Los cuerpos de tres jóvenes reportadas como desaparecidas fueron hallados en una fosa clandestina ubicada en el municipio de Atzacan, Veracruz. Las mujeres de 26, 19 y 17 años habían sido reclutadas para trabajar como edecanes en Puebla pero nunca volvieron. Hoy la familia de Nancy la sepultó en su natal Amatlán.
Nancy, de 26 años, tenía dos hijos, y había sobrevivido a una brutal golpiza que un hombre le propinó el año pasado.
Ciudad de México, 11 de julio (SinEmbargo/BlogExpediente).- El 30 de abril desaparecieron tres jóvenes de Veracruz, dos del municipio de Amatlán y una más de Córdoba, quienes habían salido de sus casas para buscar trabajo como edecanes: Nancy Rodríguez Morales, Anahí González y Alma Kristell Rodríguez, de 26, 19 y 17 años, respectivamente.
En Amatlán fue reportada como desaparecida Nancy "Lucy" Rodríguez Morales, de 26 años. Ella, al igual que sus otras dos compañeras, había salido a Orizaba para firmar un contrato y trabajar como edecán en el estado de Puebla.
Ese día Nancy dejó de reportarse con sus familiares, ya no respondía su teléfono, y empezó el tormento para las familias.
La última información que se tuvo de ellas fue que pasaron a la zona comercial Plaza Valle, de Orizaba, donde incluso dos de ellas se tomaron una "selfie".
Desde esa fecha, las tres empezaron a ser buscadas, pero sus familias ya no volvieron a saber de ellas hasta el pasado 6 de julio, cuando fueron encontradas sepultadas en una fosa clandestina ubicada en el municipio de Santa Ana Atzacan, Veracruz.
Ese día, habitantes del poblado Huacapan detectaron que en un predio, ubicado en las faldas del Cerro de Matlalapa, persistían olores fétidos y, tras descubrir restos humanos enterrados, avisaron a las autoridades.
Los restos exhumados pertenecían a tres cuerpos de mujeres, los cuales fueron analizados y cotejados con muestras de entrevistas "Ante Mortem" de personas reportadas como desaparecidas. Más tarde se confirmó que los cuerpos, ya en estado de descomposición, correspondían a las jóvenes que se encontraban desaparecidas, según las denuncias que previamente iniciaron los afectados ante la Fiscalía.
De inmediato fueron contactados los familiares de las víctimas, quienes acudieron a realizar la identificación oficial y posteriormente les fueron entregados los restos de las jovencitas.
En un comunicado oficial, las autoridades informaron que se iniciaron las carpetas de investigación por el delito de homicidio, y ofrecieron que los hechos se esclarecerán en su totalidad y se deslindarán las responsabilidades de cada caso.
LA DESAPARICIÓN DE NANCY
Antes de irse a buscar trabajo como edecán, Nancy Lucy Rodríguez Morales todavía fue a ver a sus hijos, un niño y una niña, de 6 y 8 años de edad respectivamente, como si hubiera ido a despedirse de ellos, porque estaban bajo la custodia de su padre.
Nancy tenía 26 años. Era la mayor de cuatro hermanos, dos mujeres de 12 y 20 años, y un joven de aproximadamente 18 años, quien se fue a vivir a Cancún, Quintana Roo.
Nancy y sus hermanos nacieron en la localidad Paraje Nuevo, municipio de Amatlán, donde fueron criados por su madre Norma Morales Reyes, con ayuda de su abuelo Cándido Morales, un vendedor de elotes, esquites y chileatole, que por años fue muy conocido en el lugar, pues cada ocho días, al terminar la misa de siete de la noche, su negocio estaba repleto. "Cándido La Muerte", le llamaban al que hace unos 10 años dejó de existir.
Tras algunos años viviendo en Córdoba, regresaron y se establecieron en la esquina de la avenida Adolfo López Mateos y la calle Vicente Guerrero; donde una vivienda de madera y láminas también sirvió para acondicionar una pequeña fonda, con la cual su madre se ayudaba para mantenerlos.
Nancy creció y tuvo a sus hijos, por quienes luchó hasta el último momento.
Entre llanto, la madre de Nancy dijo a sus vecinos que peleará por ganar la custodia y guarda de sus nietos, porque es lo único que le queda de su hija.
El 28 de julio del año pasado, Nancy fue golpeada y hallada tirada entre cañales junto al camino que conduce a la colonia Margarita Morán. Unos campesinos la encontraron y solicitaron la presencia de la Policía.
Paramédicos de la Cruz Roja lograron hablar con la mujer y les platicó que se había ido a fiesta la noche anterior. Mencionó que cuando regresaba a su casa fue interceptada por un sujeto que la golpeó, dejándola tirada entre los cañales.
Nancy fue trasladada al área de urgencias de la Cruz Roja, donde se recuperó y posteriormente fue recogida por su hermana.
DESPIDEN A NANCY
Al mediodía de este lunes, y tras ser velado su cuerpo durante dos noches, Nancy fue sepultada. Unos cuantos familiares, decenas de amigos y conocidos formaron el cortejo.
A las 12:00 del día, una carroza seguida por los dolientes se dirigió hacia la parroquia de "Nuestra Señora de los Dolores", donde el sacerdote Christian David Pizzano Hernández ofició una misa en su memoria.
Acompañada con cantos, la joven fue llevada hasta el panteón, donde fue sepultada.