Con una fortuna de 17.4 miles de millones de dólares, calculada por el Índice de Millonarios de Bloomberg, Sara Mota de Larrea es la mujer más rica de México al ser la mayor accionista de Grupo México. No obstante, su vida personal es casi un misterio. No acostumbra lugares públicos, muy pocos la han visto y casi nadie retratado.
Ciudad de México, 5 de diciembre (SinEmbargo).– Al hablar de Grupo México todos identifican a su presidente, Germán Larrea Mota Velasco, pero quien posee el mayor número de acciones dentro del conglomerado es su madre, Sara Mota de Larrea, la mujer más rica de México con una fortuna de 17.4 miles de millones de dólares, según calcula el Índice de Millonarios de Bloomberg.
Además de ser la segunda persona más rica de México, a nivel mundial ocupa el lugar número 112, pero ha llegado a estar entre las 100. La mayor parte de su fortuna proviene de Grupo México, un conglomerado minero fundado por su difunto esposo, Jorge Larrea, conocido como «el rey del cobre». Ella controla su participación a través del holding Empresarios Industriales de México, que está registrada en Tucson, Arizona, y posee el 40.6 por ciento, según su informe anual de 2020 citado por Bloomberg.
A ella se le atribuye la propiedad total del activo de Grupo México, por encima de la participación que tiene su hijo Germán.
“En el ranking mundial, la riqueza de Sara Mota es mayor que la de su hijo Germán”, destacó el economista y politólogo Mario Alberto Campa Molina. “Su riqueza se debe a que en la pandemia el precio del cobre se disparó y aumentaron las acciones de Grupo México, cuya principal división es la minería”.
El economista y politólogo, quien ha seguido de cerca la riqueza de los millonarios mexicanos, destaca en uno de sus análisis cómo ha aumentado el patrimonio de cinco de los seis más ricos de México antes y durante la pandemia. Según sus cálculos, la fortuna de Sara Mota de Larrea es la que más se ha incrementado desde la pandemia, con un 61 por ciento.
A pesar de formar parte de las 500 personas más ricas del mundo y ser la segunda en México, la vida personal de Sara Mota de Larrea es poco conocida. No suele hacer más ruido del que ya se escucha, no acostumbra lugares públicos, no acude a eventos sociales, muy pocos la han visto y casi nadie retratado. La única fotografía que circula de ella en internet es de un evento de Grupo México.
«En el caso de la familia Larrea siempre han tenido un perfil bajo, no es como Carlos Slim, esto se puede deber a que su riqueza depende de cuestiones heredadas y no ha estado libre de controversias por las minas de Grupo México», consideró el economista Mario Campa.
Si bien Sara Mota y su familia se han caracterizado por estar lejos de los reflectores, Grupo México ha estado envuelta en acusaciones en el país y en el mundo por incumplir con sus compromisos para remediar los impactos ambientales, por tratar de explotar minas sin acuerdo de pobladores y por huelgas en sus proyectos de Zacatecas, Sonora y Coahuila.
No obstante, este cúmulo de señalamientos no han hecho mella en Grupo México, pues el conglomerado de la familia Larrea se ha beneficiado de concesiones y contratos con los gobiernos, en este sexenio, por ejemplo, ganó la licitación para construir el «Tramo 5 Sur» del Tren Maya, uno de los proyectos de infraestructura insignia del Presidente Andrés Manuel López Obrador.
México Compañía Constructora, una unidad de Grupo México, encabezó la propuesta ganadora con un costo de 17 mil 815 millones de pesos (unos 865 millones de dólares) para construir un tramo ferroviario que va desde las turísticas Playa del Carmen a Tulum.
Este 2021, mientras el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) reportó que los ingresos de los hogares mexicanos cayeron un 5.8 por ciento de 2018 a 2020 por la pandemia, el gigante minero reportó una utilidad neta de mil 97 millones de dólares en el primer trimestre, frente a una pérdida de 369 millones de dólares registrada en el mismo periodo de 2020.
Los ingresos de Grupo México sumaron 3 mil 435 millones de dólares, 40 por ciento más que los reportados entre enero y marzo del año pasado, destacó el informe del conglomerado enviado a la Bolsa Mexicana de Valores (BMV).
RIQUEZA GRACIAS AL GOBIERNO
La riqueza de Sara Mota de Larrea proviene en su mayoría de Grupo México, cuya división minera se expandió gracias a las concesiones otorgadas durante el sexenio de Carlos Salinas de Gortari a su esposo Jorge Larrea.
