Un ciudadano ruso que se dirigía desde Seattle a Atlanta ha denunciado que el personal de la aerolínea estadounidense Delta Airlines lo expulsó del vuelo debido a su origen pues señala que otro pasajero mostró descontento y se negó a sentarse a su lado.
Ciudad de México, 26 de julio, (SinEmbargo/RT).- El viaje de Andréi Yeremin desde Seattle (Washington, EU) hasta Atlanta (Georgia, EU) con Delta Airlines se vio truncado este lunes, cuando miembros de la aerolínea estadounidense decidieron expulsarlo del vuelo DL1588 "por ser un ciudadano ruso", según ha denunciado el hombre a través de su página de Facebook.
Yeremin destaca que es socio Platino de la alianza SkyTeam y que, a pesar de este hecho, el personal de Delta Airlines lo echó del avión por el descontento de otro pasajero que se negó a sentarse a su lado.
"Según él, yo era un ocupante de Crimea, al igual que otros ciudadanos rusos", explica Yeremin. Al final, el ciudadano ruso consiguió llegar a su destino, pero tuvo que tomar otro vuelo "mucho más tarde".
En las declaraciones a RT, Yeremin ha revelado su decisión de denunciar el caso ante los tribunales porque le "han insultado". "Me han ofrecido 100 dólares como recompensa. No puedo perdonarlo", ha sentenciado. Asimismo, la aerolínea, ha relatado, no le ha explicado de forma clara la causa del incidente.
Horas después de publicar el post en la red social, Yeremin lo borró. Según ha explicado a la agencia RIA Novosti, lo hizo tras recibir mensajes y llamadas telefónicas con amenazas. "No es que tenga miedo de nada, pero tengo dos hijos y esto me resulta desagradable", ha dicho. La agencia rusa asegura tener capturas de pantalla con dichas amenazas.
La Embajada de Rusia en Estados Unidos ha reaccionado a la denuncia de Yeremin. En ese sentido, ha señalado que está investigando lo sucedido y que ha solicitado aclaraciones a la aerolínea.
Por su parte, Delta Airlines ha presentado otra versión de los hechos. Según una declaración de la aerolínea a RIA Novosti, el pasajero llegó tarde e "irrumpió en la puerta de embarque ya cerrada, causando la activación de la alarma" cuando el avión ya se estaba preparando para el despegue. Como resultado de su "infracción a las normas de seguridad", según la compañía, fue interrogado por los servicios de seguridad y luego le reservaron un asiento para un vuelo que se dirigía a Atlanta más tarde.
Anteriormente, al comentar el caso la compañía señaló en su cuenta de Twitter que sus empleados reflejan su "cultura de tratar a toda la gente con dignidad y respeto". "Si no lo hacemos, no hacemos nuestro trabajo", reza el tuit de Delta Airlines.
Our employees reflect our culture of treating all people with dignity and respect, and if we aren’t doing that, we aren’t doing our... 1/2
— Delta (@Delta) 25 de julio de 2017
OTROS ESCÁNDALOS CON LOS AVIONES EN EU
Este no es el primer caso en que un pasajero de una aerolínea estadounidense se ve afectado por un escándalo semejante. El pasado abril se produjeron varios episodios polémicos vinculados con la aerolínea United Airlines. En uno de ellos, la publicación de un video en que se aprecia cómo un pasajero de la operadora es expulsado a la fuerza por negarse a abandonar su asiento sacudió una gran polvareda. Se había producido un problema de sobreventa de billetes.
A pesar de que el hombre decía ser médico y afirmaba que en la ciudad de destino lo esperaban sus pacientes, tres agentes del orden forcejearon con él hasta conseguir sacarlo de su asiento de un fuerte tirón. Después le propinaron un violento golpe en la cara con un reposabrazos y le arrastraron por el pasillo en aparente estado de inconsciencia.
El mismo mes de abril esta aerolínea protagonizó otro escándalo, cuando un empresario miembro del programa de viajeros frecuentes que había pagado unos mil dólares para viajar en primera clase de Lihue (Hawái) a Los Ángeles (California) la acusó de obligarle a abandonar un avión con la amenaza de llevárselo esposado. Según él, ya había tomado asiento cuando empleados de la aerolínea le pidieron que desocupase la butaca, ya que la necesitaba "una persona más importante que llegó en el último momento".
Solo unos días después se dio a conocer otro escándalo: la misma United Airlines expulsó de un avión antes de que el aparato despegara a una pareja que viajaba a Costa Rica para casarse.