El estrés afecta al bienestar tu gato, además de que podría derivar en enfermedades peligrosas como la cistitis idiopática felina.
Madrid, 15 de abril (ElDiario.es).- Mientras el coronavirus sigue presente, y esperamos a que pronto se le ponga freno, millones de personas en España (y alrededor del mundo) se han visto forzadas a quedarse casa y así parar los contagios. Un cambio de vida brutal para todos; también para tu gato, que de pronto tiene que adaptarse a este confinamiento y a convivir con toda la familia en casa las 24 horas del día.
No todos lo llevan igual. Cada felino tiene su propia personalidad y un bagaje de experiencias previas que, de forma indudable, influye en cómo está afrontando la presencia constante de sus queridos humanos. Aunque todos (o casi todos) están encantados. Lo ha demostrado la ciencia: su fama de ariscos es falsa, y los gatos prefieren interactuar con sus humanos antes que comer, según concluye un estudio publicado en 2017 en Behavioural Processes. Y no hay peludo al que no le guste comer.
Aun así, los cambios de rutina pueden desconcertarlos. Y muchos mininos se sentirán abrumados con toda la actividad que de pronto se concentra a su alrededor, sobre todo si están acostumbrados a pasar mucho tiempo solos. Escuelas infantiles en casa, teletrabajo, videollamadas, los aplausos diarios en apoyo a la sanidad de las ocho de la tarde, etc.
"En esta situación, es posible que tu gato sufra estrés al ver alterada su rutina, su previsibilidad, así como su capacidad de control sobre el entorno", recuerda el Grupo de especialidad de etología clínica de la Asociación española de veterinarios de pequeños animales, Avepa. Y el estrés afecta al bienestar de tu compi gatuno, además de que podría derivar en enfermedades peligrosas como la cistitis idiopática felina. Por eso es muy importante respetar su naturaleza siempre,ahora más que nunca. Y ponérselo fácil a tu amigo de ronroneos.
GATOS: TU CASA, SU TERRITORIO
Ya lo sabes: tu gato es una especie muy territorial, que depende de su espacio físico para sentirse seguro, tu (su) casa lo es todo para él. Con toda la familia presente, a tu minino le harán falta sitios seguros donde poder esconderse, retirarse cuando necesite privacidad y alejarse del ruido. Resérvale un espacio privado donde pueda sentirse seguro y tranquilo; si puedes, una habitación donde tu minino encuentre todas aquellas cosas que tanto le gustan.
Nos referimos a sus juguetes, rascadores, una gaticama, etc. Además, necesita tener acceso fácil a sus areneros y otros recursos, comida y agua. Puedes crear más refugios gatunos: hazle espacio debajo de una cama, dentro de un armario, por ejemplo, en la cesta de la ropa o detrás del sofá. Usa una caja de cartón (a los gatos les encanta) y unas mantitas para que esté cómodo. Mejor aún: deja a su alcance alguna de tus prendas más mullidas. Tu olor proporciona seguridad a tu minino.
Importante: no molestes a tu gatete cuando use su espacio privado. Y no olvides recordárselo a los más pequeños de la casa.
Los gatos necesitan trepar. Subir a sitios les proporciona un extra de ejercicio físico, además de la seguridad de poder explorar desde lo alto todo su territorio, su casa; y sin ser molestados. Las torres rascador con módulos son geniales porque disponen de plataformas altas y otros espacios semicerrados donde los gatuchos pueden dormitar.
Pero hay otras ideas para fabricar refugios gatunos altos durante el confinamiento:
Despeja algunas baldas o estanterías de la pared, y coloca en ellas una cama gatuna o unas mantitas. Recuerda cubrirlas con algún material no deslizante, como un trozo de alfombra rugosa.
Hazle espacio en una librería o en un mueble de pared. Recuerda: cualquier refugio en altura debe resultar de fácil acceso para tu minino. No te olvides de colocar algún mueble cerca, como una silla o cesta alta, para que pueda subir y bajar con facilidad. Más aún si son mayores.
Los gatos necesitan varias camas, y les gusta poder escoger dónde echarse la siesta. No olvides dejarles sitio en tu cama, algunas sillas mullidas o un hueco en su sillón favorito.
Si tienes dudas concretas o tu gato sufre estrés contacta con un experto o experta en comportamiento felino acreditada que podrá ayudarte mientras dure el estado de alarma con una consulta en vídeo o telefónica.
TIEMPO DE CALIDAD CON TU AMIGO
Deja que tu gatete controle la intensidad y los tiempos de interacción con su familia humana, y que sea quien inicie la mayoría de los contactos. Este miaundamiento tan sencillo logrará que tu amigo ronroneante se sienta más seguro y feliz en casa. Y resérvale tiempo para jugar con su humano preferido.
NIÑOS Y GATOS
Los etólogos de Avepa hacen especial hincapié en la relación entre niños y gatos durante el confinamiento. "Los gatos no son juguetes, y los niños tienen que respetar su independencia; hay que enseñarles a entender su lenguaje corporal y a respetarlo", advierten. Por eso es tan importante dejarlos lo más tranquilos posible, debido al ajetreo que ya de por sí va a darse en la casa.
Así, debemos supervisar sus interacciones en todo momento y facilitar al gatete un espacio privado donde nadie, tampoco los niños, puedan molestarle. En definitiva: tu camarada peludo está feliz de teneros en casa. Pero, como todos, necesita su espacio y sus tiempos.