El país se encuentra "en un punto de inflexión" para dejar atrás un sistema que dependía de "mano de obra barata y poco cualificada" foránea, en favor de una economía con sueldos y cualificaciones altos, afirmó Johnson en declaraciones a la BBC durante el congreso anual del Partido Conservador en Manchester.
Por Judith Mora
Londres, 5 oct (EFE).- El Primer Ministro del Reino Unido, el conservador Boris Johnson, avisó este martes a las empresas de que deben adaptarse a la "realidad pos-Brexit" y esforzarse por atraer a mano de obra nacional en lugar de depender de extranjeros, aunque ello suponga un desabastecimiento a corto plazo.
Johnson sostuvo que no hay una crisis laboral como tal, ni de suministro -pese a la escasez de combustible en las gasolineras por falta de transportistas y de personal en sectores como el cárnico o la hostelería- sino que la economía británica está experimentando "la presión" que sufriría "un gigante que se levanta" tras el letargo por la pandemia.
"Si miramos la productividad del Reino Unido, hemos estado por debajo de nuestros mayores competidores durante más de dos décadas, y es porque tenemos un enfoque basado en salarios y costes bajos y las empresas "no invierten" en formación o servicios, argumentó.
El Primer Ministro puso de ejemplo el sector de los transportistas, del que dijo que, al no mejorar la paga ni invertir durante años en facilidades para su bienestar, se ha quedado "sin gente joven en el país que quiera convertirse en camioneros".
We’re getting on with the job of building back better from this pandemic: a stronger economy where everyone is empowered to reach their full potential.
Our Plan for Jobs is working, and we’re expanding with a £500m package to help people back into work.
#BuildBackBetter pic.twitter.com/6HAoYGI7dC— Boris Johnson (@BorisJohnson) October 4, 2021
"Esto va a cambiar y será positivo", apostilló.
EMPLEOS PARA BRITÁNICOS
Johnson indicó que el Gobierno ha recibido solamente 127 solicitudes de visados para transportistas, de 300 que ofertó con efecto inmediato para hacer frente al desabastecimiento sobre todo en las gasolineras, lo que, en su opinión, refleja "un problema de suministro global" de ese tipo de profesionales.
"Le dijimos al sector del transporte rodado: 'bien, dennos los nombres de los conductores que quieran traer (del extranjero) y les arreglaremos los visados, les daremos 5 mil visados. Y solamente han facilitado 127 nombres", explicó.
Un portavoz de la Asociación del transporte por carretera (RHA, en inglés) dijo que el hecho de que pocos extranjeros, sobre todo de la Unión Europea (UE), hayan tramitado un visado -que les permitiría trabajar aquí hasta marzo- demuestra que los permisos a corto plazo "no son atractivos" y adujo que deberían ser al menos "por 12 meses".
Johnson insistió en que quiere fomentar la contratación de trabajadores locales en lugar de traerlos de otros países, a fin de reajustar el mercado laboral, aunque puntualmente haya puesto 5 mil visados a disposición del sector del transporte y 5 mil 500 de la industria avícola.
"Lo que no podemos hacer es volver al viejo y fracasado modelo donde la principal línea de empleo es mano de obra poco cualificada con sueldos bajos, a menudo gente que trabaja muy duro, maravillosa y valiente, que vienen y trabajan en condiciones que son muy duras, y no deberíamos volver a eso", ha declarado.
El Daily Telegraph, periódico de referencia de los "tories", publica hoy que el Gobierno cree que la crisis actual de suministro de productos y fuerza laboral no resulta de una mala gestión estatal sino que se debe a que muchas empresas "embriagadas de mano de obra barata" no se prepararon para las consecuencias del Brexit o salida británica de la UE.
En cuanto al desabastecimiento en las gasolineras, que ha acaparado la atención informativa por las largas filas de conductores para repostar, el Gobierno insiste en que la situación se está "estabilizando" y prevé que pronto se equilibren la oferta y la demanda.