#MetaDatos | Beatriz Gutiérrez Müller se ha posicionado como una de las figuras más importantes de México en las redes sociales, a sólo cinco meses de abrir su cuenta en Twitter. Su éxito se ha apuntalado no sólo en el apoyo que en este foro mantiene su esposo Andrés Manuel López Obrador, sino por la interacción que ha desarrollado con sus seguidores, lo que ha roto con la comunicación impersonal y distante que tienen en estos foros digitales otros protagonistas de la política.
No obstante, la cercanía con los usuarios también tiene su riesgo. Los antagonistas de Movimiento de Regeneración Nacional y de AMLO han aprovechado para enfocar su ira en contra de la historiadora e incluso contra su hijo menor de edad. Pese a denunciar los ataques e insistir que no está interesada en la política, sus críticos la mantienen al centro de la polarización que prevalece en las redes sociales, y por la que figuras como Angélica Rivera de Peña prefieren no participar.
Ciudad de México, 5 de noviembre (SinEmbargo).– Beatriz Gutiérrez Müller, historiadora, académica, esposa de Andrés Manuel López Obrador y madre de un hijo de ambos, cimbra las redes sociales cada vez que publica un tuit en su cuenta oficial de Twitter (@BeatrizGMuller). Su popularidad en esta red social ha sido vertiginosa, a pesar de que ella se sumó a este foro digital hace sólo cinco meses. Con más de 200 mil seguidores en Twitter –hasta el corte de esta nota–, la también escritora suma un promedio de 497 seguidores por día, de acuerdo con la proyección de Social Blade, situación que se aceleró a partir del 1 de julio en que AMLO resultó ganador de la elección federal.
Gutiérrez Müller incursionó en Twitter con un perfil muy distinto al que acostumbran las figuras políticas en México. La manera en que se expresa desde esta plataforma rompe con el tono institucional y despersonalizado que acostumbran, en particular, los priistas y los panistas, cuyo protocolo de comunicación digital se caracteriza por la homogeneidad e incluso resulta complicado distinguir entre una y otra cuenta; también, algunas de esas cuentas son operadas por agencias de marketing que no logran quitarles la rigidez ni el acartonamiento, como es el caso de decenas de cuentas de diputados y senadores, entre otros.
Desde la llegada de Twitter a México se han afinado estas estrategias de comunicación donde las opiniones personales son omitidas en la mayoría de los casos, y en su lugar se aprovechan estos canales para promover posturas de partido.
El estilo de comunicación de algunos integrantes del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), como el de la Diputada Tatiana Clouthier Carrillo y el de la propia Gutiérrez Müller, rompe con la distancia con la que los políticos mexicanos acostumbran a "dialogar" con las audiencias en las redes.
Durante el periodo de transición, esta manera de abordar las redes sociales –con mayor frecuencia a título personal– alienta la polémicas pero también un gran interés entre una audiencia acostumbrada a que las figuras políticas utilicen las redes sociales como canales de una sola vía.
La comunicación cercana no ha vuelto más vulnerable a ataques a Gutiérrez Mülller que a figuras como Angélica Rivera de Peña, quien no tiene cuenta de Twitter, o a Margarita Zavala Gómez del Campo, o a Marta Sahagún de Fox, que recurrentemente son blanco de reclamos por el malestar social que genera la corrupción y la impunidad en la esfera política de México.
Durante el mes de octubre, esta dinámica prevaleció a raíz de la manifestación de inconformidad de la escritora por la columna "Hijo de AMLO, recargado... y motorizado", publicada en El Universal, en la que también se incluyó una fotografía del menor. La polémica se detonó con el hashtag #ConLosNiñosNo y en cuestión de horas se convirtió en tendencia, luego de ser apoyada por usuarios, políticos, periodistas e influencers, lo que también le generó una ola de ataques desde cuentas adversarias a López Obrador.
Las críticas a menudo surgen de manera organizada y buscan posicionar hashtags, memes y generan numerosos comentarios negativos en sus publicaciones, son formas de atacar recurrentes pero que en el caso de Beatriz Gutiérrez se distinguen por centrarse en críticas a su imagen, su grado académico, su relación con López Obrador y otros aspectos que atentan contra su persona y no por su participación activa en la política.
A lo largo del mes, la misma frase fue retomada en varias ocasiones para avivar la polémica, y se revivió el pasado fin de semana, luego que Gutiérrez publicara un tuit en el que condenó la portada del semanario Proceso en la que se lee: "AMLO se asila. El fantasma del fracaso". A través de un tuit, la escritora consideró que el encabezado provenía de "conjeturas fantasiosas" y como sucedió con su reacción por la columna de El Universal, esta vez se movilizó el hashtag #AMLONoEstásSolo, que se mantuvo activo hasta este lunes con un alcance potencial de 4 millones 500 mil usuarios, de acuerdo con cifras de la herramienta de análisis de Twitter Tweet Binder.
"Todavía no toma posesión y ya está «solo» y a punto del «fracaso». El conservadurismo, de izquierda o de derecha, nubla el juicio y da pie a conjeturas fantasiosas. Los extremos pueden tocarse y abrazarse. Bienvenida la pluralidad y el debate. Lo bueno es el desenmascaramiento", escribió Beatriz Gutiérrez.
Con un solo tuit, la escritora obtuvo más de 24 mil reaccione entre muestras de apoyo y críticas. Dentro de la grupalidad crítica, la respuesta se centró en retomar la frase #ConLosNiñosNo para movilizar el hashtag #ConLosMaridosNo y #ConMiEsposoNo con el que le señalaron el salir en defensa de sus familiares e incluso intentar "cogobernar" con López Obrador por salir en su defensa.
La frecuencia de los ataques han motivado a que Gutiérrez Müller manifieste de manera abierta su intención de desmarcarse de la esfera política.
Nuestra first lady anda brava, ahora se fue contra Proceso por la crítica que le hicieron al Presi Peje.
Deberíamos de ayudarle, yo sí le voy a ayudar porque soy cool.
Te propongo un # betty.#ConMiEsposoNo
— tumbaburross® (@tumbaburross) 5 de noviembre de 2018
La crítica, la objeción y la disidencia que se expresa en #Twitter es bienvenida cuando se realiza con respeto y argumentos. Solo quiero recordarles que yo no soy @lopezobrador_, soy Beatriz y no detento ningún cargo público ni represento a persona pública alguna #FelizMartes ?
— Beatriz Gutiérrez Müller (@BeatrizGMuller) 14 de agosto de 2018
Qué mundo tan agresivo el de #Twitter. Por eso no escribo por aquí tan a menudo como yo querría. El lenguaje cargado de ira y la agresividad no me gustan. De todas formas #FelizLunes a los que no don #bots y saben conducirse con respeto. #seanfelices
— Beatriz Gutiérrez Müller (@BeatrizGMuller) 13 de agosto de 2018