Grupo México ha recibido 333 concesiones de la Secretarías de Economía (SE), de Comunicaciones y Transportes (SCT), y de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) desde el sexenio de Salinas de Gortari al de Enrique Peña Nieto con vigencia hasta 2063, de acuerdo con una revisión al Portal de Transparencia del Instituto Nacional de Acceso a la Información (INAI).
«La forma en que se dejó crecer la concentración de la riqueza en el país en unas cuantas familias se origina en los excesos de privatización que se dieron en los periodos de Salinas y Zedillo. Se adquirieron empresas con créditos del sector público, como Nafinsa», dijo en entrevista Gerardo López Cervantes, doctor en economía por la Universidad Autónoma de Madrid al señalar a los Larrea como una de las familias beneficiadas.
Los negocios de los seis más ricos de México corresponden a sectores como telecomunicaciones y minería que fueron privatizados o están regulados por el Estado, lo que indica que “o han sido otorgados en condiciones muy benévolas o regulados de manera muy laxa”, consideró el subgobernador del Banco de México (Banxico) Gerardo Esquivel cuando presentó su estudio “Desigualdad extrema en México” (2015).
«Hay empresarios en donde su riqueza está basada en concesiones como el caso de las minas», destacó el economista Mario Campa.
ESCÁNDALOS PONEN EN LA MIRA A LOS LARREA
Se define como una empresa sustentable reconocida por la BMV, pero en la práctica Grupo México —el conglomerado de Sara Mota de Larrea— acumula un historial de tragedias e impunidad debido a la operación de sus concesiones, de acuerdo con denuncias de víctimas y el Proyecto sobre Organización, Desarrollo, Educación e Investigación (PODER), una organización regional que ha documentado las afectaciones de la empresa en los últimos años.
Los casos mediáticos que pesan sobre la empresa son los siguientes:
–Pasta de Conchos
El 19 de febrero de 2006 se registró una explosión en la mina 8 de la Unidad Pasta de Conchos, en Coahuila, en la que 65 de los 73 obreros que se encontraban trabajando en ese turno quedaron atrapados. En ese año se inició el rescate que se suspendió un año después y los cuerpos continúan sepultados.
La mina tenía reportes de fallas de seguridad desde el año 2000.
–Afectaciones en Río Bolaños
Una ruptura en la presa de jales de la mina de plata de Bolaños, propiedad de Grupo México desde 1993, provocó que se vertieran mercurio, plomo y arsénico en el Río Bolaños en Jalisco en 2010, lo que causó la muerte de peces y afectaciones a la vida de las poblaciones ribereñas.
–Río Sonora
El 6 de agosto de 2014, la mina Buenavista del Cobre —subsidiaria de Grupo México— derramó 40 mil metros cúbicos de ácido sulfúrico con 700 toneladas de metales pesados en los ríos Bacanuchi y Sonora, que afectaron a siete municipios: Ures, Baviácora, Aconchi, Huépac, Banámichi, San Felipe de Jesús y Arizpe.
Las afectaciones a las comunidades han sido tanto en salud como de agua limpia para consumo, recreación y producción agrícola y ganadera, acusaron los Comités de Cuenca Río Sonora a siete años del derrame.
El 13 de febrero de 2017, a sólo tres años del peor desastre ambiental minero en la historia del país, el Gobierno de Enrique Peña Nieto y la empresa cerraron unilateralmente el Fideicomiso Río Sonora sin cumplir el compromiso de construir 36 plantas potabilizadoras y una clínica de atención a la salud, por lo que los habitantes de los siete municipios afectados aún cargan con el costo de las enfermedades, los medicamentos y de los garrafones por las altas cantidades de arsénico y plomo en el agua, reconocidas por la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris).
–Muerte de mineros en San Luis
El 12 de febrero de 2016 cinco trabajadores fallecieron en la mina de carbón Charcas en San Luis Potosí y en octubre dentro de su mina La Caridad se volcó un carro-tanque que derramó 10 mil litros de ácido débil en Nacozari de García, Sonora.
–Derrame en Sombrerete
En mayo de 2019, agricultores y ganaderos del municipio de Sombrerete denunciaron al Gobierno del estado y a dirigentes sindicales de la Unidad Minera San Martín, que pertenece al Grupo México, por el derrame de desechos con cianuro y otros contaminantes en el río de la comunidad.
–Derrame en Mar de Cortés
El 9 de julio de 2019, una falla en las válvulas de las tuberías de Grupo México durante un proceso de trasvase en la Terminal Marítima de Guaymas, provocó el derrame de 3 mil litros de ácido sulfúrico en el Mar de Cortés, informaron autoridades portuarias.
Metalúrgica de Cobre de México, subsidiaria de Grupo México, informó que la fuga ocurrió alrededor de las 15:00 horas del martes y no ocasionó daños a personas.
