El marroquí cumplía una condena de dos años de cárcel por su implicación en un tiroteo en 2015, en el que una persona resultó herida. La Policía belga lo arrestó en 2017 después de registrar su coche y encontrar 25 mil pastillas de éxtasis.
Bélgica, 25 de enero (RT).- Oualid Sekkaki, un recluso marroquí que se fugó de la cárcel de Turnhout en Bélgica, envió una postal a la prisión desde Tailandia.
"La carta iba dirigida a los tres directores. En el sobre estaba su chapa de prisionero y una postal con '¡Saludos desde Tailandia!'", informan los medios locales con referencia a un guardia.
Todavía no está claro si la carta en realidad fue enviada desde Tailandia o si se trata de una estrategia para desviar la atención de la Policía.
El pasado 19 de diciembre, un grupo de cinco hombres, incluido a Sekkaki, se fugaron de la cárcel de Turnhout.
Los presos treparon un muro exterior de seis metros de altura y se subieron a un coche que los esperaba en una calle cercana. Tres de los fugitivos fueron detenidos al día siguiente y el cuarto hombre fue capturado a principios de enero en los Países Bajos. Sin embargo, la Policía todavía no ha podido encontrar a Sekkaki.
El marroquí cumplía una condena de dos años de cárcel por su implicación en un tiroteo en 2015, en el que una persona resultó herida. La Policía belga lo arrestó en 2017 después de registrar su coche y encontrar 25 mil pastillas de éxtasis.
Además de las ansias de libertad, el fugitivo marroquí tuvo una motivación adicional para escaparse de la cárcel: Sekkaki podría ser extraditado a su país natal, donde le buscan por participar en una red de narcotráfico junto con su hermano Ashraf Sekkaki, quien está cumpliendo una condena de 12 años en Marruecos.