La actriz compartió su primer escrito en The New York Times, donde expresó la importancia de la diversidad, las problemáticas sociales y el racismo que sufrió después de que fue nominada en la categoría de Mejor Actriz en los Premios Óscar, por la cinta Roma, pues fue a partir de entonces que recibió comentarios positivos y negativos, y eso es lo que plasma en su columna.
México, 25 de mayo (EFE).- La actriz mexicana Yalitza Aparicio reflexionó sobre la importancia del arte y la diversidad, así como problemáticas sociales tales como el clasismo y racismo en su debut como columnista del diario estadounidense The New York Times.
"Muchas personas no entendían por qué estaba nominada y hacían referencia a mi origen. Una mujer indígena, algunos dijeron, no era una representante digna del país", escribe Aparicio con respecto a su participación en la película Roma (2018) en la columna que fue publicada este lunes en su versión en español y el pasado sábado en inglés.
Fue a partir de dicha producción cinematográfica que la actriz y defensora de derechos humanos tuvo que enfrentarse a comentarios tanto positivos como negativos en redes sociales y el medio del espectáculo, situación que plasma en el escrito y que considera como una muestra del clasicismo y el racismo que existe en la sociedad mexicana.
En el ensayo, Aparicio también sostiene que el arte tiene un poder transformador en la sociedad, y que gracias a la película de Alfonso Cuarón fue que se pudo generar una discusión en torno a diferentes problemáticas que aquejan al país, que de la pantalla alcanzó el plano legal, logrando que el Gobierno se comprometiera a brindar ciertos beneficios a las trabajadoras domésticas.
"El 14 de mayo de 2019, unos meses después de la ceremonia de los Óscar, el Congreso mexicano aprobó por unanimidad otorgarles a los dos millones de trabajadoras y trabajadores del hogar un seguro social, así como un contrato laboral con prestaciones de la ley tales como vacaciones, aguinaldo y días de descanso", narra la actriz.
Además, Aparicio expresó el cambio que vivió en el ámbito personal al haber participado en una película de talla internacional. "Me mostró el principio de un camino que apenas se formaba: la lucha constante por transformar mi entorno", escribió.
Al final del texto la actriz alienta a las personas a no sentirse derrotadas si es que no se encuentran representados en los medios y hace un llamado a exigir que exista esa diversidad en ellos. "Debemos pedir más representación y evitar la simplificación de nuestras culturas o de nuestras preocupaciones", señaló.
Aparicio interpretó a una empleada de hogar indígena en Roma, la película que se llevó en 2019 los Óscar a Mejor Dirección, Mejor Película Extranjera y Mejor Fotografía.
Aunque la oaxaqueña no se hizo con la estatuilla, fue la segunda artista mexicana en obtener la nominación al Óscar como mejor actriz (tras Salma Hayek) y, desde que la película vio la luz, Aparicio ha sido aclamada en todas las alfombras rojas.
Procedente de una familia humilde del sureño estado mexicano de Oaxaca y sin formación artística, Aparicio se presentó al casting para protagonizar el filme de Cuarón, fue seleccionada y recibió múltiples alabanzas por su interpretación.
Además, ha protagonizado la portada de numerosas revistas de moda y se ha convertido en la primera mujer de ascendencia indígena en aparecer en la primera página de Vogue.
También ha participado en ponencias y eventos sobre feminismo y defensa de los pueblos indígenas, y fue nombrada embajadora de Buena Voluntad de la Unesco en 2019.