Invitado a la serie de eventos organizados para exigir que se aclare el crimen del periodista Javier Valdez, Zepeda Patterson abordó en Mazatlán los efectos negativos que producen los ataques en contra de los periodistas.
Por Ariel Noriega
Mazatlán/Ciudad de México, 15 de mayo (Noroeste/SinEmbargo).- Las campañas sucias han garantizado algo: después de las elecciones México será un País polarizado, pronosticó Jorge Zepeda Patterson, director de SinEmbargo.
“El grueso del esfuerzo político va más dirigido a destruir al otro..., nos va a quedar un País polarizado”, aseguró el periodista mazatleco.
“Los mexicanos nos encontramos ante una encrucijada donde tenemos que decidir si le damos una segunda oportunidad al PRI, votamos por una oferta agotada del panismo o elegimos la tercera opción, Morena”.
A pesar del ambiente negativo creado por las campañas sucias, Zepeda Patterson aseguró que ve mucha esperanza en un cambio y la posibilidad de una elección democrática sin problemas.
“Si llegamos a vísperas de la elección, y (Andrés Manuel) López Obrador sigue arriba por 10 ó 15 puntos, las posibilidades de que se cometa un fraude son prácticamente nulas”, aseguró el escritor galardonado con el Premio Planeta.
Invitado a la serie de eventos organizados para exigir que se aclare el crimen del periodista Javier Valdez, Zepeda Patterson abordó en Mazatlán los efectos negativos que producen los ataques en contra de los periodistas.
“Cuando se censura a un periodista se está atentando en contra del derecho de la sociedad a estar informada”.
El periodista recordó que antes de una agresión directa en contra de un periodista hay un enorme cantidad de agresiones, amenazas, censura y acoso de parte de los poderosos.
El también editorialista destacó el poder de las redes sociales, algo que los actuales políticos encumbrados no han podido o no han sabido enfrentar, lo que crea unas condiciones totalmente diferentes y le da más posibilidades a la sociedad de interactuar.
Explicó que la apuesta de los mexicanos por una opción diferente está enmarcada en las fuerzas de reacción en contra del liberalismo económico y la globalización, sistemas que después de varias décadas no han conseguido mejorar las condiciones de la población mundial.