Al igual que cualquier otra actividad en línea, la transmisión consume bastante energía. Para ver una película de una plataforma de streaming, los datos deben viajar a través de una red de cables, centros de datos, etc.. Para generar esa energía eléctrica, un subproducto de la quema de combustibles fósiles como el carbón y el petróleo puede generar una gran cantidad de dióxido de carbono.
Ciudad de México, 19 de marzo (RT).– La disminución de la actividad económica debido a las restricciones que impone la lucha contra el coronavirus podría traducirse en una fuerte caída en las emisiones de carbono a corto plazo. Sin embargo, el comparador energético SaveonEnergy sostiene que actividades como el visionado de películas en plataformas de streaming, que se están disparando estos días debido a las cuarentenas impuestas en distintos países, también pueden dañar el medio ambiente.
Al igual que cualquier otra actividad en línea, la transmisión consume bastante energía. Para ver una película de una plataforma de streaming, los datos deben viajar a través de una red de cables, centros de datos, etc.. Para generar esa energía eléctrica, un subproducto de la quema de combustibles fósiles como el carbón y el petróleo puede generar una gran cantidad de dióxido de carbono.
Especialistas de SaveonEnergy usaron datos oficiales sobre la cantidad de visionados de distintas películas y series de Netflix entre octubre de 2018 y septiembre de 2019 para mostrar el impacto de la plataforma de streaming en el medio ambiente, comparando para ello los resultados con el equivalente de millas conducidas por un coche y la cantidad de emisión de CO2. El informe destaca que la transmisión de un video en la plataforma durante 30 minutos emite, aproximadamente, 200 gramos de CO2, lo que es equivalente a conducir aproximadamente media milla (800 metros).
Según el informe, la energía generada a partir de 80 millones de visionados de la exitosa película de Netflix Birdbox equivale a la conducción de más de 146 millones de millas (234 millones de kilómetros) y a la emisión de más de 66 millones de kg de CO2. Estas cifras equivalen a ir y venir en coche entre Londres a Estambul 38.879 veces.
Por su parte, los 64 millones de visualizaciones de la tercera temporada de la serie Stranger Things equivalen a 420 millones de millas (675 millones de kilómetros) y a 189 millones de kg de dióxido de carbono en este periodo de tiempo.
Asimismo, los 44 millones de visionados de la tercera temporada de la popular serie española La casa de papel, supuso un gasto energético similar a lo que supondría recorrer 245 millones de millas (394 millones de kilómetros), con la consiguiente emisión de 110 millones de kg de CO2.