El pasado 19 de septiembre, el colegio Enrique Rébsamen colapsó tras el sismo que sacudió a la capital mexicana poco antes de que concluyera la jornada escolar. Varios niños y personal docente quedaron ahí atrapados. De acuerdo con el reporte oficial, 19 niños y siete adultos perdieron la vida.
La estructura original del inmueble constaba de una planta baja y dos pisos, pero entre 2009 y 2015, la directora y aparente propietaria de la institución mandó a construir un tercer piso para adaptar su departamento con ventanas, puertas y techo hechos en acero y pisos de mármol. Incluso, un roof garden.
SinEmbargo da a conocer, con autorización expresa, la siguiente historia de Univisión Investiga.
Por Peniley Ramírez y Gerardo Reyes
–Daily Camacaro, Azul Alvarez y Juan Cooper contribuyeron con este reportaje.
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Ciudad de México, 25 de septiembre (Univisión).- El colegio privado Enrique Rábsamen al sur de Ciudad de México, símbolo de la tragedia que siguió al sismo del 19 de septiembre, estuvo bajo investigación oficial en 2014 y 2015 por violaciones al código de construcción, dijeron fuentes oficiales a Univision Investiga.
Las irregularidades podrían estar relacionadas con varias modificaciones que se le hicieron a la edificación que colapsó, dejando a 19 niños y siete adultos muertos. Entre estas alteraciones se encuentra la construcción de un amplio apartamento en la azotea. A decir de los vecinos, allí vivían la directora de la escuela, Mónica García Villegas, y otro familiar. No fue posible localizar a la directora.
Un análisis realizado a petición de Univision por el ingeniero civil especialista en estructuras, Alberto López Acevedo, apuntó a que las alteraciones sucedieron entre 2009 y 2016.
“Una imagen de 2009 se ve obviamente un pequeño cuarto en la parte de la azotea, pero si nos vamos a imágenes de 2015 pues obviamente se ve ya una ampliación importante de ese cuarto. Y si nos vamos a 2016 se ve incluso una especie de roof garden’’, dijo el ingeniero.
Univision Investiga obtuvo fotografías exclusivas del interior del departamento, tomadas durante las tareas de rescate. Se observa que tenía ventanas, puertas y techo de la terraza hechos en acero y pisos de mármol. Sin embargo, en las imágenes históricas del edificio no se observa que en la fachada se hayan reforzado ni ampliado las columnas, como lo señaló el ingeniero.
“Todo eso va sumando peso. Es más que evidente que la estructura no estaba preparada para aumentar un nivel más", consideró López Acevedo.
Una fuente militar de alto rango con conocimientos de ingeniería, quien solicitó anonimato, dijo a Univision que no es normal que existiera una estructura de ese tamaño sobre la escuela.
“Normalmente la ley permite construir un cuarto para la persona que cuida durante la noche, pero no algo tan grande’’.
Las investigaciones habrían ocurrido durante la anterior administración en la delegación Tlalpan, donde se ubica el colegio. Univision solicitó una entrevista con Claudia Sheinbaum, la actual Delegada y aspirante a la Jefatura de Gobierno de la capital mexicana, pero su equipo de prensa respondió que la solicitud aún se encontraba en trámite.
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MODIFICACIONES EVIDENTES
Quizás los primeros cuestionamientos sobre las irregularidades en el edificio se conocieron por un video que se volvió viral y que captó a un rescatista anónimo hablando por celular de fallas estructurales que había visto en el edificio mientras se removían los escombros. El video tiene más de 100 mil visitas y su protagonista ha recibido tanto elogios como insultos.
Univision logró localizar al rescatista. Se trata de Horacio Espíndola, un administrador de empresas y activista político que asegura tener estudios de ingeniería. Espíndola había aparecido en una transmisión de la cadena Televisa desde el sitio de la tragedia. Se le vio dándole instrucciones a un compañero para que pidiera a la ciudadanía ayuda con la donación de herramientas para la remoción de los escombros. Él asegura que fue uno de los primeros en llegar al lugar.
“Esto no debió pasar. No debió de haber ese número de niños muertos. Porque la infraestructura no estaba en condiciones de albergar una escuela. Eran obsoletas las instalaciones’’, explicó Espíndola.
Varios vecinos de la zona y padres del colegio dijeron a Univision fuera de cámaras que era conocido que la directora vivía en el último piso del edificio administrativo.
Los rescatistas que participaron en la extracción de sobrevivientes y cadáveres aseguraron que la escuela no tenía indicaciones de rutas de emergencia. Uno de ellos dijo que la escalera del patio trasero era “una trampa’’.
“Hacía falta una salida de emergencia para los niños. La salida de la escalera da a un patio cerrado’’, afirmó Alfredo, un rescatista que pidió omitir su apellido.
Erick Soto es un oficial de tránsito de la zona. Fue uno de los primeros en llegar al lugar. También detectó lo que él llamó las malas condiciones de la salida trasera de emergencia.
"Esos chicos hubieran sobrevivido si se quedaban en sus salones de clases’’, dijo la noche del viernes. Frente a él, una cruz hecha con velas iluminaba una esquina de corones de flores blancas en la avenida contigua al colegio.
En los días posteriores al sismo del 7 de septiembre, con epicentro en Chiapas, las autoridades de la Secretaría de Educación Pública anunciaron que se conducirían revisiones exhaustivas en todas las escuelas. Hasta ahora la institución no ha mostrado documentos que indiquen si en el colegio Rebsamen se realizaron las revisiones.