El edificio ubicado en el número 1034 de la calle Mariposa, en la Alcaldía Benito Juárez, fue denunciado por los propios condóminos, quienes temen haber sido víctimas del llamado «Cártel Inmobiliario».
Ciudad de México, 24 de septiembre (SinEmbargo).– En mayo de 2019 un vecino de la Benito Juárez alertó de una obra irregular que se estaba construyendo sobre la calle Mariposa en el número 1034. Invadía la banqueta, reducía el arroyo vial a un carril y sobre todo prometía departamentos en cinco niveles cuando en esa zona sólo se permitían tres.
Nadie en la Alcaldía hizo caso a su denuncia y luego de un año la constructora terminó la obra, vendió 15 departamentos a un precio de entre 5 y 7 millones cada uno a familias que hoy denuncian ante el Gobierno de la Ciudad de México a esa empresa porque sus viviendas carecen de suficiente agua, de medidores de luz y tienen irregularidades en sus escrituras. Temen haber sido defraudados con el modus operandi del «Cártel Inmobiliario».
El señor Leonardo Fuentes, junto con la administradora del edificio ubicado en el número 1034, acudieron a nombre de los condóminos a la Secretaría de Desarrollo Urbano y Vivienda (Seduvi) el primer día que se instalaron las mesas de atención a posibles víctimas de corrupción en desarrollos inmobiliarios en Benito Juárez para exponer su caso porque escucharon de una red de exfuncionarios de la Alcaldía señalados de presunto enriquecimiento ilícito en contubernio con constructoras. Al salir de la dependencia confirmaron sus sospechas: su edificio tenía todas las características de haber sido construido de forma irregular.
«Llevé toda la información respecto a las áreas comunes del condominio, revisaron algunos documentos y por lo que me dijeron es que sí había algunas inconsistencias, como documentos que era extraño que se hubieran expedido, que dijeran una cosa y que en el sistema no estuvieran. Nos recomendaron hacer una denuncia más formal porque son muchas inconsistencias en los permisos; por ejemplo, nada está a nombre de la constructora, está a nombre de personas que no sabemos ni siquiera si existen y no podemos regularizar los trámites porque no hay papeles, no tenemos un estudio de factibilidad del agua, no tenemos un comprobante de pago», contó en entrevista la encargada del edificio al salir de la Seduvi.
El edificio denunciado por los propios condóminos fue construido en el año 2019 por la inmobiliaria Llave.Mx, cuyo socio es la constructora TuTierra.MX, entre denuncias de los vecinos de la colonia General Pedro María Anaya que se quejaban de esta obra vía Twitter.
Las denuncias de particulares hicieron que la Procuraduría Ambiental y del Ordenamiento Territorial (PAOT) realizara una revisión a la obra en construcción y constatara algunas irregularidades que se veían a simple vista, como el invadir la banqueta y la edificación de cinco niveles en una zonificación donde solo se permitían tres. No obstante, el 28 de octubre de 2019 la dependencia emitió una resolución en donde afirmó que la persona que se ostentó como propietaria del inmueble presentó toda la documentación en regla ante la Alcaldía Benito Juárez y la obra continuó hasta su término.
Fue así como el señor Leonardo Fuentes y otras 14 familias que buscaban hacerse de un patrimonio tuvieron la confianza de comprar un departamento en el edificio 1034 de la calle Mariposa.
«Nosotros adquirimos nuestro departamento con Llave.MX. Aquí había un montón de lonas y letreros y después nos dijeron que la constructora era una empresa llamada Tutierra.mx y nos dieron un número de contacto con una de sus arquitectas», contó el señor Leonardo, quien habita desde abril de 2021 en el edificio.
Las irregularidades fuertes, recordó, comenzaron en la temporada de lluvia, por julio y agosto de 2021. «Empezaron a haber muchas filtraciones, un día que granizó y llovió fuerte se metió el agua a mi departamento por las ventanas porque estaban mal selladas y porque no tenían coladeras en la jardinera, entonces eso se empezó a inundar de agua y se filtró hacia mi departamento».
Si bien en la resolución de la PAOT-2019-2060-SOT879 se señalaba que la obra estaba en regla, en las mesas de denuncia que el Gobierno de la Ciudad de México instaló desde el 12 de septiembre, los funcionarios de la Seguridad de las Construcciones, del Registro Público de la Propiedad, de la Seduvi y del equipo de la Consejería Jurídica advirtieron a los condóminos que algunos documentos que la constructora les dio presentaban inconsistencias y ahora su inmueble es uno de los más de 100 investigados vinculados al «Cártel Inmobiliario» de Benito Juárez.
