De acuerdo a información de Boletín UNAM, integrantes del Instituto de Neurobiología demostraron que la administración epidural de oxitocina produce analgesia similar a la morfina, pero sin efectos secundarios. Los resultados fueron publicados en CNS Neuroscience and Therapeutics.
Ciudad de México, 15 de enero (SinEmbargo).- Científicos Universidad Autónoma de México (UNAM), descubrieron que la oxitocina, un neuropéptico, actúa como un potencial agente analgésico para reducir el dolor crónico en los pacientes con cáncer. Este hallazgo abre la posibilidad de que los pacientes tengan una mejor calidad de vida.
Los resultados del estudio publicado en CNC Neuroscience and Therapeutics, demuestran que la administración epidural de la oxitocina actúa como analgésico similar a la morfina pero sin los efectos como la sedación que impide a los pacientes convivir con su familia y el entorno, además de estreñimiento y depresión respiratoria.
La oxitocina es una hormona producida por los núcleos supraótico y paraventricular del hipotálamo que es liberada a la circulación a través de la neurohíipófisis. Se cree en el cerebro está involucrada en el reconocimiento y establecimiento de relaciones sociales. Luego de haber sido descifrada su estructura química (1953), las farmacéuticas comenzaron a sintetizarla con fines terapéuticos, entre ellos facilitar el parto y la lactancia, y detener el sangrado uterino.
“Esta neurohormona tiene receptores tanto en el sistema nervioso (cerebro y médula espinal) como en la periferia (útero), por lo que el efecto depende de la vía de administración. Para la inducción del parto en mujeres embarazadas es por vía intravenosa, mientras que nosotros la inyectamos en el espacio epidural, entre las meninges (membranas que recubren a la médula espinal) y las vértebras a nivel lumbar, cerca de la médula espinal”, explicó Abimael González-Hernández, coautor de la investigación.
Este hallazgo contribuirá a ofrecer una mejor calidad de vida a las personas con ese padecimiento, señaló Miguel Condés-Lara, quien dirige al equipo de investigadores del Instituto de Neurobiología (INb), con sede en Juriquilla, Querétaro.
De acuerdo al boletín UNAM, el dolor crónico es un síntoma que se presenta en más del 70 por ciento de los pacientes con cáncer avanzado. Se trata de una señal que anuncia peligro y si no se trata adecuadamente, puede convertirse en una enfermedad. Su tratamiento es complicado, por lo que la oportunidad de usar oxitocina como parte del tratamiento ser aun gran hallazgo.
