen ataques contra Rusia".
Los avisos de Rusia sobre la supuesta utilización de armas radiológicas, más conocidas como bombas sucias, en Ucrania, negados por las principales autoridades ucranianas, han alimentado el temor a una escalada nuclear en el conflicto, en la medida en que se trata de un artefacto que incluye entre sus componentes material radioactivo.
Kiev teme que Moscú esté ya buscando excusas para subir un peldaño más, habida cuenta de que el Presidente ruso, Vladimir Putin, ha agitado en más de una ocasión la amenaza a un ataque nuclear, de consecuencias imprevisibles tanto para la región como para el mundo.
La bomba sucia tiene como principal elemento explosivos comunes, como la dinamita, pero incluye también perdigones o polvo radioactivo. La detonación del artefacto conlleva que el material asociado se esparza en la zona cercana, aunque en ningún caso generaría una explosión de una magnitud equiparable a las de una bomba nuclear, ni tampoco la "nube de hongo" que se asocia, por ejemplo, a los casos de Hiroshima y Nagasaki.
Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de Estados Unidos establecen como "principal peligro" de una bomba sucia la explosión en sí, que puede causas daños en la zona aledaña. La exposición a los materiales radioactivos "probablemente" no supondrían un riesgo de enfermedad grave, a excepción de aquellas personas que estén "muy cerca" de la explosión.
El Organismo Internacional de la Energía Atómica (OIEA) concluyó hace dos décadas que "el impacto más grave" de un arma radiológica sería "el pánico y las alternaciones sociales" que provocaría la detonación, equiparable en sus efectos a "un acto de terrorismo".
De hecho, durante las últimas décadas el principal temor de los expertos es que los grupos terroristas puedan utilizar este tipo de armas, como ya quedó de manifiesto en a mediados de la década de los noventa en Chechenia. A esta república rusa corresponden los dos únicos intentos documentados de uso de bombas sucias.
🇷🇺 El Ministerio de Defensa ruso ha informado que ha hablado con sus homólogos de EE.UU, Reino Unido, Francia y Turquía para hablar de la situación en Ucrania y sus "preocupaciones" porque Ucrania utilice una "bomba sucia".https://t.co/qZ67Poc6Qx
— Descifrando la Guerra (@descifraguerra) October 24, 2022
RECOMENDACIONES MÉDICAS
Los CDC advierten, en cualquier caso, de que el polvo y el humo sí puede esparcirse y ser peligroso en caso de inhalación, por lo que las autoridades norteamericanas recomiendan permanecer en lugares cerrados o, en caso de estar en el exterior, cubrirse nariz y boca con algún tipo de prenda. También desaconseja tocar objetos que puedan estar contaminados.
El consumo de yoduro de potasio es recomendable en el caso de contaminación radioactiva --por ejemplo tras un accidente en una central nuclear--, pero los CDC no lo ven como una prioridad en el caso de las bombas sucias, ya que no hay forma de conocer de primeras la composición del artefacto y puede ser contraproducente.
Asimismo, tampoco creen que el consumo de agua o alimentos en el área cercana a la bomba sucia suponga un riesgo. No obstante, por prevención, recomienda no beber ni ingerir nada que hubiese estado expuesto al aire libre.