El ministerio británico de Cultura, Medios y Deportes indicó que las redes sociales deben que atajar contenidos que animan a los jóvenes a suicidarse o lesionarse, pues tanto los gigantes tecnológicos, como las redes tienen el deber moral de "proteger a los jóvenes".
Londres, 8 abril (EFE).- Los sitios de internet que contribuyen a fomentar actividades terroristas, abusos sexuales de menores, delitos de odio, acoso o noticias falsas deberían ser multados o bloqueados, según unos planes del Gobierno británico.
El ministerio británico de Cultura, Medios y Deportes (DCMS, en inglés) ha propuesto la creación de un organismo regulador independiente y un código de conducta para las compañías del sector tecnológico a fin de hacer frente a esas actividades por internet.
Las propuestas del DCMS están contenidas en un libro blanco que ha elaborado con el apoyo de la cartera de Interior.
El DCMS también indicó que las redes sociales tienen que atajar contenidos que animan a los jóvenes a suicidarse o lesionarse tras el caso de Molly Russell, de 14 años, que se quitó la vida en 2017.
Tras su muerte, los padres hallaron en la cuenta de Instagram de Molly material que hacía referencia a la depresión y el suicidio.
El titular del DCMS, Jeremy Wright, dijo que la era de la autorregulación de las compañías de internet está "terminada".
Por su parte, el Ministro de Interior, Sajid Javid, declaró a los medios que los gigantes tecnológicos y las redes sociales tienen el deber moral de "proteger a los jóvenes".
"A pesar de nuestras repetidas peticiones para que toman medidas, contenido perjudicial e ilegal, incluidos abusos de menores y terrorismo, aún está disponible en la red", añadió.
De prosperar estas propuestas, el regulador independiente sería el encargado de definir un código de buena práctica al que las redes sociales y las compañías de internet tendrían que adherirse.
Las nuevas reglas se aplicarían, además de a Facebook, Twitter y Google, a los servicios de mensajería como Sanpchat, y el regulador tendría el poder de multar a las compañías, aunque las propuestas aún deben ser sometidas a un periodo de consultas con el sector.
No obstante, TechUK, grupo que representa al área tecnológica del Reino Unido, señaló este lunes que el Gobierno debe ser "claro" para asegurar que hay un equilibrio entre prevenir la difusión de material perjudicial y la libertad de expresión.
Asimismo, el responsable del grupo de pensamiento (think tank) Instituto Adam Smith, Matthew Lesh, consideró que las propuestas supone un "ataque histórico" a la libertad de expresión, sobre todo en momentos en que el país "critica las violaciones de la libertad de expresión en Estados como Irán, China y Rusia".