«Hemos documentado que esta serie de posibles irregularidades van desde el otorgamiento de escrituras públicas con inconsistencias sobre niveles, áreas comunes e indivisos, incumplimiento en los servicios prometidos por la desarrolladora; venta de áreas comunes; e incumplimiento con la densidad de los espacios de propiedad exclusiva, entre otros», aseguró Ulises Lara, vocero de la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México (FGJ-CdMx) la semana pasada en conferencia de prensa.
Los condóminos del edificio 1034 pidieron ayuda a las autoridades capitalinas, pues acusan que son extorsionados por la constructora, la cual no les ha proporcionado todos los servicios correspondientes, como las tomas individuales de agua y de luz.
«Pedimos que investiguen a esta constructora, estos señores tienen 40 años trabajando y construyen con este tipo de irregularidades y nosotros estamos indefensos porque no podemos hacer el trámite por nuestra parte. Recientemente nos enteramos de que la toma de agua no es la adecuada para este edificio, es para una vivienda y ahora somos 15 departamentos, nos quedamos sin agua porque el consumo es demasiado», denunció Leonardo Fuentes.
SinEmbargo contactó vía telefónica a la inmobiliaria LlaveMX y a la constructora TuTierra.mx para obtener su postura acerca de las denuncias de los condóminos del edificio 1034, pero hasta el cierre de esta nota no obtuvo respuesta.
LAS IMPERFECCIONES EN EL EDIFICIO
En un recorrido realizado por el equipo de SinEmbargo al edificio 1034 de la calle Mariposa se observa desde el exterior un medidor de luz colocado provisionalmente que está llenó de cables al descubierto para abastecer de energía a los 15 departamentos.
También en el exterior del inmueble se observa una caja con 15 huecos donde supuestamente la Comisión Federal de Electricidad (CFE) instalaría los medidores, como prometió hace un año la constructora a las familias que adquirieron un departamento.
«Cuando yo llegué, en abril de 2021, el edificio todavía estaba en obra y teníamos este medidor que está aquí», contó el señor Leonardo señalando el medidor que abastece a los 15 departamentos. «Supusimos que la constructora iba a poner los medidores de áreas comunes y los individuales en un tiempo razonable, pero cada que les preguntábamos cuándo los iban poner nos decían que en dos o tres semanas y así nos trajeron por meses y no se ha cumplido eso».
Al entrar al edificio se observan a simple vista otras imperfecciones en la construcción, como filtraciones en áreas comunes, un elevacoches descompuesto al mes de ser instalado, un tinaco de tipo industrial y no doméstico que no tiene base ni está bien colocado, además de los vicios ocultos que los condóminos denuncian que hay al interior de sus departamentos.
«Hay filtraciones de las jardineras y de las terrazas hacia el estacionamiento y los autos han sufrido daños», describió otro de los vecinos del inmueble.
Además, se observa que el sistema de agua automático de la cisterna al tinaco ya no funciona, por lo que los guardias tienen que activarlo porque sino se quedan sin agua. «Nos han venido a hacer algunos trabajos que lo que buscan es arreglar el problema momentáneamente», destacó otro de los inquilinos.
Al recorrer cada nivel del edificio se observan más imperfecciones en el inmueble que lleva poco más de un año de haberse terminado: paredes dañadas por filtraciones de agua, cables de luz expuestos, como si aún estuviera en obra negra, un extintor oxidado y charcos de agua por falta de coladeras en las áreas comunes.
Otra de las quejas de los condóminos es el agua, pues la constructora les vendió los departamentos con una toma que abastece a todos y al intentar regularizar ante el Sistemas de Aguas de la Ciudad de México (Sacmex) se dieron cuenta que la toma de su edificio está a nombre de la persona que era dueña de ese predio y es para casa-habitación.
«El agua tampoco está individualizada, tenemos una toma general para todos y recientemente nos enteramos que además el medidor de agua está a nombre de la persona que era dueña antes de la construcción, es una toma para una casa-habitación, no para un edificio de 15 departamentos, por eso normalmente nos quedamos sin agua, tenemos que estar pidiendo pipas cada cierto tiempo», denunció uno de los vecinos.
Para poder individualizar sus tomas de agua, el Sacmex les pide un estudio de factibilidad y después pagar un impuesto de 325 pesos por metro cuadrado de construcción. El predio tiene aproximadamente 700 metros cuadrados y son cinco niveles, si multiplicamos todo eso pagarían aproximadamente un millón de pesos.
El tema de escrituración de departamentos también se ha convertido en un problema para los inquilinos del edificio 1034. Al acudir a la Seduvi les informaron que entre los papeles que la constructora les dio les faltaba el sello y firma de la Alcaldía de «finalización de obra».
