Como una manera de demostrar un poder abrumador, los narcomantas han sido utilizados por grupos criminales desde 2006. La aparición de la cabeza de cerdo, sin embargo, se produce en un momento en que miembros de la policía están siendo asesinados a un ritmo alarmante.
Por Tomás Michael
Ciudad de México, 5 de septiembre (InSight Crime).- Grupos criminales en México están publicando listas con nombres de policías que planean matar, y el mensaje a menudo viene con un símbolo macabro: una cabeza de cerdo cortada.
Entre enero y agosto de este año, al menos 17 cabezas han sido encontradas junto a narcomantas, banderas o pancartas dejadas en público por grupos criminales que típicamente amenazan a rivales, autoridades, funcionarios gubernamentales e incluso al público.
De acuerdo con una revisión de medios locales por InSight Crime, los mensajes hacen referencia a los agentes de policía, mostrando sus nombres, insignias o números de patrulla, e incluso sus fotografías. Muchas de estas pancartas se han centrado en acusaciones de que las unidades policiales apoyan a grupos rivales a cambio de sobornos.
A comienzos de agosto, en la Ciudad de México fueron detenidos dos individuos por dejar una narcomanta que amenazaba con asesinar a los empleados de una prisión de la capital. El mensaje iba dirigido a Hazael Ruiz Ortega, subsecretario del sistema penitenciario de Ciudad de México, y lo acusaba de brindar un trato preferente a miembros de carteles rivales en la prisión. Junto a la narcomanta, los agentes de policía hallaron la cabeza cercenada de un cerdo, un aditamento común de las amenazas de los carteles contra agentes de la policía.
Y en junio, el Cartel Jalisco Nueva Generación (CJNG) dejó una manta completa con restos de un cerdo, en la que acusaba a la policía de Guadalajara de proteger al Cartel de Sinaloa. Las pancartas enumeraban los nombres de los oficiales. La unidad, que había estado en un tiroteo con una célula del CJNG en abril, hizo que uno de sus oficiales fuera sacado de su casa por pistoleros y asesinado.
Pero también se ha amenazado de la misma forma a carteles rivales y políticos. Antes de esto, en julio, el CJNG usó una narcomanta, acompañada de una cabeza de cerdo para declarar el final de una tregua con varias facciones del Cartel de Tijuana en Baja Calfornia.
Y antes de las elecciones legislativas de junio en México, se vieron varias narcomantas con amenazas a candidatos políticos que según ellos cooperaban con los carteles o incluso para indicar a la gente por cuál partido votar.
ANÁLISIS
Como una manera de demostrar un poder abrumador, los narcomantas han sido utilizados por grupos criminales desde 2006. La aparición de la cabeza de cerdo, sin embargo, se produce en un momento en que miembros de la policía están siendo asesinados a un ritmo alarmante.
Según un estudio de INEGI, el organismo de estadísticas en México, 803 agentes de seguridad fueron asesinados en el país entre 2013 y 2018. En 2020, se registraron 524 agentes muertos, y tal parece que este año no bajará el saldo.
Según David Saucedo, periodista y analista de seguridad en México, las cabezas de cerdo se usan específicamente para acusar de corrupción a policías y otros funcionarios de gobierno.
En entrevista con InSight Crime, Saucedo explicó que el significado de la cabeza de cerdo cercenada se deriva de “polipuercos”, un término despectivo para referirse a los agentes de policía en las ciudades mexicanas. “Cuando se dejan junto a una narcomanta, indica que el aludido es corrupto o traicionero”, comentó Saucedo.
El CJNG parece el responsable de muchas de esas narcomantas en una campaña nacional en la que el grupo dejó 60 narcomantas por todo el país entre enero y julio.
El CJNG también ha estado involucrado en fuertes ataques contra la policía, por medio de asesinatos en emboscadas planeadas a miembros de unidades antidisturbios, quienes han sido atacados en sus hogares.
