Caracas, 25 ago (EFE).- El Gobierno de Venezuela informó hoy de que ya han sido contabilizadas 39 víctimas mortales por una explosión registrada en la refinería de Amuay (noroeste), una de las tres que forman el Centro Refinador de Paraguaná (CRP), el mayor del país suramericano y uno de los más grandes del mundo.
El vicepresidente venezolano, Elías Jaua, declaró al canal estatal que en la medida en que han ido reduciendo el fuego en la refinería y removido los escombros han encontrado "nuevos cadáveres".
"Cerrando hasta este momento la cifra de 39 compatriotas que están en la morgue del hospital del seguro social, 18 de ellos son efectivos de la Guardia Nacional Bolivariana ya reconocidos", señaló el funcionario.
Indicó que 15 de las víctimas mortales son civiles y en su mayoría familiares de los militares que se encontraban en las viviendas del destacamento 45 de la Guardia Nacional (policía militarizada), un complejo militar con infraestructura residencial.
Confirmó, asimismo, que "hay seis cadáveres por identificar".
Jaua detalló igualmente que hay doce heridos hospitalizados en diferentes hospitales en la ciudad de Punto Fijo (528 kilómetros al oeste de Caracas) donde se encuentra la refinería, mientras que otros nueve fueron trasladados a Maracaibo, en el oeste del país.
El Gobierno indicó que 86 personas debieron recibir algún tipo de atención médica, aunque la mayoría ya están dados de alta.
Horas antes, el ministro de Petróleo y Minería, Rafael Ramírez, explicó que la explosión se produjo debido a una fuga de gas, por motivos que aún se desconocen.
Ese gas se acumuló generando una "nube" que explotó posteriormente afectando el área de almacenamiento de la refinería y dejando un fuego que se prolongó desde la madrugada y a lo largo del día.
"Al final tuvimos nueve tanques de almacenamiento afectados por efectos de la explosión", afirmó el ministro, al señalar que en el momento en que se detectó la nube se alertó, pero todo sucedió "muy rápido" y la explosión "casi de inmediato".
El ministro explicó que el estallido por la ignición del gas afectó a la zona de almacenamiento de la refinería, pero no tuvo repercusión en el resto de la central, y la onda expansiva afectó fundamentalmente a las instalaciones del Destacamento 44 de la Guardia Nacional, encargada de la custodia del centro industrial.
Juau declaró que había 209 casas y 11 locales comerciales afectados, y que, además, 13 familias "quedaron con sus casas totalmente destruidas" y fueron trasladadas a la base naval de Punto Fijo.
El vicepresidente puntualizó que desde que se registró la explosión en la refinería, hacia la 01.00, hora local (05.30 GMT), se activó un plan de contingencia "para controlar el incendio".
Detalló que el incendio "ha sido reducido" pero admitió que no habían podido "extinguirlo hasta el momento", por lo que anunció que continuarán "batallando durante toda la noche" para lograrlo.
Tras el suceso, el presidente de Venezuela, Hugo Chávez, ordenó una investigación "profunda" de lo ocurrido y decretó tres días de duelo nacional.
"He ordenado una investigación profunda sobre estos hechos, sobre sus causas y además hay que determinar bien causas, efectos y tomar las acciones que haya que tomar", indicó Chávez en un contacto telefónico transmitido por el canal de televisión estatal.
Chávez afirmó que había decidido declarar el duelo nacional porque, señaló: "esto nos afecta a todos, a la gran familia venezolana (...) en verdad que es muy lamentable, muy doloroso", añadió.
El vicepresidente venezolano dijo posteriormente que ya estaba actuando un comité de investigación formado por expertos en seguridad en este tipo de eventos, el Servicio de Inteligencia (Sebin), la Inteligencia Militar y la Fiscalía.
El gerente de refinamiento del Centro de Refinación de Paraguaná (CRP), Jesús Luongo, descartó hoy que la emergencia haya sido causada por falta de mantenimiento e indicó que han invertido en esas labores 6.000 millones de dólares en los últimos tres años.
Por su parte, el secretario general de la Federación Unitaria de Trabajadores Petroleros de Venezuela (Futpv), Iván Freites, acusó al Gobierno de haber desatendido en los últimos años las tareas de mantenimiento de la industria petrolera.
Paralelamente, el Consejo Nacional Electoral (CNE) suspendió hoy un simulacro de los comicios presidenciales de octubre previsto para mañana y anunció que se celebrará el próximo 2 de septiembre, en solidaridad por las víctimas de la explosión de la refinería y las lluvias que azotaron al país. EFE