Una mujer relata intento de secuestro en NL: “Taxista preguntó la ruta varias veces. Luego se salió del camino’’

15/08/2018 - 10:01 pm

“¿Quién iba a pensar que horas más tarde de esa fotografía, mi mejor amiga y yo íbamos a pasar por un momento tan horrible como el que pasamos?’’, escribió una joven que denunció un intentó de secuestro en Monterrey, Nuevo León. 

Las jóvenes fueron atacadas el domingo en la madrugada. Foto: Especial.

Ciudad de México, 15 de agosto (SinEmbargo).- Una mujer utilizó las redes sociales para denunciar un intento de secuestro en Monterrey, Nuevo León.

“Mi amiga me visitó de Hermosillo a Monterrey para ir a un concierto el sábado. Antes de que se terminara el concierto, como a la 1:20 de la madrugada, nos decidimos retirar y tomamos un taxi, ya que el servicio de Uber estaba saturado”, escribió la denunciante, cuyo testimonio ha sido retomado por medios nacionales.

“El conductor del taxi me preguntó varias veces que qué ruta quería que tomáramos, mis palabras fueron ‘Constitución, Gonzalitos y luego Leones’, fui muy clara y segundos después me vuelve a preguntar... y le repetí lo mismo, sólo que ahora alcance a ver la luz de su celular encendida, no me pareció nada extraño.

Durante el trayecto, el conductor les dijo que se había descompuesto el auto y se salió del camino. Frente al vehículo, otro carro se estacionó; un sujeto descendió y se aproximó. Las mujeres enfrentaron al tipo, quien comenzó a arrebatarles sus cosas y a forcejar.

“Me golpeó las costillas, me intentó jalar de los brazos al otro vehículo y me tomó del cabello; logré soltarme, me paré de inmediato y corrí con mi amiga para pedir ayuda. En segundos llegó un policía de Fuerza Civil’’, contó la denunciante.

Después de que las mujeres explicaron lo ocurrido, el policía contestó: “Son mujeres para que andan solas, a parte se nota que tomaron’’. Y no, no las ayudó.

La joven que logró escapar lamentó lo ocurrido y la forma en la que actuaron las autoridades:

“No es justo lo que nos pasó, no es justo que tenga mis costillas colapsadas; mis piernas ensangrentadas; mi cadera lastimada; mis codos cortados, y mi cara marcada. No merecemos un trato así, no merezco verme al espejo y ver moretones y marcas que ese sujeto me dejó.

“¿Qué hubiera pasado si no me bajan del taxi por agarrarme a golpes con el agresor? ¿Qué hubiera pasado si mi amiga se queda en el taxi? ¿Nos quedamos en shock y luego el taxista a donde nos llevaría? Sí, él era cómplice.

“Estoy muy triste, enojada y decepcionada con la inseguridad de nuestro país, con la discriminación que todavía existe hacia la mujer’’.

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