La aparición de una variante de coronavirus en Gran Bretaña ha provocado preocupación en todo el mundo ante la noticia de que es más contagiosa; por su parte, la farmacéutica BioNTech tiene confianza en que su vacuna será eficiente con ambas cepas.
Berlín, Alemania, 22 de diciembre (AP).- La farmacéutica alemana BioNTech tiene confianza en que su vacuna contra el coronavirus funcionará contra la nueva variante detectada en Gran Bretaña, aunque hacen falta más estudios para estar completamente seguros, indicó el martes su director general.
La variante, detectada principalmente en Londres y el sureste de Inglaterra en las últimas semanas, ha creado preocupación en todo el mundo por los indicios de que podría expandirse con más facilidad. Aunque no hay indicios de que cause una enfermedad más grave, muchos países dentro y fuera de Europa han restringido la llegada de pasajeros desde Gran Bretaña como precaución.
“En este momento no sabemos si nuestra vacuna también puede proporcionar protección contra esta nueva variante”, dijo Ugur Sahin en una conferencia de prensa al día siguiente de que se autorizara el uso de la vacuna en la Unión Europea. “Pero a nivel científico, es muy probable que la respuesta inmune de esta vacuna también pueda lidiar con las nuevas variantes del virus”.
Sahin señaló que las proteínas de la variante británica coinciden en un 99 por ciento con las versiones más extendidas del virus, y por lo tanto BioNTech tiene “confianza científica” en que su vacuna será efectiva.
“Pero sólo lo sabremos si se hace el experimento y necesitaremos unas dos semanas a partir de ahora para conseguir los datos”, dijo. “Las probabilidades de que nuestra vacuna funcione (...) son relativamente altas".
Si hubiera que ajustar la vacuna para la nueva variante, la compañía podría hacerlo en unas seis semanas, dijo Sahin, aunque las autoridades reguladoras podrían tener que autorizar los cambios antes de utilizar el fármaco modificado.
La vacuna de BioNTech, desarrollada junto con la farmacéutica estadounidense Pfizer, está autorizada par su uso en más de 45 países, incluidos Gran Bretaña, Estados Unidos y los miembros de la UE.