La semana pasada, Pemex anunció la firma de sus primeros grandes contratos de fracturación hidráulica para la extracción de gas con una subsidiaria de Lewis Energy, con sede en Texas.
La empresa, que operará en la comunidad de Hidalgo, Coahuila, en lugar de construirse un depósito para los residuos tóxicos cerca del área de exploración, desechará el lodo en contenedores que irán directo al Cimari, ubicado en Ramos Arizpe, alertó el Clúster de Energía.
Además, el organismo denunció que Petróleos Mexicanos no ha entregado los resultados de impacto ambiental y social que implicarán los trabajos de Lewis Energy en el lugar.
Por Christian Martínez
Coahuila/Ciudad de México, 3 de abril (Vanguardia/SinEmbargo).– Tras anunciarse la explotación de yacimientos de gas shale en Hidalgo, al norte del estado, el Clúster de Energía de Coahuila informó que el agua contaminada producto del fracking –técnica para la extracción– será trasladada al Cimari de Ramos Arizpe.
De acuerdo con el organismo, en lugar de construirse un depósito para los residuos tóxicos cerca del área de exploración, la empresa Lewis Energy –que firmó contrato con Pemex para aprovechar el campo Olmos– desechará el lodo en contenedores que irán al Centro Integral de Manejo, Tratamiento, Aprovechamiento y Disposición Final de Residuos Industriales y Peligrosos (Cimari).
En entrevista con Vanguardia, integrantes del Clúster explicaron que esta disposición de los residuos se acordó desde 2014, durante la “Ronda Cero” de la reforma energética.
Y es que como parte de la normativa, además de tener que recubrir tres veces el tubo empleado en la fractura hidráulica (fracking) –para reducir filtraciones de líquidos con químicos al subsuelo–, ahora las empresas tienen prohibido depositar los desechos en estanques.
"Tienen otra (regulación) que en ningún otro país existe: generalmente para los lodos que se sacan, sobre todo en Estados Unidos, tenían que construirse estanques con membranas”, detallaron en una respuesta institucional. Ahora, los lineamientos establecen que deben existir contenedores especiales para depositar y transportar los desechos.
Según el Clúster, ninguna porción de residuos se quedará en Hidalgo, pues todos serán llevados al Cimari, pese a que la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) abrió en 2017 dos investigaciones por irregularidades en su funcionamiento, tras registrarse incendios.
De acuerdo con el Clúster de Energía, Petróleos Mexicanos no ha entregado los resultados de impacto ambiental y social de los trabajos de Lewis Energy, luego de que firmado el contrato –anunciado la semana pasada– la ley le otorga 180 días para ello.
“Pemex tendrá que entregar a la Secretaría de Energía, en caso de que hubiera un riesgo (ambiental y social), el cómo lo va a remediar”, expusieron sus miembros, “ya cuando le aprueben esas evaluaciones, entonces arrancará la operación”.
LEWIS ENERGY Y EL CONTRATO DE FRACKING
Petróleos Mexicanos firmó el pasado 26 de marzo lo que aparentemente es uno de sus primeros grandes contratos de fracturación hidráulica para la extracción de gas con una subsidiaria de Lewis Energy, con sede en Texas.
La paraestatal mexicana indicó que planea perforar y explotar yacimientos de gas no convencionales con Lewis Energy Mexico, en la porción de la formación de esquisto de Eagle Ford en México.
A pesar de que Pemex no mencionó el uso de fracturación hidráulica, el método se utiliza a menudo para las perforaciones de gas en el área de Eagle Ford.
Pemex señaló que el contrato involucra inversiones por alrededor de 617 millones de dólares y tiene un rendimiento potencial para la producción de 117 millones de pies cúbicos por día para el año 2021.
Los críticos señalan que ya se han perforado pozos de fracking en México, pero el gobierno no ha difundido mucha información al respecto.