Mario Party Superstars cumple de manera perfecta con el propósito general del juego y la franquicia que es darnos un momento de diversión; gráficamente el juego luce bastante bien y lo verdaderamente destacable es el trabajo realizado en la recreación de los tableros clásicos del Nintendo 64.
Ciudad de México, 7 de noviembre (SinEmbargo).- Mario Party representa lo mejor y lo peor de los juegos de mesa llevados al mundo digital, una competencia constante entre amigos o conocidos que no parará hasta que llegue el último turno y se haya decidido quién es el ganador un juego donde existirá el enojo, controles descompuestos y más de una amistad terminada, pero es la esencia de lo que representa la saga y que ha dejado un legado a lo largo de los años, con nuevas entregas que mejoran y destacan de sus predecesores.
Mario Party Superstars no sólo mejora lo hecho con Super Mario Party para el Nintendo Switch, además ofrecer aún más diversión dentro del juego y ofrecernos nuevo contenido, con personajes, tableros y minijuegos, toma lo mejor de las épocas del Nintendo 64 recreando 5 tableros del juego original y añadiendo cientos de minijuegos de las diferentes entregas disponibles que hemos visto a lo largo de los últimos años. Básicamente, esta nueva entrega es la versión definitiva de la saga que no sólo cumple con su propósito principal, sino que deja la puerta abierta a tener más contenido, tal vez, tableros o más mininuegos de entregas pasadas.
El juego nos mostrará un escenario lleno de nostalgia desde el momento de aventurarnos en la nueva plaza, donde podremos observar pequeñas referencias al Nintendo 64 en la tienda de Toad, podremos adquirir contenido especial del juego como artes, stickers y demás. El verdadero viaje al pasado comienza en el tubo verde clásico, donde nos adentraremos al modo Mario Party, el modo clásico, de tableros y turnos nos espera. Además de esto, el juego nos ofrecerá la opción de acceder a la montaña de minijuegos, donde jugaremos de manera libre los diferentes minijuegos que tenemos disponibles, la casa de datos, donde podremos llevar un registro de los diferentes records que podremos ir batiendo en los diferentes minijuegos, los logros que hemos desbloqueado, una enciclopedia del juego y su evolución, así como nuestra tarjeta de jugador donde veremos cuantas victorias tenemos, cuantas monedas hemos ganado y cuantas horas hemos jugado, así como nuestros minijuegos favoritos y por último, la casa de amigos, donde podremos jugar contra quienes tengamos agregados y tengan el juego.
Gráficamente el juego luce bastante bien y lo verdaderamente destacable es el trabajo realizado en la recreación de los tableros clásicos del Nintendo 64, donde los efectos, animaciones y transiciones están a la altura de lo que representa el Nintendo Switch, sin quitar de lado que el trabajo realizado en esta nueva versión, no representa un salto significativo comparado con lo realizado con Super Mario Party. La isla troipal de Yoshi, Space Land, el pastel de cumpleaños de Peach, Woody Woowds y Horror Land, son los mapas clásicos de Mario Party, Mario Party 2 y Mario Party 3 que encontramos dentro del título. Otro cosa es que podremos escoger entre 10 personajes clásicos de Nintendo, esto tal vez el punto más débil del juego, ya que no existe contenido desbloqueable hablando específicamente de nuevos tableros o personajes a comparación de la entrega pasada donde teníamos 20 personajes, aunque únicamente con 4 tableros.
Otra de las mejoras que tiene esta nueva entrega radica en el control, ya que, por primera vez en mucho tiempo, no son necesario los controles de movimiento y podremos utilizar tanto Joy-Con como Pro Controller, dándonos más opciones de jugabilidad, aunque deberás tener mucho cuidado, ya que algunos juegos, vuelven a utilizar comandos del Nintendo 64, haciendo que los botones y las palancas d de los controles sufran en exceso. Tal vez, no es tan recomendable utilizar los Joy-Con del Nintendo Switch por su poca resistencia y tamaño, sin embargo, el Pro Controller cumple con esta función a la perfección.
Por último, la cantidad de minijuegos que nos ofrece el título, es la más grande de cualquier entrega con más de 100, cuando la entrega pasada, nos dio 80, regresando juegos clásicos de Mario Party 2, Mario Party 3, Mario Party 5, Mario Party 9 o el mismo Super Mario Party, donde veremos clásicos como el Hotel Goomba, Crazy Cutter, Bumber Balls o Face Lift del primer juego de la serie, entre muchos otros. Haciendo que no sólo sea una de las entregas más divertidas en la serie por recopilar básicamente los mejores de cada uno de los títulos que tiene disponibles, sino que nos da una gran variedad de cada uno de ellos y sin necesidad de forzarnos a utilizar controles de movimiento, manteniendo la experiencia clásica por completo.
Mario Party Superstars cumple de manera perfecta con el propósito general del juego y la franquicia que es darnos un momento de diversión, además de ofrecernos un viaje directamente al pasado lleno de nostalgia con tableros clásicos y minijuegos que más de una persona recordará de su infancia. Además, hay una gran área de oportunidad para seguir alimentando el juego con más contenido y que pueda convertirse en lo que llegó a ser Super Smash Bros. Ultimate con sus constantes actualizaciones de personajes a lo largo de los últimos 3 años.
