Después de una crisis donde llegaron miles de migrantes al cruce fronterizo de Del Rio, Texas, el paso internacional fue reabierto y se permitirá el tráfico de vehículos de pasajeros y personas entre ambos lados de la frontera.
Washington, 25 de septiembre (EFE).– El cruce fronterizo de Del Rio (Texas, EU) fue reabierto tras la crisis provocada por la concentración en ese lugar de más de 10 mil migrantes, la mayoría haitianos, quienes ya fueron desalojados, informó este sábado la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP, por sus siglas en inglés).
Ese punto de entrada desde México había permanecido cerrado desde el pasado 17 de agosto ante la gran cantidad de migrantes que trataban de acceder a Estados Unidos y habían colapsado el acceso.
A partir de las 16:00 hora local (21:00 GMT) de hoy las autoridades indicaron que volvería a permitir el tráfico de vehículos de pasajeros y personas entre ambos lados de la frontera, mientras que el de camiones de carga se retomará el lunes 27 de septiembre.
"Después de los esfuerzos para agilizar el procesamiento del flujo de migrantes a unos niveles manejables y con la seguridad pública restablecida, la CBP reabrió las operaciones de viaje y comercio", indicó en un comunicado.
La reapertura se produce después de que el Gobierno de Estados Unidos confirmase este viernes que ya no quedan migrantes, en su mayoría haitianos, en el campamento improvisado hace semanas bajo un puente de la frontera con México, que abrió un nuevo capítulo en la crisis migratoria que afronta el Presidente Joe Biden desde su llegada a la Casa Blanca.
En rueda de prensa, el secretario de Seguridad Nacional (DHS, por su sigla en inglés) de EU, Alejandro Mayorkas, informó que más de dos mil migrantes habían sido devueltos en avión a Haití, otros ocho mil decidieron volver "de manera voluntaria" a México y unos cinco mil están siendo procesados para determinar si son expulsados o afrontarán un proceso de deportación.
Los miles de migrantes que atravesaban a pie el Río Bravo con destino a Del Río se concentraron durante días debajo de un puente que conecta con Ciudad Acuña, en México, lo que provocó polémicas imágenes por parte de las autoridades tratando de contener el acceso a territorio estadounidense.
También el viernes, el Presidente de Estados Unidos, Joe Biden, asumía su responsabilidad en los casos "intolerables" de maltrato a migrantes en esa zona de la frontera con México y prometió que habrá "consecuencias" para quienes los cometieron.
En declaraciones a los periodistas, Biden reconoció que fue "horrible" ver las imágenes de agentes fronterizos persiguiendo desde sus caballos a migrantes o agrediéndoles con correas.