Corea del Norte disparó dos misiles balísticos el jueves, su sexta ronda de lanzamientos de este tipo de armas en menos de dos semanas; los ejercicios de los estadounidenses y surcoreanos, en aguas internacionales, incluyen al portaaviones nuclear Ronald Reagan.
Por Hyung-Jin Kim
SEÚL, Corea del Sur (AP) — El portaaviones nuclear estadounidense Ronald Reagan y buques de guerra surcoreanos iniciaron el viernes una nueva ronda de ejercicios navales, un día después de que Corea del Norte disparara más misiles balísticos y utilizara aviones de combate en una intensificación de las tensiones con sus rivales.
El portaaviones y su grupo de batalla regresaron a aguas próximas a la península coreana después de que Corea del Norte lanzara esta semana un misil con capacidad nuclear que cruzó los cielos de Japón en respuesta a los ejercicios previos del grupo de navíos estadounidenses con buques navales surcoreanos. Pyongyang considera que los ejercicios militares entre Washington y Seúl son un ensayo para invadir al país.
Las maniobras de los últimos dos días, en las que también participan destructores estadounidenses y surcoreanos, así como naves de otro tipo, se llevaban a cabo en aguas internacionales frente a la costa oriental de la península. Los ejercicios tienen como propósito reforzar la capacidad de defensa de los aliados e incluirán adiestramiento para escoltar al Reagan al sureste de la isla sureña surcoreana de Jeju, dijo en un comunicado el Estado Mayor Conjunto de Corea del Sur.
“Continuaremos reforzando nuestras firmes capacidades operativas y preparación para responder a cualquier provocación de Corea del Norte”, según el comunicado.
El Gobierno norcoreano podría reaccionar a las nuevas maniobras con más pruebas de misiles. La Cancillería del país dijo el jueves que el nuevo despliegue del grupo del portaaviones representa “una seria amenaza para la estabilidad de la situación en la península coreana y su vecindad”.
Con su ritmo sin precedentes de pruebas de armas de este año, Corea del Norte pretende amenazar de manera creíble con armas nucleares al territorio continental de Estados Unidos y de sus aliados regionales, para después entablar negociaciones con Washington desde una postura de mayor fuerza como un Estado nuclear reconocido.
Corea del Norte disparó dos misiles balísticos el jueves, su sexta ronda de lanzamientos de este tipo de armas en menos de dos semanas.