La actriz oaxaqueña comentó que muchas veces por levantar la voz contra el racismo y querer que las cosas cambien positivamente, las personas llegan a clasificarla como una persona resentida.
México, 11 de junio (EFE).- La actriz mexicana Yalitza Aparicio, junto con su colega Tenoch Huerta y otras dos especialistas, lanzaron este jueves un "ya basta" contra el racismo y el clasismo en el país y en el séptimo arte, un encendido debate que se ha reabierto en México en las últimas semanas.
La muerte de George Floyd en Estados Unidos ha sido el detonante para que tanto Aparicio como Huerta hayan regresado el tema a la mesa de las discusiones en México, donde, según dijeron en un simposio, ese tema se trata de ocultar aunque siempre ha estado presente.
"Por muchos años nos hemos quedado callados y hemos estado esperando que lleguen oportunidades y que las personas se den cuenta que aquí estamos, así que es momento de hablar, de alzar la voz y de decir ya basta, yo también puedo", dijo Aparicio durante su participación.
Señaló que muchas veces por alzar la voz, muchas personas nos pueden calificar de ser personas resentidas, pero no es por querer el lugar de alguien o lo que otros tienen que lo debemos hacer "sino por querer que las cosas cambien".
La actriz aceptó que si a ella le toca "el trabajo duro y decir ya basta y que los que vienen atrás disfruten, está bien, porque vamos a ser el cambio, los que levantaron la voz y no se quedaron callados".
Hace dos semanas, Aparicio reflexionó sobre la importancia del arte y la diversidad, así como problemáticas sociales tales como el clasismo y racismo en su debut como columnista del diario estadounidense The New York Times.
La mujer, revelación de la película Roma (2018), participó este jueves en el conversatorio "Una plática sobre racismo y discriminación en México", promovida por la revista GQ donde junto con sus colegas y la socióloga Mónica Moreno y la lingüista Yásnaya Aguilar, quienes reflexionaron sobre esas problemáticas.
TEMAS DEBAJO DE LA ALFOMBRA
En su intervención, Huerta dijo que en México existe un racismo y un clasismo que "está debajo de la alfombra en este país y son nuestros cadáveres en el armario".
Para el actor esos temas tabú en este país "no nos atrevemos a decirlos, a articularlo porque eso nos desmontaría muchos de nuestros mitos fundacionales como la idea del mestizaje y de la raza de bronce se verían terriblemente afectadas si aceptamos que hay clasismo y hay racismo".
Además dijo que para muchas personas es difícil aceptar que somos racistas y clasistas, y que "no somos solo víctimas sino victimarios los que hemos soltado frases y conductas de este tipo"
"Pero nadie quiere ser el malo de la película", puntualizó.
Huerta dijo que la gente en México ve el racismo en Estados Unidos, como ahora con el caso de George Floyd, pero piensa que en México no existen esas conductas cuando no es así".
"Es un tema muy complicado que la gente no le quiere entrar, pero vivimos el momento exacto para hacerlo, ya esperamos 500 años para hablar de esto y es ahora y es aquí", dijo el actor, quien participó en la serie Narcos: México (2018)
RACISMO, UN SISTEMA DE ORGANIZACIÓN
Para la profesora en sociología en la Universidad de Cambridge Mónica Moreno el racismo se pueden entender como un sistema de organización en nuestra sociedad que distribuye poder, privilegios, oportunidades y la buena vida y decide quien tiene accesos y quien no y a qué cosas".
"Cuando hablamos de racismo sólo estamos hablando de prejuicios que es importante, pero eso es sólo es sólo un nivel; de lo que hablamos es de una forma organización que cruza todos los aspectos de nuestra vida", apuntó.
Por su parte, la lingüista, escritora e investigadora Yásnaya Aguilar, dijo que en este país es difícil conciliar la diversidad de culturas, como las indígenas, y la idea de México.
"La idea es México surge para homogeneizar y crear una sola identidad y esto se hace extrayendo elementos culturales de pueblos a los que se oprime sistemáticamente", apuntó.
Aguilar comentó que a partir de eso se crea lo indígena como una categoría racial y no política por lo que se debe poner el mestizaje a examen.
Pero, agregó, también "el nacionalismo y el racismo van de la mano, porque toda corriente nacionalista es homogeneizante y creer una sola cosa es negar a los pueblos que preceden de este estado".