El movimiento Black Lives Matter iniciado por la muerte de Floyd ganó mucho impulso con la ayuda de deportistas mundiales como LeBron James o el propio Hamilton, quienes tienen una gran capacidad para conectar con sus seguidores en las redes sociales. Millones de personas siguen cada día lo que postean estas estrellas.
MADRID, 25 de diciembre (EUROPA PRESS).– Grandes estrellas del deporte, desde LeBron James hasta Lewis Hamilton pasando por Neymar Junior, se han pronunciado y actuado como nunca antes lo habían hecho en contra del racismo y otras injusticias en el año 2020, al mismo tiempo que muchos deportistas ayudan a los afectados por la pandemia del coronavirus.
No fue sólo la COVID-19 la protagonista de un 2020 plagado de actos reivindicativos y en defensa de la igualdad. Desde la rodilla hincada en el suelo y el puño en alto, hasta el mensaje Black Lives Matter que invadió literalmente la NBA con diferentes iniciativas.
La muerte de George Floyd el 25 de mayo bajo custodia policial en los Estados Unidos e incidentes similares provocaron un alboroto sin precedentes en la comunidad deportiva. Lewis Hamilton y su equipo Mercedes de Fórmula 1 cambiaron el color plateado a negro, los partidos de la NBA y de la MLB se aplazaron tras otro altercado en agosto.
También la tenista Naomi Osaka amenazó con perder un partido, y recientemente el Paris Saint-Germain y Basaksehir iniciaron conjuntamente un choque de la Champions League con una rodilla en el suelo después de un incidente considerado racista que involucró a un árbitro del partido.
El movimiento Black Lives Matter iniciado por la muerte de Floyd ganó mucho impulso con la ayuda de deportistas mundiales como LeBron James o el propio Hamilton, quienes tienen una gran capacidad para conectar con sus seguidores en las redes sociales. Millones de personas siguen cada día lo que postean estas estrellas.
Y si bien las declaraciones políticas en el deporte alguna vez se consideraron ilegales o acarrearon suspensión para clubes y jugadores, en esta ocasión las entidades se han posicionado en contra del racismo de una forma clara y contundente. Es el caso del equipo de futbol americano de Washington, que finalmente ha descartado el nombre de "Redskins" y el equipo de béisbol de Cleveland planeando lo mismo con su "Indios".
El comisionado de la NFL Roger Goodell admitió que la liga se equivocó al no alentar activamente las protestas pacíficas contra la injusticia racial, que se hizo evidente en una protesta de rodillas en 2016 dirigida por el entonces capitán de los 49ers de San Francisco, Colin Kaepernick.
"Nosotros, la Liga Nacional de Futbol Americano, admitimos que nos equivocamos al no escuchar a los jugadores de la NFL antes, y alentamos a todos a hablar en una protesta pacífica", dijo Goodell. "Creemos que las vidas de los negros importan. Sin jugadores negros no habría Liga Nacional de Futbol", añadió.
Además, el ícono de la F1, Hamilton, logró convencer a su equipo Mercedes de que cambiara los trajes de carrera de plateado a negro, y la mayoría de los pilotos de F1 también se arrodillaron en las carreras una vez que la temporada comenzó tardíamente en julio, y los equipos y la propia F1 prometieron más diversidad.
"Queremos construir un legado que vaya más allá del deporte", dijo en ese momento Hamilton, el primer piloto negro en el deporte. "Si podemos ser líderes y podemos comenzar a construir más diversidad dentro de nuestro propio negocio, enviaremos un mensaje tan fuerte y les dará a otros la confianza para comenzar un diálogo sobre cómo pueden implementar el cambio", espetó.
A las protestas de Hamilton también se unieron otros como el ex tenista alemán Boris Becker, quien en diciembre llamó a las protestas "los eventos más importantes en 2020". "Estoy afectado porque mi familia está afectada. No creo que en nuestra sociedad blanca tengamos la menor idea de lo que significa ser juzgado, condenado y atacado porque uno se ve negro o blanco desde afuera", dijo Becker.
Por otro lado, el mundo del futbol también se pronunció al condenar el racismo y los jugadores de la Premier League se arrodillaron en los partidos, al igual que en otras ligas como la Bundesliga. "Lo veo como un gran paso para que la Premier League permita que algo así suceda. Demuestra que vamos en la dirección correcta", dijo Raheem Sterling del Manchester City.
En este sentido, tanto la FIFA como la UEFA, así como las federaciones nacionales, respaldaron estos gestos subrayando más que nunca el eslogan de la UEFA: "No al racismo", el cual ganó protagonismo recientemente después de que el PSG y el Basaksehir abandonaran el campo tras el comentario racista del cuarto árbitro.
Kylian Mbappé dijo estar "orgulloso" de no jugar el partido por este motivo. "Se ha dicho mucho, pero en realidad no hay nada mejor que las acciones. No queremos volver a pasar por esto nunca más", agregó el internacional francés, de igual forma que su compañero Neymar Junior, que también condenó "toda acción racista".
Pero no sólo fue el año contra el racismo, sino que muchos deportistas también intentaron ayudar de diversas formas a los afectados por el coronavirus. A la iniciativa en España de Rafa Nadal y Pau Gasol, junto a la Cruz Roja, hubo otras grandes donaciones como la del suizo Roger Federer, la campeona mundial de salto de longitud alemana Malaika Mihambo, y los jugadores del Bayern Munich Leon Goretzka y Joshua Kimmich recaudaron millones a través de su organización benéfica We Kick Corona, entre otros deportistas.
Sin embargo, el mayor impacto provino de Marcus Rashford, jugador del Manchester United, cuyos esfuerzos para apoyar a los niños desfavorecidos obligaron al gobierno británico a cambiar su decisión respecto para una ayuda de 400 millones de libras para los niños más necesitados. "Estoy abrumado por el orgullo de que hayamos logrado un progreso tan significativo. 'No' no nos rendiremos con nuestros hijos, 'no' no nos rendiremos con el futuro de este país", dijo Rashford.