«Cuando hicimos la escrituración nunca se presentaron las personas que aparecen en las escrituras como vendedores, siempre fue algún empleado de Llave, después supimos que faltaba un documento que se llama ‘finalización de obra’, quisimos buscarlo en nuestra escritura porque supusimos que eso debía estar y para nuestra sorpresa fue que el documento está, pero es un formato en blanco que no tiene sellos ni firma de la Alcaldía», contó el señor Leonardo Fuentes, quien teme que esta irregularidad en sus escrituras le afecte en un futuro.
LAS DENUNCIAS ANTE PROFECO Y SEDUVI
Luego de estas anomalías en sus viviendas, los condóminos decidieron, cada uno por su cuenta, interponer denuncias ante la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) para que alertara sobre la inmobiliaria Llave y la constructora TuTierra.Mx, que siguen ofertando departamentos en sus páginas web y en el exterior del edificio aún se observa un letrero para adquirir el último departamento en el número 1034.
Los vecinos también denuncian extorsión por parte de las empresas, pues les piden el pago de seis meses de mantenimiento a cambio de que les instalen los medidores de luz. El supuesto adeudo, señalan, les llegó de manera sorpresiva y no es otra cosa que el salario de las personas de la inmobiliaria Llave que estuvieron laborando para tener listo el último departamento que falta por venderse.
«Otra situación que hemos estado sufriendo con la constructora es que cuando llegamos ellos tenían su personal trabajando, acondicionando los departamentos que les faltaban por vender. Después de unos meses que nos decían que no iban a poder poner vigilancia, ni servicios profesionales porque no estaban habitado el 80 por ciento el edificio, de sorpresa nos dijeron que debíamos seis meses de mantenimiento, pero no es otra cosa más que el sueldo de las personas que ellos tenían trabajando», contó uno de los vecinos. «En ese momento dijimos que no estábamos de acuerdo y no aceptamos pagar esas cantidades, desde entonces nos han estado amedrentando con llamadas telefónicas de que les debemos y que sino les pagamos no nos van a poner el medidor, ni siquiera el de áreas comunes».
En el marco de la investigación del «Cártel Inmobiliario» que sigue la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México y cuyo modus operandi implicaba que los servidores públicos de la Benito Juárez establecieron un sistema de intercambio de favores por medio de colusiones ilegales con constructoras y desarrollos inmobiliarios, los vecinos del inmueble 1034 acudieron a las mesas instaladas por el Gobierno capitalino y su caso está siendo revisado y en espera de una conclusión.
Entrevistado por SinEmbargo durante las mesas de atención y registro de las irregularidades inmobiliarias, Carlos Ulloa Pérez, Secretario de Desarrollo Urbano y Vivienda, informó que en la primer semana se han recibido al menos 100 casos de construcciones presuntamente irregulares.
«Queremos decirles que esto es una cloaca porque habíamos pensado inicialmente que eran solo pisos construidos fuera del uso de suelo permitido, pero también tenemos particularidades muy graves porque se están presentando casos de que hay contratos entre particulares que han sido defraudados y que tampoco pueden escriturar porque el contrato que hicieron no les permite llegar a una escrituración para poder tener la certeza jurídica de su propiedad y eso lo hicieron con desarrolladoras e inmobiliarias», mencionó el Secretario.
El titular de Seduvi destacó un caso emblemático que llegó a las mesas de atención y que es una unidad de 15 torres en donde construyeron pisos de más en los últimos niveles. «Son prácticas de compra-venta con constructoras y los vecinos han sido estafados».
La Seduvi, a nombre del Gobierno de la Ciudad de México, invitó a los vecinos que adquirieron una propiedad con una desarrolladora o constructora y que sospechen que hayan sido estafados, a acudir a las mesas de atención ubicadas en la planta baja del edificio de la dependencia, en calle San Lorenzo 712, colonia del Valle Centro, en la Alcaldía Benito Juárez; de lunes a viernes de 09:00 a 13:30 horas.
«Lo único que se les pide es acreditar que tienen la ocupación del inmueble y que hayan sido ellos quienes compraron», explicó Carlos Ulloa. «Han llegado vecinos que ya han hecho denuncias y que tampoco han tenido éxito, la idea de la Jefa de Gobierno es que los apoyemos para que ellos acrediten la propiedad que ellos pagaron de buena fe».
Además de las mesas de atención ciudadana, el Consejo Ciudadano de Seguridad y Procuración de Justicia de la Ciudad de México habilitó el número 55 55 33 55 33 que estará disponible las 24 horas del día para recibir denuncias.
