Dos días después de su desaparición, diarios locales dieron a conocer que cuatro integrantes de una familia y dos amigos habían desaparecido tras asistir a una reunión en la colonia Valle de los Naranjos. El pasado domingo por la mañana fue la última vez que se les vio. Estaban en una reunión con otros familiares.
Al darse cuenta que algunos familiares no se encontraban en el domicilio, procedieron a localizarlos vía telefónica. Pero estos ya no contestaron.
Guanajuato/Ciudad de México, 3 de mayo (Zona franca/SinEmbargo).– La Subprocuraduría de Justicia de la Región de Celaya investiga la desaparición de seis personas. Cuatro de los desaparecidos son integrantes de una familia y dos más son amigos. Ninguno han sido localizados desde pasado domingo en Guanajuato, una entidad que en el último año ha sido escenario de violencia sin control y asesinatos. Al menos 43 agentes policiacos del estado han caído en ataques armados.
Testigos refieren que el sábado 28 de abril, los desaparecidos se encontraban en una fiesta familiar que se prolongó hasta las primeras horas del día domingo. La celebración se llevaba a acabo en un inmueble de la colonia Los Naranjos, en Celaya. El domingo, cerca de las 08:00 horas, cuando había concluido la celebración, se dieron cuenta que seis de las personas no aparecían. Iniciaron la búsqueda. Llamaron a sus celulares pero estaban apagados. Acudieron al Ministerio Público para reportar los hechos.
Autoridades informaron que en relación a la denuncia por las personas no localizadas, se abrió una carpeta de investigación 44166/2018 de la Unidad Especializada. Los desaparecidos son: Yolanda Escogido Navarro de 46 años y Julio César Bustos Alemán de 44 años, y de su hijo Gustavo Ángel Bustos Escogido de 18 años, así como el sobrino Luis Eduardo Escogido Navarro de 21 años, y Brayan y Martín ambos de 18 años de edad.
El vehículo de motor de la marca Explorer, color verde, modelo 1993, tipo vagoneta, propiedad de uno de los desaparecidos, se encontraba estacionado afuera del domicilio y no ha sido encontrado. La Procuraduría General de Justicia dijo que desde que se recibió la denuncia mantiene un operativo de búsqueda permanente para lograr su localización así como acciones coordinadas con otras corporaciones.
Según datos generales del Registro Nacional de Datos de Personas Extraviadas o Desaparecidas en el periodo comprendido entre el 2007 a enero de 2018, Tamaulipas es el estado con más personas ausentes en el país con un total de 6 mil 129 casos, le sigue el Estado de México con 3 mil 861; el tercero, Jalisco, con 3 mil 088; y en cuarto, Sinaloa, con 2 mil 798. En quinto lugar está Nuevo León con 2 mil 660 casos de desaparición, y en sexto, Chihuahua con 2 mil 178.
El otro gran drama mexicano es que el estallido de violencia sin control ha obligado a miles a dejar sus hogares en silencio, porque las autoridades ni los contabilizan si se encargan de ellos.
MILES DE DESPLAZADOS EN EL PAÍS
La violencia vinculada al crimen organizado en México hizo que al menos 11,232 personas tuvieran que huir de sus hogares en 2017, según el recuento divulgado el miércoles por un grupo de derechos humanos.
La Comisión Mexicana de Defensa y Promoción de Derechos Humanos contabilizó el año pasado 25 eventos de desplazamiento interno masivo en nueve estados.
Además de aquellos provocados por lo que denominó “grupos armados organizados” --entre los que están cárteles, pequeñas bandas o autodefensas-- contabilizó otros 8.928 desplazados por violencia política, conflictos sociales o disputas territoriales, y 230 más que tuvieron que huir de su casa por proyectos extractivos mineros.
El estado más afectado por los desplazamientos fue Chiapas y más de 12,000 de las personas que tuvieron que huir eran indígenas.
En total, la Comisión estima que el número de personas desplazadas en México entre 2006 y 2017 asciende a 329,917 pero no tiene claro cuántas podrían haber regresado a sus lugares de origen.
José Antonio Guevara, director de la ONG, subrayó que las cifras con las que trabajan son muy conservadoras porque la Comisión solo recopila datos de episodios de desplazamiento en el que hay más de 50 personas afectadas pero que hay muchos casos individuales donde los afectados huyen a raíz de un asesinato o una desaparición en su familia o de alguien respetado en su comunidad, como ocurre en los casos de defensores de derechos humanos o periodistas.
El último evento masivo de desplazamiento que fue ampliamente divulgado tuvo lugar este año, en abril, cuando soldados del ejército escoltaron a 92 personas que abandonaron su aldea en una zona montañosa de Guerrero debido al terror sembrado por los cárteles de la droga.
El peor en 2017 fue en Chiapas, donde un conflicto de tierras y la acción de grupos armados desplazó a más de 5,000 indígenas de los Altos de Chiapas.