Los especialistas aseguraron que crisis como los desastres naturales o ataques terroristas detonan insomnio a corto plazo. Sin embargo, el impacto global y el carácter prolongado de la pandemia amenazan con expandir la tasa de insomnio crónico, el cual es mucho más difícil de tratar.
México, 18 de noviembre (EFE).- Al menos un 60 por ciento de los mexicanos han visto afectado su sueño debido al estrés, la ansiedad y la depresión que ha generado la pandemia por coronavirus, que en el país ya rebasa el millón de contagios y se acerca a las 100 mil muertes, según estimaron este miércoles expertos.
"Los mexicanos hemos incrementado la incidencia de los trastornos del sueño", indicó en una conferencia de prensa Guadalupe Terán, presidenta de la Sociedad Mexicana para la Investigación y Medicina del Sueño.
La especialista explicó que, incluso antes de la llegada del coronavirus, la falta de sueño era una crisis de salud pública latente asociada con un conjunto de dolencias.
Alrededor del 10 por ciento al 15 por ciento de la población mundial venía sufriendo de insomnio crónico, es decir, la dificultad para dormirse o mantenerse dormido al menos tres noches por semana por un espacio de tres meses o más.
Y es que los médicos e investigadores están viendo señales de que la pandemia también está causando un daño profundo al sueño de las personas.
Estos trastornos, de acuerdo con los especialistas, podrían tener ramificaciones profundas en la salud pública, generando una nueva población masiva de insomnes crónicos que deberán lidiar con una disminución de productividad y paciencia, y mayores riesgos de hipertensión, depresión y diabetes.
"Con el insomnio, una persona que no duerme bien está expuesta a presentar riesgos cardiovasculares, metabólicos y emocionales", destacó Alejandro Jiménez Genchi, maestro en Psiquiatría y presidente de la Academia Mexicana de Medicina del Dormir.
Explicó que las personas que duermen menos de 6 horas al día tienen hasta 66 por ciento riesgo de desarrollar hipertensión arterial, 48 por ciento de presentar enfermedad coronaria, son 15 por ciento más propensas a tener una enfermedad vascular cerebral y 180 por ciento más posibilidades de tener diabetes mellitus.
Además de que tienen entre 10 por ciento y 15 por ciento mayor riesgo de mortalidad que quienes duermen correctamente.
ALGUNAS CAUSAS DEL INSOMNIO
Los especialistas aseguraron que crisis como los desastres naturales o ataques terroristas detonan insomnio a corto plazo.
Sin embargo, el impacto global y el carácter prolongado de la pandemia amenazan con expandir la tasa de insomnio crónico, el cual es mucho más difícil de tratar.
Principalmente, el problema se ha visto en los trabajadores de la salud que están tratando la pandemia en primera línea de atención.
Los expertos alertaron que debido a la pandemia y la falta de sueño se ha visto un aumento en el consumo de sustancias de abuso, como el alcohol o el tabaco.
María Elena Sañudo, directora médica de Sanofi General Medicines México, dijo que existen medicamentos que ayudan a tratar estos problemas, aunque solo el 5 por ciento de las personas que padecen insomnio acuden para atender esta enfermedad.
Señaló que en momentos como la pandemia, dormir bien es fundamental, especialmente porque el sueño ayuda a que se produzcan anticuerpos y se incrementa la actividad de las células de defensa del cuerpo, además de que se reduce el incremento de circulación de sustancias proinflamatorias.