Estudiante de la UNAM tranforma colillas de cigarro en celulosa para fabricar papel

30/05/2018 - 1:05 pm

Leopoldo Benítez propuso como tesis para obtener el título de biólogo degradar las colillas de cigarro y crear composta y celulosa para hacer papel.

Su trabajo podría contribuir a eliminar la contaminación de los suelos y el agua. La UNAM estima que una sola colilla puede contaminar hasta 50 litros de agua, porque está diseñada para retener sustancias tóxicas potencialmente cancerígenas, como el alquitrán.

Ciudad de México, 30 de mayo (SinEmbargo).– Para contrarrestar la contaminación que generan las 50 mil millones de colillas que México desecha al año, un estudiante de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) trabaja en transformarlas en celulosa para fabricar papel. “Esto es importante porque por cada tonelada procesada de esos desechos se podría evitar la tala de 14 árboles”, afirmó el joven a cargo del proyecto, Leopoldo Benítez.

Leopoldo se propuso degradar varias colillas para convertirlas en composta, ya que, por el material del que están hechas, tardan hasta 12 años en hacerlo; esta fue su tesis para licenciado en Biología. Con su experimento logró degradar 25 por ciento de las colillas y el 75 por ciento lo transformó en pulpa de celulosa, útil para hacer papel y capaz de reemplazar a la que se extrae con la tala de árboles, informó la UNAM.

“Trituramos o molemos con agua la colilla tratada (un mililitro por cada una), sin contaminantes, y obtenemos algo similar a la pulpa de la celulosa. Con las colectas que hacemos en bares, restaurantes o lugares específicos, conseguimos cerca de 15 kilogramos de colillas por semana”, expuso el universitario.

EL PROCESO

Lo primero que Leopoldo Benítez hizo para concluir esta tarea fue buscar un microorganismo que deteriorara las colillas. “Son hongos basidiomicetos que crecen sobre los árboles y deterioran la madera. Mi hipótesis fue que podrían hacer lo mismo con colillas, que también están hechas de celulosa”, explicó.

En condiciones controladas,colocó a los hongos y colillas humedecidas; con ello obtuvo que los basidiomicetos se alimentaron de los desechos.

El 25 por ciento que logró degradarse de las colillas lo utilizó para crear composta, y el restante lo convirtió en celulosa.

La UNAM señaló que éste es un gran hallazgo porque la industria del papel debe realizar grandes cultivos de confieras que después tal. Por su parte, el joven subrayó que México no tiene la capacidad de producir grandes cantidades de pulpa de celulosa y la compra principalmente a Estados Unidos, lo que aumenta el costo de los productos que se elaboran con ella.

Aunque el material procesado también tiene propiedades térmicas y aislantes, actualmente el universitario sólo elabora pulpa de celulosa y busca reproducir su idea, que ya está estandarizada a nivel industrial.

en Sinembargo al Aire

Opinión

Opinión en video