Hay diversos factores que hacen que dichas producciones tengan éxito o fracasen rotundamente. Ya sea la poca química entre los personajes, la vigencia del tema o que el público se resista a dejar ir una versión conocida que apreciaron.
Por Mónica Rubalcava
México, 17 de abril (EFE).– La historia de la televisión mexicana se ha construido a base de éxitos y fracasos, y a veces en la búsqueda de repetir los aciertos, las producciones se convierten en grandes errores o triunfan de forma inesperada.
Los casos más comunes son las telenovelas, uno de los géneros televisivos más populares entre el público mexicano y que ha traspasado fronteras en el mundo.
Hay diversos factores que hacen que dichas producciones tengan éxito o fracasen rotundamente. Ya sea la poca química entre los personajes, la vigencia del tema o que el público se resista a dejar ir una versión conocida que apreciaron.
Sin embargo, los nuevos intentos tienen la misma posibilidad de superar el éxito de los anteriores como de correr con la mínima suerte y, en el peor de los casos, perder el horario estelar y pasar al olvido.
UN CORAZÓN MUY SALVAJE
En 1993, Edith González y Eduardo Palomo enamoraron al mundo con la telenovela Corazón salvaje. Aunque la historia había sido contada dos veces antes en los años 60 y 70 respectivamente, el éxito que trajo la versión de González y Palomo no lo habían experimentado nunca.
Sin embargo, hubo un cuarto intento para sacarle provecho a la popular historia de amor de Juan del Diablo y la Condesa Mónica, protagonizado por Eduardo Yáñez y Aracely Arámbula, que fue todo un fracaso.
Las fuertes críticas en México no se hicieron esperar y durante su transmisión en Estados Unidos el índice de audiencia fue tan bajo que pronto se despidió del horario estelar con el que había comenzado.
EL ÉXITO IRREPETIBLE DE REBELDE
Desde Rebelde, pocas han sido las producciones juveniles que han tenido éxito en la pantalla. A pesar de que la serie protagonizada por Anahí, Dulce María y Maite Perroni no era original, pues estaba basada en Rebelde Way de Argentina, la telenovela mexicana se convirtió en un fenómeno mundial.
Es por eso que más de 10 años después, el productor de Rebelde, Pedro Damián, presentó Like, la leyenda, una historia similar a la versión transmitida en el 2004 que no corrió con la misma suerte, pues no logró conectar con los jóvenes y también fue cambiada de horario.
REMAKES SIN ÉXITO
La historia protagonizada por Pablo Lyle y Michelle Renaud, La sombra del pasado (2014), ha sido uno de los desaciertos más grandes, pues la intención de rehacer El manantial (2001) trajo consigo grandes comparaciones entre Lyle y Renaud con Adela Noriega y Mauricio Islas, haciéndole honor al título de la versión de 2014.
Otro de los casos más recientes fue la versión renovada de la popular telenovela de los años 80 Cuna de lobos, la cual forma parte de un proyecto de Televisa con el que buscaban rehacer los grandes éxitos de la pantalla pequeña -como La Usurpadora (1998) o Rubí (2004)- con una visión más fresca y en formato de serie de televisión para atraer al público joven.
En la versión del 2019 de Cuna de lobos, ni siquiera con una estrella internacional como Paz Vega como la famosa villana Catalina Creel al frente, pudieron subir el índice de audiencia.
Ello se debió a que los cambios en la historia tan querida por el público mexicano hicieron que poco a poco la audiencia, que había comenzado con números altos, bajara y no tuviera el resultado esperado.
Finalmente uno de los casos más polémicos es el de La fea más bella (2006), protagonizada por Angélica Vale y Jaime Camil, pues aunque tuvo éxito entre el público, la versión mexicana de Yo soy Betty la fea fue ampliamente criticada por la forma en la que habían caricaturizado a la protagonista.