Por una "inadecuada planeación", la ampliación del Tren Suburbano del Valle de México al Aeropuerto Internacional "Felipe Ángeles" lleva un retraso de 120 días ante la falta de liberación total del derecho de vía, observó la Auditoría Superior de la Federación. Además, hay 64 millones de pesos de pagos en exceso por no documentar la existencia de material almacenado fuera del sitio de obras para evitar vandalismo de los ejidatarios y vecinos opositores en riesgo de desalojo.
Ciudad de México, 3 de julio (SinEmbargo).– Las obras de ampliación del Tren Suburbano hacia el Aeropuerto Internacional "Felipe Ángeles" llevan a la fecha un retraso de 120 días por la falta de liberación total de los derechos de vía en 52 mil metros cuadrados y la Secretaría de de Infraestructura, Comunicaciones y Transporte (SICT) autorizó "pagos en exceso" por 64.8 millones de pesos en durmientes y otros materiales de las vías, determinó la Auditoría Superior de la Federación (ASF) en el primer informe de fiscalización de la Cuenta Pública 2021.
Para facilitar la conectividad de los pasajeros provenientes de la Ciudad de México y de los municipios mexiquenses Tultitlán, Tultepec y Nextlalpan, que actualmente sólo pueden arribar en vehículo particular o Mexibús, el Gobierno federal y el concesionario Ferrocarriles Suburbanos invertirán 25 mil millones de pesos para la extensión de 23 kilómetros del Suburbano Lechería-Jaltocan-AIFA, con la meta de concluir en el segundo semestre del 2023.
"No se cuenta con la liberación total de los derechos de vía para el patio de maniobras, en una superficie de 52,329.07 m2, lo que ha provocado a la fecha atrasos de 120 días en la ejecución de los trabajos y esto evidencia una inadecuada planeación de la obra", planteó el órgano fiscalizador.
En relación con los trabajos de construcción del nuevo patio de operaciones ferroviarias de carga con conexión a las vías de ferrocarril de las Líneas “H” y “Ts”, se observó que la SICT "no tramitó ni obtuvo previamente al inicio de los trabajos, la liberación total de los derechos de vía".
Pero la Dirección Ejecutiva de Transporte Multimodal y Logística de la SICT informó a la ASF que se tenía liberado el 60 por ciento de la superficie total sobre la cual se ejecutarían los trabajos y, para el 40 por ciento de la superficie restante, inició desde septiembre de 2021 el trámite de la expropiación de inmuebles, ya que "los poseedores de los terrenos no acreditaron ser propietarios de los mismos".
Pero, hasta el cierre de la auditoría, no se comprobó que la liberación de derechos de vías haya concluido ni se informó cuándo se concluiría con dicho proceso de expropiación.
SinEmbargo informó previamente que el barrio Teyahualco, en Tultepec, Estado de México, es el único poblado donde están paradas las obras de la ampliación del Tren Suburbano por la oposición de sus habitantes a que sean desalojados de sus viviendas instaladas a menos de 15 metros del paso de las vías.
En los últimos meses, han sido convocados por una unidad de conciliación de la Fiscalía General de la República (FGR) para tratar el tema, pero aseguran no haber sido informados a detalle por la SICT sobre el destino de sus hogares.
A los vecinos de Teyahualco les preocupa la instalación de una valla alrededor del derecho de vía, ya que se cuestionan cómo pasarán de un lado al otro. En el barrio es tradición cargar el féretro en peregrinación hacia la iglesia y realizar mayordomías con recorridos o festividades con toritos con pirotecnia. Están acostumbrados a caminar entre las vías, piedras y durmientes, pero con la obra quedarán partidos e incomunicados.
“No nos estamos oponiendo porque creemos que es un beneficio para todos de alguna forma, pero estamos pidiendo apoyo u opciones a las instancias para evitar problemas a largo plazo, como daños viales y a domicilios”, aseguró Berenice, una de las habitantes.
A la par, a finales de mayo ejidatarios de San Miguel Xaltocan, del municipio de Nextlalpan, vecino al barrio de Teyahualco, se enfrentaron a golpes con elementos de la Policía Militar debido a que la escuela primaria de su comunidad fue tirada por trabajadores de la construcción para colocar una red de drenaje del AIFA. Los inconformes denunciaron que la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) está "apropiándose de terrenos" que no entraron en las negociaciones.
PAGOS EN EXCESO POR 64 MDP
El proyecto de ampliación de la Línea 1 del Tren Suburbano Lechería-Jaltocán-AIFA contó para el ejercicio fiscal 2021 con 401 millones 496 mil pesos para facilitar la conexión de las personas que viajen de la Zona Metropolitana del Valle de México al Aeropuerto Internacional. Hasta el momento, sólo se puede llegar en auto particular, taxi o Mexibús.
Sin embargo, observó la ASF, se autorizaron pagos en exceso por 64.8 millones de pesos en los conceptos de suministro de durmientes y otros materiales de vía como concreto, fijadores, placas, clavos, anclas y herrajes "debido a que éstos no fueron localizados en el sitio de los trabajos, aun cuando en las especificaciones particulares y los alcances de sus precios unitarios contemplan el suministro, el transporte, la descarga y su puesta en obra".
La SICT, encargada de la obra, aclaró al órgano fiscalizador que los durmientes de concreto se encuentran en los patios de un almacén de la contratista, los cuales están disponibles para su traslado al sitio de los trabajos, y que posteriormente será necesario realizar maniobras de carga y acarreo del material por cuenta de la empresa encargada de estos trabajos. Expuso que "es imposible" contar con la totalidad de los durmientes en obra, ya que no se tiene el espacio suficiente para el acopio de los mismos.
Adicionalmente, la Secretaría de Comunicaciones señaló que otros materiales se acopiaron en el almacén de la empresa contratista, decisión que se tomó "en consideración de que pudieran ser tomados como rehenes por los ejidatarios por temas de liberación de los derechos de vía, por robo o vandalismo".
Sin embargo, la Auditoría continuó con la observación de pago en exceso porque "no presentó la documentación que acredite su existencia [del material de vía]", además de que en las especificaciones particulares y en los análisis de los precios unitarios de los conceptos observados se consideró que dichos suministros "tienen que ser puestos en obra y almacenados en el sitio de los trabajos".
La obra ferroviaria contempla para su construcción cuatro estaciones intermedias, la estación terminal del aeropuerto, así como Centros de Transferencia Modal (CETRAM) en cada estación con los sistemas de señalización, control de trenes y telecomunicaciones; también considera la construcción de laderos y ampliación de talleres, reubicación de un patio de maniobras y 31.4 kilómetros de desplazamiento de vías de carga, ocho pasos superiores vehiculares, dos viaductos ferroviarios, un puente ferroviario nuevo de cuatro vías, la rehabilitación de un
puente ferroviario existente para vías de pasajeros y 16 puentes peatonales.