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Después de una vida especialmente compleja, Jesse intenta huir de sus demonios personales y dejar atrás toda su experiencia como cocinero de metanfetamina. Algo que, finalmente, consigue en el desenlace de El Camino, asumiendo una nueva identidad gracias a Ed, el mismo personaje que ayudó a Walter White a desaparecer durante el tramo final de Breaking Bad.
Madrid, 16 de octubre (EuropaPress).– Seis años después del final de Breaking Bad, El Camino ha llegado para dar respuesta a algunas de las incógnitas de los fans de la serie. ¿Qué ocurre con Jesse Pinkman? ¿Está realmente muerto Walter White?
La película escrita y dirigida por Vince Gilligan trae de vuelta al personaje de Aaron Paul, que, en el desenlace de la ficción, consiguió huir del grupo de neonazis que le tenían secuestrado gracias a la ayuda de Heisenberg. Y, precisamente, El Camino comienza después del final de Breaking Bad, para narrar lo que ocurre finalmente con Jesse Pinkman.
Después de una vida especialmente compleja, Jesse intenta huir de sus demonios personales y dejar atrás toda su experiencia como cocinero de metanfetamina. Algo que, finalmente, consigue en el desenlace de El Camino, asumiendo una nueva identidad gracias a Ed, el mismo personaje que ayudó a Walter White a desaparecer durante el tramo final de Breaking Bad.
De hecho, el lugar al que huye Jesse ya era mencionado al principio de la película. En un flash-back, el joven aparece charlando junto a Mike Ermatraunt, que le habla de Alaska como posible destino después de que Jesse le confesara su intención de dejar el negocio del narcotráfico.
"Es la última frontera", afirma Mike. "Allí, podrías ser quien quisieras, lo que quisieras", explica el personaje a un atento Jesse. Durante la misma escena, Pinkman pregunta si podría arreglar todos sus malos actos, pero Mike le advierte: "Es lo único que no puedes hacer".
A pesar de todo, en el final de El Camino, Jesse sí que intenta arreglar uno de sus grandes fallos, y deja a Ed una carta para Brock, el hijo de la fallecida Andrea Cantillo. Ante las amenazas del grupo neonazi por la vida del pequeño, Jesse se vio obligado a actuar según sus órdenes. Pero, con la muerte del grupo comandado por Jack, Brock parece estar a salvo, y Jesse quiere, al menos, despedirse de él.
Justo al final de El Camino, con Jesse ya embarcado en su viaje hacia Alaska para empezar una nueva vida, hay un último y sentido flash-back en el que el personaje habla con Jane, su novia muerta por una sobredosis que provocó Walter White.
Una charla en la que Jane insiste a Jesse con la importancia de que tome sus propias decisiones acerca de su futuro. Y, de hecho, con su salida del país, el personaje ahora tiene en sus manos comenzar de nuevo bajo una nueva identidad.
¿HABRÁ SECUELA DE EL CAMINO?
Gracias a la ayuda de Ed, Jesse tendrá un nuevo nombre y una nueva historia personal con las que podrá empezar una vida nueva lejos de su pasado. Un pasado que, eso sí, será clave para reconfigurar sus acciones.
En otro de los flash-backs más emotivos, Jesse y Walter White comparten una comida en un restaurante. Y en una charla intrascendente, un apacible Walter le pregunta a su pupilo si ha pensado en estudiar en la universidad.
El protagonista de Breaking Bad le sugiere que estudie empresariales, pero Jesse prefiere otro tipo de estudios, como medicina deportiva. Una opción que podría ser la que tomara el personaje en una posible secuela de El Camino que, eso sí, no parece probable.
